FC BARCELONA

El Barça ya puede cumplir con el Fair Play: el caso Olmo depende de la RFEF o de la vía judicial... y tiene un argumento fuerte

El club azulgrana ya tiene constancia de los pagos por los palcos VIP, aunque todo apunta a que será el juez quien decida.

Dani Olmo y Joan Laporta en la gala del Balón de Oro. /GETTY
Dani Olmo y Joan Laporta en la gala del Balón de Oro. GETTY
Sergio Fernández
Alberto Martínez

Sergio Fernández y Alberto Martínez

Después de una época oscura en lo económico, con palancas que no se materializaban, ingresos insuficientes y deudas que seguían lastrando la economía, el FC Barcelona ya tiene evidencias suficientes para probar que puede solucionar su Fair Play financiero... al menos para esta ventana de enero. Solo queda que todo llegue a LaLiga y se valide para certificar que está en la regla del 1:1 después de que ya tengan constancia de que han recibido los pagos de la venta de los palcos VIP a unos inversores qatarís -de los que la entidad no ha especificado más-, por lo que esos 100 millones de euros le sirven al Barça para compensar el dinero ausente de Barça Studios y alcanzar la normalidad. El euro que entra es el que puede salir para configurar la plantilla.

Si lo hubieran podido demostrar esto hace 48-72 horas, no hubieran tenido para inscribir. No lo hicieron, y por eso la normalidad tiene asteriscos, porque esta operación no se materializó antes del 31 de diciembre, fecha en la que a Dani Olmo y Pau Víctor se le expiraba la licencia federativa. Y de ahí todo el lío: la firmeza de LaLiga al desinscribirlos y la fuerza del Barça en mantenerse moderadamente optimista.

En el Camp Nou no perdieron la esperanza porque sabían que el dinero llegaría y que al final podría ser la justicia la que determinará si le dan las medidas cautelares para poder inscribir de nuevo a ambos futbolistas. Y todo se basa en el en el artículo 141.5, el que no permite que un jugador sea inscrito en dos ocasiones por un mismo club en una temporada. El Barça tiene un argumento fuerte, de peso, para intentar que un juez aplique unas medidas cautelares que dejen las cosas cómo estaban antes del 31 de diciembre: esta situación no se había dado nunca.

No hay ningún caso como el del Barça previo al actual. Nunca se ha aplicado esta norma en estas circunstancias, en las que ya con la temporada empezaba se desinscriba a un jugador. Hay otros ejemplos claros y dónde se aplica como el que ocurrió la temporada anterior con Samu Omorodin. El delantero ahora en el Oporto tenía ficha con el Granada en el curso 2023-24 cuando lo repescó el Atlético. Posteriormente, el club rojiblanco quiso cederlo, y el Granada se interesó, pero no podía regresar, ya que no puede tener dos licencias en el mismo curso en el mismo equipo. Y, al final, acabó en el Alavés.

Hay otros supuestos, como la de un futbolista que empieza la temporada en un club con el que se le tramita una ficha, después se va cedido y en el mercado de enero lo quieren repescar. Es como si este verano el Barcelona hubiera cedido a Fermín López y quisiera repescarlo en enero. No lo podría inscribir si ya le tramitó antes licencia. Pero ese no es el caso de Olmo o de Pau Víctor. Ni tampoco el espíritu de esa norma. Por eso el Barça considera que es una excepción, y que los puede inscribir. O, al menos, pelearlo con algunas garantías.

Ahora la pelota está en el tejado de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) después de que el Barça les pidiera que les tramitaran la licencia pese a la desinscripción de LaLiga. Y es muy difícil que haya un cambio de opinión, por lo que lo normal es que el Barça se lleve el caso a la vía judicial. Y al ser un tema excepcional, ajeno a la intención con la que reguló ese artículo 141, si el juez que recibe el caso se muestra comprensivo, se le podría aplicar ese derecho por lo expuesto anteriormente.

Pero también importa mucho la actitud de la Federación: tendrá que celebrarse una vista para las cautelares en las que la actitud de los abogados de la RFEF, si están de acuerdo con la excepción que está afectando al Barcelona por este artículo, puedan presentarse mucho más "amistosamente" que en otras situaciones.

Si no hay inscripción, el Barça podría ahora ir al mercado

En el peor de los casos, el Barcelona podría acordar con Dani Olmo una marcha por seis meses ya con el fair play regulado y salir al mercado a reforzarse, ya que está en disposición de hacerlo. Un ejemplo sería que Olmo fichara por el Manchester United (o cualquiera que no fuera un rival en Champions) con un contrato de seis meses y al mismo tiempo firmará su nuevo contrato con el Barcelona a partir del 1 de julio. Sería una inscripción nueva, podría hacerlo perfectamente. Todo esto dependerá de este viernes y de las posteriores reclamaciones del club azulgrana, que lo está preparando todo para ello.

Este jueves se han reunido en el Camp Nou la plana mayor, con Joan Laporta al frente, el tesorero Ferran Olivé y el directivo de fútbol Joan Soler. Han estado más de cuatro horas tratando el asunto y preparando una exposición que estaría prevista para este viernes. El Barça tiene planeado dar explicaciones o decir algo antes de la conferencia de prensa de Hansi Flick en la previa del encuentro ante el Barbastro. Y en ella se explicará todo lo expuesto anteriormente.

La situación del 1:1 en el Barça no será definitiva ni para siempre porque dependerá de la economía que sigue en horas bajas pese a los nuevos ingresos. Están presupuestados 28 millones de euros de un regreso al Camp Nou difícil de producirse este curso y el próximo verano hay otros ingresos de Barça Studios que todavía se desconoce si se llevarán a cabo o no.