Este Barça de Lewandowski da para ganar pero no para campeonar
Otro gol del polaco y las paradas de Ter Stegen sustentan al equipo de Xavi en Mallorca, donde su juego volvió a dejar muchas dudas.

El Barça cumplió en Mallorca, no sin sobresaltos, gracias a otra aparición magistral de Lewandowski. Con su victoria, sigue aferrado a la cabeza de LaLiga con el alivio de poder centrarse en la Champions, donde le aprieta el zapato, y preparar el Clásico del Bernabéu con más fortalezas que bajas.
El juego, qué cosas con Xavi a los mandos, ahora mismo parece lo de menos. El dibujo, forzado por las ausencias, pareció asimétrico desde el arranque. Piqué y Alba regresaron al once y volvieron a comerse a sus espaldas la mejor acción del Mallorca. Le deben una (otra) a Ter Stegen. Ansu volvió con más brillo. Participativo, motivado y protagonista en el 0-1. Pedri y Raphinha se quedaron en el banquillo, remojados en formol. El Inter será otra cosa.
TER STEGEN
😎 Me reafirmo
Lo suyo suele ser empezar por los goleadores. Así somos de resultadistas. Sin embargo, Ter Stegen merece dar la vuelta a la lista de prioridades. No es algo puntual. Es una constante. Su inicio de temporada está siendo fabuloso. Su parada en el primer tiempo fue antológica, deprimió al Mallorca y permitió al Barça seguir jugando con viento de cola. Los campeones dominan en las dos áreas. Y este equipo, con Lewandowski en una punta y el alemán en la opuesta tiene pinta de hacer grandes cosas. Lo que aún queda en el aire es si ellos solos, de no seguirles nadie a ese nivel, dan para campeonar a corto plazo. Hoy, ni de broma.
LEWANDOWSKI
✔ Un tuit que me representa
Ahora sí. El polaco. El problema es que se acaban las palabras. Su fichaje es más emocionante cada día que pasa. El culé debería ir a Canaletas sin esperar a como acaba la temporada. Haberle sacado del Bayern y disfrutar de él en tal estado de forma es algo que nadie imaginaba ni con la más poderosa de las palancas. Su acción en el gol de la victoria es de auténtico crack. Él lo cocinó y él mismo le dio el punto en el grill. Su manera de flotar en el área mezcla la elegancia de Benzema, la precisión de Messi y la potencia de Mbappé. Normal que sea un Balón de Oro por mucho que no tenga trofeo.
Ni habiendo visto casi la totalidad de los partidos que jugó con el Bayern, me esperaba un Lewandowski así tan pronto. Solidario, autosuficiente, líder. Como me dijo @DomeTorrent, se le ve disfrutando. Y ya se sabe, cuando se disfruta, todo fluye mejor.
— Juanma Romero (@Guardiolato) October 1, 2022
XAVI
💬 Tengo un Whatsapp para ti...
Perdona que vuelva a escribirte, míster. Pero es que hoy he soñado de nuevo con lo de juego de posición. No lo veo por ningún lado. Y el mayor problema no es la falta de palabra. Es el daño que Inter le puede hacer en quince días a esta defensa. No tener la pelota y jugarla con tal imprecisión es un suicidio en toda la regla, con las líneas tan separadas y los extremos tan abiertos. Salvo Busquets, nadie garantiza la fiabilidad en el pase. A Dembélé y a Ansu ya los conoces. El vértigo lo confunden demasiadas veces con la imprudencia. Gavi se despliega pasado de revoluciones y la pierde tanto como la recupera. Y Kessié, en ese rol de interior, pues tampoco es un maestro de la pulcritud. Va, viene y atropella. Entre todos regalan demasiadas veces al rival el don de la respuesta.

AGUIRRE
👀 Poco se habla de...
No sé si es más psicólogo que entrenador. Sin olvidar su faceta de deje cómico en cada escena que nos anima y nos alegra. Lo que tengo claro es la influencia de su librillo en cada equipo que toca. Este Mallorca es físicamente una roca, con un repliegue en toda regla. Sabe lo que quiere con balón. Aprovecha bien las bandas, Y llega en manada al ataque. Perder ante el Barça entra dentro de los planes. Pero tiene pinta de que va a quedar más arriba de lo que la mayoría presupone. Aferrado al atrevimiento de Ruiz de Galarreta y de Antonio Sánchez, y al amor propio de Muriqi, hacen del conjunto bermellón una atracción de las buenas.
LAS CARAS
🤳 Mi fondo de pantalla
La cara, dicen, es el espejo del alma. Por eso, en este entretenido pero accidentado partido, me quedo con un colax entre los rostros de las novedades del Barça y la de los revulsivos utilizados por Xavi. Salvo contadas excepciones, los gestos de Piqué, Alba y Ansu fueron los de aquellos alumnos que llegan al examen sin haberse leído los dos últimos temas. O los de aquellos con la presión de necesitar una buena nota de corte para ir a la ciudad, en busca de la Universidad. Con tantas ganas como temores. Es lo que tiene saber que no son titulares y que su futuro, en clave blaugrana y rojigualda, está perdiendo color. Raphinha y Pedri, por contra, esperaban en la banda su salida relajados y mirando al frente con galones, con la seguridad del alumno al que le sobran los sobresalientes. Su suplencia fue por prescripción técnica. Son tan determinantes casi siempre con Xavi, como con Tite y Luis Enrique.