Joao Félix: pensamos y ya veremos

El juego del amor tiene varios finales. El primero, ser correspondido. El segundo, fracasar. Y el tercero, que es el peor: querer, que te quieran y que todo se vaya a la mierda porque las circunstancias no acompañan. Es pura impotencia. Yo lo he vivido dos veces. La última, me despedí de ella en Madrid. Era de noche y hacía frío. "Pensamos y ya veremos". Ambos sabíamos que ni pensaríamos ni veríamos. Muchas veces se gana. Esta tocó perder.
La Cadena Cope publicó que Joao Félix se plantea salir del Atlético de Madrid en enero. Hace dos meses, rechazaron 120 millones de euros por él. "Yo lo que quiero es darle al club cosas que todavía no tiene", dijo en un documental. Era el ojito derecho de la afición. No me extraña. Pero las cosas cambian y el amor es cruel.
En los últimos cinco partidos ha disputado 39 minutos. El 'Cholo' cuenta con Ángel Correa, que sale a jugar como si fuera un chavalín recién ascendido al primer equipo. También con Antoine Griezmann, un fijo para él. Una cifra de 20 millones no se paga por cualquiera. No olvidemos a Morata, el nueve de España que lleva cuatro goles en Liga. Y, para acabar, Matheus Cunha. Un jugador hecho con el fin de defender la camiseta del Atlético de Madrid. Cinco nombres, dos puestos y un problema.

Simeone asume las riendas. Es el maduro de la relación. "Si Joao no alcanza su máximo nivel, será mi responsabilidad". A sus 22 años, al portugués el cuerpo le pide jugar todos los minutos. Desea ser un fijo, pero se ha convertido en un recurso.
¿Es culpa del Cholo? No creo. Su esquema nunca girará en torno a un jugador. Y más teniendo tantas alternativas. Entonces, ¿el jugador es el responsable? Me cuesta acusarle. Tiene magia. Nadie duda de que uno de sus chispazos puede romper cualquier partido. Pero no termina de encajar.
Las dos partes se quieren. Desean convivir en armonía. Pero cada vez tengo más miedo de que haga frío. Cualquier noche Joao Félix y Diego Pablo Simeone se encontrarán para decirse: "Pensamos y ya veremos".