El Athletic se pone como prioridad la renovación de Nico Williams
El pequeño de los hermanos tiene una cláusula de 50 millones y finaliza contrato en 2024. Aún no han existido reuniones formales, pero en el club bilbaíno buscan un acuerdo que espante a los clubes de la Premier.
Nico Williams ha vivido un 2022 de explosión futbolística, multiplicando su valor de mercado y poniéndole en el escaparate de los mejores clubes del mundo. La Premier, siempre temible por su músculo financiero, es el principal enemigo de un Athletic que se ha marcado como prioridad alcanzar un acuerdo de renovación que permita aumentar la cláusula de rescisión actual (50 millones) y ampliar la vinculación de Nico más allá de 2024, cuando expira su actual contrato.
El mercado de invierno en Bilbao se vive con tranquilidad, pero con prudencia. La dirección deportiva está centrada en el filial, que camina penúltimo en 1ª RFEF y para el que se buscan refuerzos que minimicen el riesgo de descenso. El resto de operaciones ordinarias pasan por alguna cesión de jugadores sin minutos, pero la sombra de la Premier hace que también tengan que estar alerta a cualquier movimiento con el jugador de mayor valor de la plantilla: Nico Williams. Saben que es un jugador muy apetecible pero confían que en enero no haya movimientos.
En el Athletic transmiten tranquilidad por las primeras conversaciones que han tenido con su entorno y confían en que el jugador quiere seguir progresando en Bilbao. No han existido reuniones oficiales para encarar la renovación todavía, pero saben que su renovación no va a ser sencilla y que tendrán que rascarse el bolsillo para mejorar el sueldo de un jugador que mantiene el contrato que se renovó automáticamente cuando cumplió 10 partidos con el primer equipo.
Un sueldo que no es acorde a su estatus actual, siendo uno de los jugadores más utilizados por Ernesto Valverde y mundialista con España. De hecho, en Bilbao se vivió el Mundial con cierta preocupación, conscientes de que todas las buenas actuaciones de Nico significarían mayor foco mediático y más trabas para cumplir el principal objetivo del club a día de hoy.
La prioridad absoluta, conscientes de que el Caso Iñigo Martínez tiene difícil solución, es la renovación del pequeño de los Williams. Oihan Sancet está en la misma situación, también termina en 2024 y tiene una cláusula de 45 millones, pero en este caso se confía plenamente en lograr un acuerdo por lo que se trabajará a fuego lento.
A día de hoy, la situación en términos 'oficiales' es idéntica a la de hace unos meses, cuando Nico recibió la primera llamada de Luis Enrique. El club le ha traslado al entorno la intención de renovar y el interés en mejorar su contrato, pero por el momento no hay avances en ese sentido. Tras el Mundial y las fechas navideñas, se presentan meses de mucha intensidad para intentar llegar a verano con esta operación zanjada y evitar que Nico llegue a vivir una situación similar a la que está experimentando Iñigo Martínez, llegando al último año de contrato sin renovación.
La duda de Iñigo Martínez
Más allá de Nico Williams, el otro gran interrogante es Iñigo Martínez. No tanto por su continuidad, que es muy complicada a día de hoy, si no por el futuro de la zaga rojiblanca si se confirma la opción más viable a día de hoy, que es un 2023-24 sin Iñigo en la plantilla. En este caso también parece descartado que un club se anime a pagar por su fichaje, algo que en Bilbao no verían mal si la oferta es buena.
En ese caso, David García es el nombre que más se le ha relacionado con el Athletic, pero a día de hoy no ha habido ningún acercamiento de los actuales responsables rojiblancos con el entorno del central de Osasuna, que esta semana visita Bilbao.
El canterano rojillo tiene una cláusula de 20 millones, que sería su precio de salida en caso de que algún club quiera ficharle. La actual política de Osasuna es la de no negociar las cláusulas de sus principales jugadores, como Moncayola, Aimar Oroz o el propio David. En ese sentido, se antoja complicado que el Athletic busque esta incorporación con dos centrales titulares como Yeray y Vivian, que cada día crece en su rendimiento y se asienta más como titular.