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La otra pasión de Garci: "Ojalá el Sporting tire para arriba"

El director de cine José Luis Garci profundiza en Relevo sobre el derbi asturiano entre Sporting y Oviedo.

José Luis Garci, en un acto./EFE
José Luis Garci, en un acto. EFE
Sergio Sánchez

Sergio Sánchez

La pasión rojiblanca de José Luis Garci (Madrid, 1944) sigue tan viva como cuando ganó la estatuilla de la Academia por 'Volver a empezar' en 1983. La primera película española premiada en Hollywood contó con el Sporting de Gijón en un papel principal. Cuarenta años después de su estreno y a las puertas del derbi asturiano, charlamos con el reconocido director de cine sobre sus orígenes, el equipo actual, Abelardo y su jugador preferido.

"Mi padre nació en Gijón, en el Humedal. Era aficionado al Sporting, llegó a jugar en los juveniles y eso se hereda", presume Garci como un guaje más. Un cariño que arrancó en la playa de San Lorenzo: "Desde que volvía con él a Gijón desde Madrid, en mis primeros veraneos a finales de los cuarenta, me hice del Sporting. Iba hasta a ver los entrenamientos. Representa al club de mi infancia".

Su corazón a rayas rojas y blancas lo comparte con el otro equipo de su vida: el Atlético de Madrid. Por eso, ambos fueron elegidos para convertirse en protagonistas de 'Volver a empezar. Ganadora del premio al mejor largometraje de habla no inglesa en 1983, narra el regreso de un exiliado a su ciudad natal tras la restauración de la democracia en España. Hubo planos de Mareo, la ciudad deportiva del Sporting, y se quiso recoger la esencia en detalles con "esas camisetas colgadas que antes se tendían recién lavadas en el Estadio", pero la secuencia más destacada fue el partido de Liga al que se llevó el set de rodaje. Enfrentó a gijoneses y colchoneros el 18 de octubre de 1981, con victoria local por tres goles a dos. En la película se ve reflejado desde el terreno de juego al palco, con Antonio Ferrandis, actor protagonista, flanqueado por Manuel Vega Arango y Alfonso Cabeza, máximos dirigentes por entonces de ambas entidades. "Me dieron todas las facilidades. Antes de rodar 'Volver a empezar' yo era ya muy del Sporting. Cuando jugaba en Vallecas, que estaba en Segunda, iba a verlo con aficionados rojiblancos como Arturo Fernández. Es un gran recuerdo", apostilla Garci.

"El Molinón puede ser un estadio inglés; es como una fábrica de metal a la película 'Qué verde era mi valle' de John Ford"

José Luis Garci Director de cine

Rodar en el estadio más antiguo del fútbol español tenía un sabor especial. "Es un campo muy norteño, puede ser un estadio inglés, está la famosa tribuna del Piles, siempre nublada, y los pajaritos que de vez en cuando caen por la valla", destaca con la capacidad para percibir historias de quien ha sido nominado cuatro veces al Óscar. Enseguida, le encuentra referencia cinematográfica: "Es como una fábrica de metal a la película 'Qué verde era mi valle' de John Ford". Y para terminar, añade en tono jocoso: "Luego, eso de que no se llame Antonio Gómez Ortiz o Julio Menéndez Gómez tiene su aquel. Se llama El Molinón, no como ahora que casi todos tienen nombres de presidentes o de personalidades".

Su experiencia fue más allá de la que vive un leal seguidor, pues pasó también por la directiva. "Formé parte de una junta muy atípica con el que fuera presidente del Principado y alcalde de Gijón, Vicente Álvarez Areces. Tuvimos un equipo muy bueno, en Europa. Había un equipazo con Quini, Ferrero, Maceda, Jiménez y todos aquellos", comenta de una etapa que duró tres años. Añoranza de aquellos momentos y, por supuesto, del eterno nueve: "Recuerdo la gentileza que tuvo Quini cuando hace unos años se enteró de que estaba de visita en Gijón en un restaurante y se acercó a darme un abrazo."

El presente del Sporting

Ha pasado el tiempo, pero la pasión no se rebajó. Ahora, sufre con los suyos en la categoría de plata y confía en que la nueva propiedad sea capaz de dar un impulso. "Sigo viéndolo", confiesa, "lo que pasa es que ahora estoy preocupado cada año, por si nos pasa como al Dépor y nos vamos al hoyo, no termina de hacerse un buen equipo", comenta con inquietud. En la presente temporada, continúa, "me tiene un poco desconcertado. Parece como que se arranca bien y de repente viene un bajonazo. Con Juanma Castaño, que es sportinguista y nos vemos una o dos veces al mes, hablamos y le digo mucho que no las tenemos todas con nosotros. Yo pensaba al empezar que podríamos hacer algo, pero ahora pido mantenernos este año y ya veremos el año que viene si se puede hacer un equipo mejor". Una solución que, en su opinión, pasa por los refuerzos: "Necesita un buen jugador por cada línea. Defensa, media, un buen delantero, pero bueno, no se puede todo de momento".

En el banquillo del Molinón, se sienta otro de los símbolos rojiblancos. Garci muestra plena confianza en él: "Abelardo va a intentar luchar como nadie por sacar al Sporting y subirlo. Ha sido uno de los grandes centrales de ese equipo". Convencido, rememora algunos de sus momentos como jugador: "¡Qué bien iba de cabeza en los córners, dios mío! El equipo no puede estar en mejores manos, pero necesita tres o cuatro buenos jugadores para intentar el ascenso a Primera".

Preguntado por cuál prefiere de la actual plantilla, no tiene dudas. "José Gragera", responde sin titubear. "Me parece inteligente, habilidoso y que ve muy bien el fútbol. Es joven, pero creo que va a ser un buen futbolista".

"Soy del Sporting y soy del Oviedo, rivalidad ninguna. Soy hijo adoptivo de ambas ciudades. La gente no lo puede entender"

José Luis Garci Director de cine

Con el derbi asturiano a la vuelta de la esquina y ligado profundamente tanto a la capital de la Costa Verde como a la del Principado, de su boca sale una respuesta fuera de lo común: "Soy del Sporting y soy del Oviedo, rivalidad ninguna. Soy hijo adoptivo de ambas ciudades. La gente no lo puede entender". En tono conciliador, lo explica con otro ejemplo: "He sido socio infantil del Real Madrid y soy del Atleti. No quiero nada malo para ellos". A continuación, matiza sus deseos sin estridencias: "Hombre si juegan entre ellos, prefiero que gane el Sporting o el Atleti." Y para terminar, recalca que su amor por un equipo no es excluyente, sino parte de su pasión por Asturias: "Ojalá el Sporting tire para arriba, y si no puede subir el Sporting, pues que suba el Oviedo".