El Benito Villamarín estalla contra el Betis y su directiva: "¿Dónde está el dinero?"
La afición verdiblanca cargó contra el palco desde antes del partido, pero los goles del Alavés volvieron a prender la mecha.

La tensión ha vuelto al barrio de Heliópolis. La durísima derrota del Betis ante el Alavés, que encima deja al Sevilla por delante -superándolo en puntos- en la clasificación 95 jornadas después, hizo estallar a un Benito Villamarín cansado de la actual situación. El pésimo inicio de año se ha alargado hasta pasado el ecuador del mes de enero, no habiendo puntuado aún en liga y siendo eliminado en Copa tras una goleada del Barcelona.
Y todo ello repercutió en las gradas. Ya desde antes del encuentro, algunas zonas del estadio lanzaron cánticos contra los dirigentes de la entidad: "¡Directiva, dimisión", o "Haro salta al campo y mete un gol", algo que ya cantaban a Manuel Ruiz de Lopera en sus últimos años al frente del club verdiblanco. El palco fue el objetivo de las críticas... pero con el paso del minuto se fue expandiendo hacia todos los estamentos.
Ya con el primer tanto del Alavés hubo enfado, pero nada comparado con lo que se vivió en la segunda mitad. La expulsión de Perraud cultivó una derrota muy dolorosa, con Kike García como gran protagonista de la tarde. Ya desde el minuto 80, justo después del 1-2, fueron muchos los aficionados que comenzaron a abandonar el Benito Villamarín. Los cánticos de "¡Directiva, dimisión!" fueron reemplazados por el clásico "¿Dónde está el dinero?", en señal de protesta contra la inactividad del Betis en el mercado de fichajes.
Un clima de tensión... que sólo hizo acrecentarse con el tercero de Kike García. Las gradas se vaciaron en tromba, quedándose una foto impactante que recuerda a etapas muy anteriores y oscuras del Betis. El enfado es descomunal. Y con el final del partido se desató una tormenta de pitos sobre los futbolistas. "¡Jugadores, mercenarios!" y "¡Esta camiseta, no la merecéis!" sonaron en el Benito Villamarín.
En definitiva, un clima de hartazgo importante... y muy peligroso. El Betis, con la derrota ante el Alavés, se queda a, al menos, cinco puntos de Europa. Justo antes de visitar al Mallorca, equipo que marca el acceso a Conference League. Un drama mayúsculo e inédito en la era Pellegrini.