Iñaki Williams, sobre el apoyo a su hermano: "No puede dudar porque cuatro anormales se metan con él"

Iñaki Williams asume los galones de ser uno de los líderes del Athletic Club. En uno de los momentos más complicados de la temporada, tras dejar escapar por tercera vez consecutiva la Europa League, fue el encargado de atender a los medios y de lanzar un mensaje positivo hacia una afición desencantada. "Es importante volver a contagiar entusiasmo y ganas de ir a Europa", considera, consciente de que han fallado. "Hay veces que te frustras y te vas jodido a casa, pero hay que levantarse".

El mensaje de levantar la cabeza no solo lo aplica al grupo, también hacia su hermano, que erró en la semifinal de Copa del Rey ante Osasuna. Iñaki volvió a dejar una gran reflexión al respecto, destacando en primera instancia que "la cara B de las redes sociales tienen estas cosas y uno no puede controlarlas". Además, desveló que aquella noche fue a casa de sus padres, donde aún vive Nico, para apoyarle. "Fui para decirle que los que le queremos nunca vamos a dudar de él. No tiene que dudar porque cuatro anormales se metan con él. Las cosas que le han hecho llegar hasta aquí son las que tiene que seguir haciendo".

El delantero, más allá de aconsejar a su hermano, ejerce también como uno de los capitanes en el grupo, incluso luciendo el brazalete como hizo ante el Mallorca. Un rol que "poco a poco" le ha ido llegando y que confía en saber gestionar bien porque ha tenido "muy buenos profesores" a su lado. "En el caso de Balen ha sido un jugador único, que nunca ha tenido un mal gesto y que siempre ha entrenado como un animal", dijo sobre el lateral, que deja el club a final de temporada. "Pero también tenemos a Óscar [De Marcos], a Iker [Muniain] o a Raúl [García] que siempre son un ejemplo para nosotros".

En este sentido, y aunque reconoció que se han ido "jodidos" muchas veces a casa en las últimas semanas, quiso dejar claro que "si algo tiene este equipo es que siempre vuelve a responder". Eso último, la capacidad de reponerse como lo hicieron tras perder la semifinal de Copa, parece un mensaje que ha calado en el vestuario y que quieren demostrar este sábado ganado al Villarreal, al que sigue considerando "rival directo".

Incluso, lanza un objetivo muy ambicioso. "No tenemos que ir a por lo mínimo (séptima posición), tenemos que aspirar a Europa League". Sorprende, teniendo en cuenta que en estos momentos la sexta plaza la ocupa el Betis, con 5 puntos de ventaja sobre el cuadro rojiblanco.

"Es cierto que en momentos claves nos ha faltado la pizca de suerte y los trenes se escapan. Muchas veces llega a ser frustrante. Pero no sirve lamentarse, quedan cinco finales y tenemos la esperanza y la actitud necesaria para afrontarlos. Todo pasa por sumar de tres el sábado". Un partido al que llegan en cuadro en la zona defensiva, con la sanción de Vivian y las lesiones de Iñigo Martínez y Yeray, que aún siguen trabajando de forma individual.

Iñaki, aun así, dijo que no sería "una decepción" no ir a Europa, aunque reconoció que "sería triste". "Sería un mazazo para todos. Cuando uno no cumple sus objetivos se frustra, pero no es algo que me plantee en este momento porque creo que el equipo va a estar en Europa y que todos vamos a celebrar y estar contentos a final de temporada".

En este tramo final de temporada, Iñaki tendrá también objetivos individuales. Suma nueve goles en esta temporada y está a cuatro goles de su mejor registro en la élite, conseguido en la 2018-19. Esos trece goles están en su cabeza. "A principio de temporada siempre me planteo superarlo. Me va a tocar hacer muchos goles, pero espero poder conseguir y que pueda ayudar al equipo. Es un registro que me gustaría superar para acabar la temporada de la mejor manera".