El Benfica se encomienda a Bruno Lage, el entrenador que potenció a João Félix
Rui Costa destituyó a Roger Schmidt tras la cuarta jornada de liga y recupera a un antiguo técnico benfiquista.
El Benfica se enfrentará al Atlético de Madrid y al Barcelona en la fase de liga de la UEFA Champions League. Ambos encuentros, en la Luz, en lo que, aparentemente, se puede tratar de dos compromisos de dificultad media para los dos elencos españoles. Ahora, quizá, se puede percibir desde la óptica rojiblanca y azulgrana como una visita aún más compleja que hace una semana. Se debe nada más y nada menos que al cambio de rumbo dado por Rui Costa en el banquillo: fuera Roger Schmidt, dentro Bruno Lage.
La inercia benfiquista ya hacía prever que el desenlace podía ser este. Desde la marcha de Enzo Fernández en enero de 2023, poco después del Mundial de Catar, el Benfica que encandiló y que acabó por encima del PSG en la fase de grupos de la Champions 22-23 se apagó. Le dio para ganar la Primeira Liga esa temporada por la amplia ventaja que tenía, pero las sensaciones cada vez eran peores y se confirmaron en un curso 23-24 donde solo fue capaz de levantar la Supercopa, en verano. Ni Liga, ni Copa ni Copa de la Liga.
Aun así, Schmidt continuó... pero la destitución del alemán llegó de manera fulminante hace una semana, después de no ser capaz de vencer en su visita al Moreirense. Los encarnados, incluso, salvaron los muebles en el añadido con un penalti transformado por Marcos Leonardo (ni siquiera ya forma parte de la plantilla), pero el empate no le impide estar ya a cinco puntos del líder, un Sporting muy sólido y gran favorito a revalidar el título.
No es una situación crítica, pero ya empieza a ser preocupante. Por eso, Rui Costa acude a lo que en el pasado ya funcionó bien: darle la nave a Bruno Lage. En su primera etapa, que comenzó en enero de 2019, dirigió al equipo durante 19 partidos, con 18 victorias y un empate. Fue capaz de triunfar con autoridad en el Dragão y en el Alvalade y solo se dejó dos puntos por el camino contra el B SAD. Brillante y merecido campeón con João Félix como uno de los principales estandartes. Félix ya se había estrenado en el primer equipo de la mano de Rui Vitória, pero fue con Lage con quien el actual jugador del Chelsea acaparó todos los focos. En verano de 2019, fue vendido al Atlético de Madrid por 126 millones de euros.
La temporada siguiente, en cambio, fue distinta para Bruno Lage. Deportivamente no le fue bien al Benfica, aunque sí le deparó un reencuentro con una persona (y un entrenador) muy especial para él: Carlos Carvalhal. Se sacan apenas diez años, pero Carvalhal es como un padre para Lage, puesto que este último, natural de Setúbal, comenzó a entablar amistad con el ex técnico del Celta cuando este dirigía al Vitória de Setúbal en la temporada 2003-04. Lage acudía a las sesiones de entrenamiento para empezar a curtirse, lo cual llamó la atención de Carvalhal. Fue ahí cuando ambos empezaron a hablar sobre fútbol. Su relación personal había comenzado, pero su relación profesional llegó años más tarde.
Carlos Carvalhal, un estudioso del fútbol y de la preparación física, inició su etapa en Inglaterra en las filas del Sheffield Wednesday, donde reclamó la presencia de Bruno Lage. "Invité a Bruno a unirse a mí. Fue muy interesante para él estar conmigo, aprender y saber que no todo es siempre fácil en fútbol". Lo acompañó, también, en el Swansea, antes de que ambos separaran sus caminos. Lage regresó a las categorías inferiores del Benfica para dirigir al filial en Segunda Liga, mientras que Carvalhal se tomó un paréntesis que retomó en 2019 en el Rio Ave, conjunto de Vila do Conde, localidad cercana a su Braga natal. En el Benfica - Rio Ave de aquel ejercicio 19-20 se produjo ese duelo especial en los banquillos entre maestro y discípulo, que se repartieron elogios en la previa.
Da la casualidad de que el destino vuelve a cruzar a Lage y Carvalhal, de regreso a Portugal al mismo tiempo. Después de finalizar su anterior etapa en Portugal en Benfica y Braga, respectivamente, probaron fortuna en distintas ligas. El primero de ellos dirigió a Wolverhampton y Botafogo, mientras que el segundo tuvo una breve aventura en Al-Wahda (Emiratos Árabes Unidos) de cuatro partidos, 29 partidos comandando al Celta de Vigo y apenas once en el banco de Olympiacos. Carvalhal volvió al Braga en pleno verano y con dos rondas previas de Europa League por superar (lo hizo con éxito) y ahora lo hace Lage al Benfica. El 5 de enero, regalo de Reyes para los dos, que protagonizarán un interesantísimo reencuentro, también, en la última jornada del campeonato. Quién sabe con qué objetivos clasificatorios en mente.