ATLÉTICO

El Atlético de Madrid no reacciona tras encajar lejos del Metropolitano y preocupa a todos

El club colchonero, fuera de casa, no ha remontado para ganar ninguno de los siete encuentros que comenzó perdiendo en Liga.

Lino se lamenta tras una ocasión fallada en el Pizjuán. /AFP
Lino se lamenta tras una ocasión fallada en el Pizjuán. AFP
Marcos Durán

Marcos Durán

El Atlético de Madrid, esta temporada, ha jugado 35 partidos entre Liga, Copa, Champions y Supercopa de Europa. De esos 35, ha ganado 22, ha perdido 8 y ha empatado 5, incluyendo prórrogas. Pero hay algo que está pesando mucho en el vestuario rojiblanco y es la falta de reacción que vemos cuando el equipo rival se pone por delante y claro, eso preocupa.

Ya lo dijo Jan Oblak tras la derrota contra el Sevilla en el flash de Dazn: "Hemos entrado mal en el partido, una historia que se repite bastantes veces, tenemos que cambiar ese chip. Cuando entras así y te marcan tienes que remontar. Ellos han jugado muy bien, han hecho todo lo posible para ganar porque lo necesitan, están muy abajo. Han hecho un buen partido, nosotros empezamos mal, nos castigaron, no es la primera vez, nos sigue pasando, hasta que no corrijamos eso es complicado ganar los partidos fuera".

El esloveno es uno de los pesos pesados del Atlético de Madrid, segundo capitán tras Koke y, cuando habla, hay que escucharle. Frases como "una historia que se repite bastantes veces", "cuando entras así y te marcan tienes que remontar", "nosotros empezamos mal, nos castigaron, no es la primera vez", suena fuerte en el vestuario, sobre todo por quien las dice.

En Liga, el Atlético de Madrid comenzó y terminó perdiendo seis partidos: contra el Valencia en Mestalla, contra Las Palmas fuera, contra el Barcelona en Montjuic, contra el Athletic en Bilbao, contra el Girona también a domicilio y en la última contra el Sevilla en el Sánchez-Pizjuán. ¿Qué tienen en común? Que fuera de casa, sin el apoyo del público, el equipo no tiene fuerza de reacción: "Hasta que no corrijamos eso es complicado ganar los partidos fuera", afirmó Oblak. Y los números corroboran esas palabras.

Por el contrario, empezó perdiendo y empató contra el Real Madrid en el Bernabéu (el único resultado positivo fuera de casa y casi en el descuento) y ganó remontando contra el Cádiz en el Metropolitano y también contra el Villarreal en casa, dos equipos de la zona baja de la clasificación. El balance es en liga de 6 derrotas, 1 empate y dos derrotas tras ponerse por detrás en el marcador. Y eso es mucho. En Champions, la cosa cambia. Ante Feyenoord y Celtic el equipo tuvo buena reacción, sobre todo fuera de casa.

Además, el único partido perdido en el Metropolitano en todas las competiciones fue ante el Athletic en Copa, donde se vio buena reacción pero el balón no entró (como dijo el Cholo), aunque al ser de una eliminatoria a doble partido, los de Simeone tienen otra oportunidad.

Calendario exigente... para reaccionar

Al Atlético de Madrid le espera un mes difícil, con 8 partidos en 31 días, con la visita en Champions a San Siro, en Copa a la Catedral, la vuelta de Champions, partido contra el Barcelona en el Metropolitano y dos salidas contra equipos de abajo como Almería y Cádiz, que se están jugando semana a semana los puestos de descenso.

El equipo de Simeone, si quiere aspirar a algo más que ser cuarto en liga y clasificar a Champions, tiene que saber reaccionar en estos momentos donde los rivales se ponen por delante. El partido ante el Inter en Milán va a ser clave y un punto de inflexión, mientras que con el Athletic, con la obligación de remontar y siendo fuera de casa, el equipo rojiblanco tendrá la oportunidad de cambiar las estadísticas con 90 (o 120) minutos por delante.

Lo que resta de febrero y el inicio de marzo será clave para las aspiraciones de un Atlético de Madrid que por segundo año consecutivo tiene la liga muy lejos por culpa de no saber reaccionar y esta temporada no han sido momentos puntuales, si no que se han ido repitiendo con el paso de los meses. Y todo eso con la baja de Morata, que deja cojo el ataque del club rojiblanco tras su lesión de rodilla.