El Raúl García persona tras el futbolista: "Cómo le explicas a tu hijo de 6 años que aunque todos le preguntan por su padre yo no soy más que nadie"
El exjugador se abre en la entrevista con Relevo a hablar del lado más íntimo que vive un futbolista de su nivel y trayectoria.
Tras un primer capítulo centrado en su adiós al fútbol y una segunda entrega sobre su salida del Atlético de Madrid, cerramos el círculo de la charla con Raúl García (Pamplona, 1986) con su lado más personal, el que va más allá del rectángulo de juego, la persona detrás del futbolista. Rulo, nuevo embajador de LaLiga, se abre a opinar sobre los posicionamientos de los jugadores, la educación de sus hijos o la vida familiar, la misma que le empujó a retirarse hace apenas unas semanas.
¿Tu vida normal cuando eras jugador te permitía ir a un parque con tus hijos, por ejemplo, o llevarles al colegio?
Siempre lo he intentado. Hay cosas que no las he hecho porque era difícil, no por mí sino porque los críos también tienen que entender lo que está sucediendo. Y hay situaciones un poco complicadas. Al colegio les intento llevar siempre que puedo, ahí es verdad que la normalidad es absoluta, quitando igual los primeros días que a la gente le puede sorprender, pero hay que darle esa normalidad. Hay otras cosas como por ejemplo en fiestas o en San Fermín, irme a Pamplona con los niños a las barracas, son cosas que normalmente no hago, no porque no quiera, me gustaría hacerlo. Pero si voy te encuentras con situaciones que al final no puedes estar con los niños, te acabas marchando porque ves que no es la mejor idea, pero es más por lo que sucede que por lo que a mí me gustaría hacer.
¿Por qué? ¿Porque la gente te marea o te increpa?
No, normalmente siempre a positivo, pero el positivo en exceso siempre es molesto, la gente viene con su buena voluntad de que le haces una foto, no entiende que el de al lado va a hacer lo mismo, el de al lado va a hacer lo mismo y tú estás con los niños haciendo un plan familiar. Yo siempre he dicho que intento respetar como me gustaría respetar a mí un plan de una familia. A mí ir a hablar a una persona cuando está con los niños es una situación compleja e intento evitarlo, pero siempre hay formas y formas y yo he tenido la suerte de que a nivel de respeto y educación me he encontrado con muy buena gente.
¿Cómo explicas a tus hijos que su padre no es más que otro por jugar al fútbol? Aunque ellos vean que se te acercan por la calle, o que sales en la tele…
Hay que ser muy claro. A mis hijos no quiero mentirles ni engañarles, hay que decirles la verdad pero también de la manera que hay que decírsela. Tienen que entender que hay niños que se van a acercar muchas veces porque me conocen, porque en casa sus padres les hablan de mí, y son situaciones que tienes que trabajar con ellos para que las entiendan. Tengo la suerte de que en el colegio me conocen, saben cómo soy e intentan también ayudar en ese aspecto, pero hay muchas cosas que se te escapan de las manos. Tú no puedes, por ejemplo, al pequeño de 6 años, que encima le gusta el fútbol, hacerle entender que su padre por ser futbolista no es más que nadie, cuando está todo el mundo preguntándole por su padre y él no pregunta por el padre de los demás. Es complicado, pero hay que estar muy encima, hay que hacerles entender que la vida no es eso, que somos igual que los demás y que hay que tener la misma educación y respeto que tienen que tener los demás.
Al inicio de la Eurocopa tu compañero Unai Simón fue muy criticado por no posicionarse preguntado por la opinión política de Mbappé sobre la extrema derecha. Tú sí que has tenido declaraciones contundentes en asuntos, no sé si políticos, más bien sociales, como asegurando que estás encantado de pagar más impuestos ¿Crees que el hecho de que os posicionéis es positivo? ¿Qué visión tienes tú de esto?
Partimos de la base de que se haga lo que se haga está mal. Si tú te posicionas te van a criticar porque te posicionas. Si no te posicionas van a decir que no quieres posicionarte porque te han influido. Yo creo que hay que tener respeto sobre todo. En política me cuesta porque no soy ni de negros ni de blancos. Me gusta que haya un poco de todo. Hay partidos políticos con los que tengas cosas en común, partidos que estén con otras ideas… Y no tienes por qué estar en contra de ninguno. Lo que hay que hacer es intentar trabajar para que todo el mundo tenga esa facilidad, como he dicho muchas veces, de tener una vida digna, entre comillas las facilidades que deberían tener todas las personas. Si estamos hablando de que una persona no puede tener una vivienda me parece que tenemos un problema. Y creo que eso no va con temas políticos. Cada uno tiene que pensar qué le gusta y qué no le gusta. Y como he dicho siempre, yo intento respetar y escuchar a todo el mundo porque puedes aprender cosas que quizás estabas en contra o no las veías así. Tampoco hay que ser ingenuo. Obviamente si te posicionas va a haber gente que está en la otra parte que quizás no es como yo, en el sentido de respetar y de entender que no todo el mundo tiene que pensar como nosotros o como yo en este caso. Cuando eres un personaje público tienes que medir mucho, porque la gente está esperando cualquier momento para hacer esa crítica. Pero es respetable todo. Yo siempre he dicho lo mismo, para mí el que opina me parece bien y el que no opina también.
¿Crees que hay poca conciencia social entre los futbolistas?
Hay muchos que no tienen conciencia social y otros que tienen mucha. No me gusta poner etiquetas. Yo separo los trabajos de las personas. Al final yo he convivido con amigos míos que por ejemplo trabajan en la obra y vivían fuera de la realidad. O sea, no va por trabajos, sino con la forma de ser. Y obviamente en el fútbol hay gente que tiene mucha conciencia y gente que no la tiene.
¿En los vestuarios se habla de por qué no hay jugadores que declaren públicamente su homosexualidad?
No, es que tampoco creo que sea un problema. Me explico, si alguien no lo dice porque no tiene la libertad para hacerlo sí es un problema, obviamente. Pero afortunadamente estamos dando muchos paso en ese aspecto de que la gente y la sociedad sean mucho más conscientes de que cada uno tiene su forma de ser, su forma de pensar y hay que respetarla. Y en el fútbol, no sé si eso es una coincidencia o no, pero si hay alguien que es así lo debería decir. Si hay alguien que tiene una mentalidad o una forma de pensar diferentes, no solo a nivel sexual sino de otro tipo de cosas, yo soy de los primeros que digo que creo que lo tiene que hacer.
Te leí también hablar sobre los padres de los niños que juegan al fútbol, donde hay mucho comportamiento que erradicar. ¿Qué solución se le puede dar?
Es difícil, como te he dicho, yo no solo con mi hijo, sino con mi hija ver situaciones de padres que no las puedes entender. Para mí es impensable ponerme a criticar a un chaval o a mi hijo o a un chaval compañero o a un árbitro mismo. No me sale, entonces no lo entiendo. Pero son situaciones que se dan y habrá que buscar la manera de cambiarlas. O por lo menos de no darlas como algo normal.
¿Y cuando las vives, te callas o les dices?
Depende, depende. Normalmente me callo, si no estoy, porque intento estar apartado de la mayoría de padres, quitándolos porque no tengo mucha relación, porque no quiero encontrar esas situaciones, porque me cuesta no decir algo. Pero hay momentos en los que hay que decirlas y creo que las cosas con la educación se pueden decir y se deben de decir.
Esta entrevista fue publicada originalmente el día 19 de julio de 2024 y ha sido recuperada como una de las historias más vistas de Relevo.com del último año.