Raphinha se pica
Suplente en los últimos cuatro partidos, el brasileño canalizó su frustración con una asistencia decisiva en Mestalla.
A Xavi le ha funcionado el truco más viejo del mundo: acción, reacción. Raphinha no terminaba de encontrarse sobre el terreno de juego y el técnico decidió concederle un descanso para resetearse. Desde el Clásico, el brasileño ha sido suplente en los cuatro partidos, quedándose incluso sin minutos contra el Athletic. Picado, el ex del Leeds transformó en Mestalla su frustración en una asistencia de oro que permitió el tanto de la victoria.
En dos meses, Raphinha solo se había caído del once en cuatro encuentros (de 13), tantas suplencias como en los últimos 10 días frente a Villarreal, Athletic, Bayern y Valencia. Sus estadísticas, un gol y una asistencia, ilustraban su discreta aportación tangible. Aún así, lo más preocupante venía siendo su creciente falta de acierto en el uno contra uno. Los extremos son muy dados a las rachas y el brasileño se había adentrado en una negativa. Tanto en la izquierda como en la derecha, donde pidió jugar en una breve charla con el técnico.
Señalado tras el Clásico
Tras el KO en el Bernabéu, Xavi y la plantilla hicieron autocrítica y al entrenador le quedó una sensación clara: debía agitar al equipo. Así lo hizo, quedando Raphinha como uno de los grandes damnificados.
La buena imagen ante Villarreal y Athletic fue un espejismo. Ante los 'leones', el 4-2-3-1 con Pedri como falso extremo, funcionó. Duró poco la sensación de haber dado con la tecla, ya que el Bayern se paseó en el Camp Nou. En Mestalla regresó el 4-3-3, esta vez con Dembélé, aún intocable, y Ansu Fati en los flancos.
Incapaz de adelantarse en el marcador, el elenco de Xavi fue de más a menos en el partido. De ahí que el egarense moviera triple ficha en el 56'. Raphinha sustituyó a Dembélé, de nuevo impreciso. A decir verdad, no es que el ex del Leeds entrara mucho mejor. Se le vio timorato y tratando de no equivocarse, cuando la esencia brasileña invita más a un fútbol alegre, vistoso y de riesgos.
Víctima de su propia electricidad
Hay otro factor que condiciona al '22'. Si algo caracteriza su juego es la verticalidad, dos cualidades que chocan con parte del diagnóstico realizado por el cuerpo técnico. El 'staff' considera que en los últimos encuentros el equipo ha atacado demasiado rápido, sin desgastar al rival ni obligarle a bascular. Además, Dembélé ya llena el cupo de electricidad en el tridente ofensivo.
Pero el fútbol es un estado de ánimo y el de Raphinha cambió por completo en tres segundos. Ese fue el tiempo que transcurrió entre que el extremo controló, levantó la cabeza y puso un centro milimétrico para que Lewandowski, con la punta de la bota, diera la victoria al Barça en Mestalla en el minuto 93'.
Décimo jugador de campo de la plantilla con más minutos
Con 754 minutos disputados, el 49% del total, Raphinha cierra el top-10 de jugadores de campo con más tiempo sobre el terreno de juego en el conjunto azulgrana esta temporada. El curso anterior, el atacante acumulaba 246 minutos más (un 18% más) tras los primeros 17 partidos del ejercicio.
Este martes, en Plzen, el de Porto Alegre tiene todos los números de volver a ser titular. La cita debería servirle para seguir recuperando la confianza perdida. El calendario apremia y antes de la concentración con Brasil para el Mundial ya solo restan tres envites: el de este martes en República Checa y los de Liga contra Almería y Osasuna.