COREA DEL SUR
El histórico año del Gimcheon Sangmu, el equipo militar surcoreano
Formado por jugadores que están haciendo la 'mili', acabarán segundos o terceros en la K-League 1.
Sobre el papel, Corea del Sur y sus vecinos del norte están en guerra. Por ello, ambos países cuentan con un servicio militar obligatorio para poder estar preparados por si el conflicto se acrecienta. Evidentemente, los deportistas no están exentos del cumplimiento de este deber y aunque hay algunas excepciones, como ser campeón en los Juegos Asiáticos o ser medallista en Juegos Olímpicos, que permite realizar una formación mínima. Los deportistas tienen que cumplir este periodo militar entre los 18 y los 35 años, igual que cualquier otro ciudadano.
Esto provoca que algunos futbolistas tengan que aparcar sus carreras por un tiempo (la 'mili' dura un mínimo de 18 meses), para poder cumplir con su deber. Ante esta tesitura, en 1984 surgió un proyecto con el objetivo de que los jugadores que estaban cumpliendo con el servicio militar siguieran con su actividad profesional. Por ello, se fundó el Sangmu Soccer Team, un equipo destinado a esos futbolistas que querían seguir en activo mientras hacían el servicio militar. Evidentemente, el club está bajo mandato militar.
Desde su fundación hasta la actualidad, 40 años después, ha pasado por cuatro cambios de ciudad y nomenclatura, que han llevado al actual Gimcheon Sangmu, ciudad a la que llegaron en 2021 muy cercana del cuartel de las Fuerzas Armadas del país a la que pertenecen los jugadores del equipo. Eso sí, el cuerpo técnico no está formado por militares.
El club tiene un condicionante, y es que cada dos años cambia a todos sus jugadores y solo cuenta con jugadores cedidos por otros clubes mientras cumplen con sus obligaciones castrenses. Además, no pueden contratar a jugadores extranjeros, por lo que hacer un proyecto a largo plazo no es una opción. Sin embargo, no absorbe a todos los futbolistas que van a hacer el servicio. En una entrevista a K-League United, Seo Young-Jae, que no fue aceptado para entrar en el equipo y ha pasado de primera división a cuarta para mantenerse activo mientras cumple con su servicio militar, explica cómo es el proceso de admisión: "Primero mandas un informe y, si te aceptan, tienes que pasar pruebas de velocidad y fuerza, lamentablemente no me eligieron". Solo pueden optar a entrar en el equipo jugadores que se encuentren en las dos primeras divisiones.
Más allá de los partidos, los jugadores están obligados a comportarse como cualquier otro militar, es decir, deben ir uniformados, no pueden mostrar su afinidad política y tienen que cumplir la misma formación que el resto. Eso sí, cuentan con una ventaja, en sus desplazamientos para jugar como visitantes, viajan más que cualquier otro militar que está realizando la misma mili. También, los jugadores pueden ser convocados con la selección surcoreana, de hecho, desde el Mundial de 1994, tan solo en el Mundial de 2002, que precisamente se llevó a cabo en Corea del Sur y Japón, no ha habido representación de ningún jugador del equipo en la selección.
A lo largo de sus 40 años de historia ha alternado la K-League 1 y la K-League 2, lo que es lo mismo, la primera y la segunda categoría. Hasta ahora, el mejor puesto fue el 6º conseguido en la 2015-16, hasta este año en el que, a falta de una jornada, está segundo, pero sin opciones de llevarse el título, algo que hubiera sido histórico, más si cabe después de ascender la temporada pasada como campeones. El Gimcheon Sangmu terminará la temporada como segundo o como tercero, según el resultado que logre en casa ante el Seoul FC, que es cuarto, en la última jornada que se disputa el sábado 23 de noviembre, ya que la liga surcoreana se juega en año natural.
La imposibilidad de jugar la Champions Asiática
En la K-League los tres primeros puestos dan acceso a competición internacional. Primero y segundo se clasifican para la Champions Asiática y el tercero a la Champions Asiática 2, por lo que tendrían asegurada su primera clasificación para una competición internacional, algo sin precedentes, pero que de momento no es posible. La AFC (Confederación Asiática de Fútbol) no cataloga al club del ejército como un equipo profesional, por lo que esto le impide jugar a nivel continental.
El Gimcheon Sangmu deja imágenes curiosas. Todos los integrantes realizan el saludo militar antes del inicio del encuentro y los jugadores que son convocados con la selección mientras están de servicio, hacen lo propio cuando suena el himno del país en los prolegómenos del encuentro.
Otros clubes en el mundo han estado y están ligados al ejército de sus países, como pueden ser los casos del CSKA, tanto de Moscú como de Sofía, o el Steaua de Bucarest. Sin embargo, ninguno de ellos cuenta con el condicionante del club surcoreano en el que sus jugadores están realizando el servicio militar mientras juegan.