GIRONA 1- ATHLETIC 1

Un zarpazo de Iñaki corta la racha del Girona y enciende el liderato

El Athletic consiguió un punto en Montilivi en un gran partido que deja a los locales igualados en la punta con el Real Madrid.

Wiliams celebra el tanto del empate./EFE
Wiliams celebra el tanto del empate. EFE
Patxo De la Rica

Patxo De la Rica

Partidazo. De los que hacen afición. Una maravilla para el espectador, que disfrutó de dos equipos que no se esconden, que buscan al rival y que se desnudan en busca del gol. No es casualidad que estén siendo dos de las revelaciones de la temporada, sobre todo un Girona que quizá no tuvo su mejor día pero que tiene peligro cada vez que se acerca al área. También el Athletic, que fue superior en el tránsito del choque pero que pecó de una falta de eficacia que le dejó sin el premio de los tres puntos. Los goles de Tsygankov e Iñaki Williams fueron el colofón a noventa minutos de gran fútbol, aunque ninguno de los dos acabó contento.

Esa es la mejor noticia para los locales, que no se conforman con nada. Saben que deben afrontar un calendario complicado en las próximas semanas y buscaban mantener el liderato en solitario. Llegaban con cinco triunfos consecutivos tras la derrota ante el Real Madrid, pero tropezaron -si se puede decir así para un equipo histórico como este cuando no gana- y perdieron su ventaja con los blancos, ahora líderes aunque empatados con los catalanes.

Sorprendió el Athletic

El conjunto vasco demostró que esta temporada han dado un paso adelante en juego y en confianza. No le tembló el pulso para salir a presionar al Girona, proponerle un partido abierto y acumular ocasiones. Es cierto que todo se cimentó en una gran presión en el centro del campo, donde consiguieron que los de Michel no encontrasen los carriles centrales y únicamente pudiesen fiar su peligro al fútbol eléctrico de Savio. Si brillaron defensivamente los bilbaínos, también consiguieron superar la presión rival gracias a los giros de Oihan Sancet en el último tercio y a la claridad de Galarreta y Vesga jugando de cara.

Un pase de este último dejó solo a Guruzeta nada más comenzar el partido, pero el punta pensó que tenía menos tiempo y se lanzó al suelo para rematar cuando estaba solo ante Gazzaniga. Fue la primera de las cuatro intervenciones del portero argentino en una primera mitad en la que el Athletic fue superior. Sancet, con un tiro fuerte pero centrado también le hizo trabajar, al igual que Guru con otro golpeo desde la frontal y Vesga, con un zurdazo a la escuadra. También pudo adelantar al cuadro del Txingurri De Marcos, pero su disparo se fue muy alto cuando se cantaba el primero de la noche.

La efectividad que había disfrutado el Athletic en los últimos partidos desapareció en Montilivi. Y si perdonas al líder, estás muerto. Un Girona que ni siquiera necesita muchas acciones para anotar. Los de Michel no tuvieron su mejor día, sufrieron mucho más que otras veces y solo intimidaron con centros a Stuani, pero en el segundo tiempo celebraron en su primer acercamiento. Por si le faltaba algo a este equipo, también sabe adelantarse cuando no lo merece.

Tsygankov festeja su tanto junto a sus compañeros. EFE
Tsygankov festeja su tanto junto a sus compañeros. EFE

Una vez más fue Savinho el que generó el peligro con una de sus acciones individuales que terminó en un centro que se paseó por el área sin que nadie consiguiese despejarlo y llegando al segundo palo a Tsygankov. El ucraniano no falló y encontró el primer palo de Unai Simón para enloquecer a los más de 13.000 aficionados que acudieron al estadio catalán para disfrutar de un equipo en estado de gracia y que da gusto cómo encara los partidos.

Reacción bilbaína

El Athletic no acusó el golpe y siguió con el mismo plan, alternando presiones altas con transiciones rápidas tras las internadas locales. Así llegó el empate, en los pies de Iñaki Williams tras una gran asistencia de Sancet. El mayor de los hermanos estaba desaparecido, bien defendido por Miguel durante todo el choque, pero le fue suficiente con poder correr una vez a la espalda del lateral. Se filtró, controló hacia dentro y finalizó con su zurda ajustada al palo izquierdo de Gazzaniga. Un golazo que hacía justicia con lo visto en el cómputo global cuando faltaban algo más de 20 minutos.

Míchel, sobre el partido en Girona.

El gol reactivó el fútbol de Iñaki para que se convierta en el protagonista absoluto del tramo final, con permiso de su hermano, que volvió loco a Arnau primero y después a Couto. Iñaki lo probó con un golpeo al palo largo enviado a córner por el meta local y superó a Miguel siempre que quiso en este tramo, pero faltó nuevamente el acierto en los metros finales a los rojiblancos para poder sumar de tres. Mientras, el Girona lo intentaba en acciones sueltas de Tsygankov y Savinho, además de un par de centros laterales con las llegadas de Yangel Herrera.

Ninguno se escondió, siguieron buscando el tanto del triunfo pero el cansancio también apareció para bajar el ritmo en los últimos minutos. Nadie parecía conformarse con el empate, pero los bilbaínos acabaron más contentos por romper la racha de un histórico Girona que sigue enganchado en la lucha por el liderato pero que cede la primera posición al Real Madrid.

Ficha del Girona 1 - Athletic 1

Girona: Gazzaniga; Arnau (Couto, 68'), Eric García, Blind, Miguel Gutiérrez; Aleix García, Yangel Herrera (Kebe, 84'), Iván Martín (Pablo Torre, 77'), Tsygankov (Valery, 84'), Savio; Stuani (Portu, 68').

Athletic: Unai Simón; De Marcos, Vivian, Paredes, Lekue; Ruiz de Galarreta (Ander Herrera, 80'), Vesga, Sancet (Unai Gómez, 90'), Iñaki Williams (Ares, 90'), Nico Williams (Berenguer, 80') , Guruzeta (Raúl García, 73').

Goles: Tsygankov (min. 56), Iñaki Williams (min.68).

Árbitro: Mario Melero López amonestó a Guruzeta (52') y Blind (59').