Carlos Martínez, un obrero del gol al servicio del Andorra
El delantero catalán, debutante en Segunda con 36 años, anota sus primeros goles en la categoría de plata, en una tarde inolvidable para su equipo.

El protagonista del día en el Principado de Andorra y en la Segunda División es Carlos Martínez, un obrero del gol y del fútbol. El delantero catalán es uno de esos debutantes en la categoría de plata, al que le ha llegado el premio tarde, pero a tiempo. Con 36 años, fue uno de los delanteros referencia del tercer escalón del fútbol español, con una experiencia exótica en Japón incluida. Olfato goleador al servicio de Éder Sarabia.
Tras deambular por varios clubes catalanes, llegó al Olot, equipo que cambió su trayectoria deportiva, siendo clave en el ascenso del conjunto olotense a Segunda División B, con tres goles en el partido definitivo frente al Arandina. Carlos Martínez se destapó en la siguiente temporada, la 2013-2014, en la que fue el máximo goleador del grupo III de la ya extinta Segunda B, en un grupo en el que también brillaron delanteros como Jaime Mata en el Lleida, o Cristian Herrera y Sergio León en el filial del Elche.
Carlos Martínez seguía sumando temporadas en los campos de Cataluña y la Comunidad Valenciana, sin bajar de los dos dígitos en su cuenta particular de goles. Tras su paso por el Villarreal B, en dos temporadas en las que superó la treintena de dianas, probó fortuna en Tokio. No tardó mucho el Hércules es llamar al "killer" catalán para llevarlo de nuevo a su hábitat, en un proyecto ilusionante para devolver al conjunto alicantino a la categoría de plata. En este caso, la Ponferradina de Yuri e Isi Palazón se cruzaron en su camino y truncaron el ascenso del conjunto herculano a Segunda. Se le volvía a escapar a Carlos.
Tras un comienzo de campaña dubitativo en el césped y en los despachos alicantinos, Carlos Martínez puso rumbo a Andorra, a mitad de temporada, siendo el máximo goleador del Hércules en el año del "casi ascenso" y también en esa media campaña. Si el proyecto del Andorra es ambicioso en Segunda División ahora, en esos momentos en Segunda B, aún más. Tras caer frente a la Real Sociedad B, el Andorra de Carlos tendría que esperar para lograr el objetivo del ascenso.
Había pasado mucho tiempo siendo el delantero referencia de la categoría de bronce, teniendo siempre en el radar dar el salto al fútbol profesional por méritos propios y con un ascenso en el campo. Todo llega y a Carlos Martínez le cayó con 35 años, tras marcar diez goles y hacer que el Andorra acabara líder del grupo 2 de la Primera Federación, por delante de Albacete y Villarreal B, con los que mantuvieron una lucha titánica por ser campeones.
Los de este sábado son los primeros goles de Carlos Martínez en Segunda División, dándole una victoria vital a su Andorra, en una temporada en la que tiene una gran competencia, con Sinan Bakis en la delantera. Lo que está claro es que el obrero del gol no va a desaprovechar ni un segundo en la categoría de plata. Un hat-trick no es mala carta de presentación para esta temporada.