SEVILLA 0 - GIRONA 2

El Girona, un actor de lujo invitado al drama del Sevilla: Iván y Abel 'silencian' a un Pizjuán en llamas

La afición hispalense cargó duramente contra la directiva, en un buen partido de su equipo... que volvió a ser muy inferior en las áreas. El Girona de Míchel encadena su segunda victoria consecutiva.

José Manuel Rodríguez

José Manuel Rodríguez

Sólo hay algo más terrorífico en el fútbol que una grada muy enfadada. Una en silencio por la impotencia de la situación de su club. Así se quedó el Ramón Sánchez-Pizjuán ante una nueva derrota del Sevilla, esta vez frente a un Girona con las ideas claras y solvente en las áreas. Los cánticos y pitos se giraron, de nuevo, hacia una discutida directiva, aunque con el paso de los minutos se vivió una peligrosa asimilación de la realidad del club nervionense hoy en día.

Y eso que el Sevilla comenzó el partido con una alegría sorprendente. Con Valentín Barco como gran agitador del partido (partiendo, con balón, desde la posición de interior e, incluso, de mediapunta), los de García Pimienta encadenaron un primer cuarto de hora arrollador. Aunque sin gol, lo más importante en el fútbol. El Girona, por su parte, se mantuvo fue paciente en el arranque y con el paso el transcurrir de la primera mitad se fue haciendo más fuerte.

Las ocasiones más claras fueron para Isaac Romero, quien continúa sin ver puerta... mientras vive en una peligrosa soledad en la punta del ataque. Todo el peligro nervionense nació de la banda izquierda: Ejuke y Barco se entendieron bien. Sin embargo, la falta de pegada arriba se paga. Los de Míchel, tras la pausa de hidratación, modificaron varios aspectos y comenzaron a estar cómodos sobre el césped. Bryan Gil (que volvía a Nervión) se desmarcó como un buen agitador.

De sus propias botas nació un gol que ya le han metido en varias ocasiones a este Sevilla: un desajuste defensivo dejó en inferioridad a Carmona contra Bryan y Miguel, quien puso un buen centro para que Iván Martín, tras zafarse de Barco, abriera la lata. Un tanto que puso nervioso a un Ramón Sánchez-Pizjuán que vio cómo a la siguiente jugada su equipo empataba el partido, aunque el gol acabó siendo anulado por fuera de juego de Ejuke, el autor del mismo.

El descanso se hizo eterno y en la segunda mitad ocurrió lo esperado: el Girona entendió que ante la locura y el nerviosismo del Sevilla, la calma y la valentía son la mejor medicina posible. De esta forma, los de Míchel fueron claramente superiores. Bryan se reafirmó como el peligro más latente de los catalanes y Danjuma se sumó al ataque para desestabilizar a los nervionenses.

Como no podía ser de otra forma, el segundo gol del Girona llegó tras una acción de mala fortuna para el Sevilla. Un buen centro de Asprilla acabó en las botas de Francés, quien estrelló el balón en la mano de Isaac Romero. El VAR avisó a Sánchez Martínez y la jugada acabó con Abel Ruiz superando a Nyland desde los once metros... ante un Ramón Sánchez-Pizjuán que llegó al máximo nivel de desesperación. Los pitos se mezclaron con la impotencia ante una situación muy delicada.

En los minutos finales, García Pimienta buscó agitar el partido a base de cambios, pero lo único que encontró fue a su equipo golpeándose una y otra vez contra un muro de cristal. Sin confianza para, incluso, disparar a puerta... y ante un equipo que vuelve a entonarse y sentirse cómodo sobre el césped. Sin tiempo para más, Sánchez Martínez pitó tres veces y los puntos volaron de Nervión como ya es habitual: cuatro derrotas consecutivas del Sevilla su propia casa (en LaLiga).

Ficha técnica

Sevilla: Nyland; Carmona (Idumbo), Badé, Marcao, Barco; Agoumé (Sow), Lokonga, Juanlu (Peque); Lukebakio (Navas), Isaac, Ejuke.

Girona: Gazzaniga, Francés (Arnau), David López, Blind, Miguel; Herrera (Solis), Romeu, Ivan Martín (Asprilla); Bryan (Portu), Abel, Tsygankov (Danjuma).

Goles: 0-1 (Iván Martín, 41'), 0-2 (Abel Ruiz, 73').

Árbitro: Sánchez Martínez. Iglesias Villanueva (VAR). Amonestó con amarilla a: Lokonga, Asprilla, Badé y Francés.

Estadio: Ramón Sánchez-Pizjuán.