FÚTBOL

Fran Mérida mira desde la retirada al niño promesa que se fue al Arsenal: "Crees que comes comida basura y puedes rendir igual"

A sus 34 años, el catalán acaba de colgar las botas. Quien necesitara parar para volver a disfrutar del fútbol, se está formando como agente de futbolistas para ayudar a los más jóvenes.

Fran Mérida, durante su debut con el Arsenal en 2007. /Fran Mérida
Fran Mérida, durante su debut con el Arsenal en 2007. Fran Mérida
Isabel Pacheco

Isabel Pacheco

"De mi carrera me quedo con haber tenido la capacidad de darle la vuelta a la situación". A través de las redes sociales, Fran Mérida (Barcelona, 1990) anunciaba, hace solo unos días, que colgaba las botas. Tras una última temporada en el Lugo, el niño que con 16 años se marchó al Arsenal siguiendo los pasos de otro azulgrana como Cesc Fàbregas, se despide hoy del balón. Feliz y orgullo de su trayectoria, aquel Fran que no comió ni descansó como lo requería la profesión durante su periplo por tierras inglesas, "piensas que puedes comer comida basura y al día siguiente vas a rendir igual de bien", es el claro ejemplo de que a veces es necesario parar para volver con fuerza a la casilla de salida.

"Al volver de Brasil me di cuenta de que estaba dando bandazos y que tenía que parar y hacer autocrítica conmigo mismo. Ver qué estaba haciendo bien, qué estaba haciendo mal y a raíz de ahí pasé seis meses en Barcelona entrenando con El Prat. Hice un trabajo, sin psicólogo ni nada porque ahí no se llevaba o no se nos hablaba sobre eso, y por mi cuenta me miré al espejo. Empecé a comer mejor, a cuidarme y me dije: 'empezamos de cero y a disfrutar'. Infinidad de enseñanzas de su fugaz paso por el Atlético donde las cosas desgraciadamente no salieron según lo esperado, sería lejos de la capital donde el centrocampista, que se prepara ahora para ser agente de futbolistas, volvería a recuperar la ilusión por el fútbol.

¿Cómo están siendo los primeros días como exfutbolista?

La verdad que muy bien. Aunque lo haya anunciado recientemente, es algo que había tomado ya la decisión hace unas semanas e incluso me atrevería a decir algún mes. Lo tengo muy asimilado y ahora estoy enfocado en el presente y en lo que pueda venir. Otro tipo de vida, pero muy contento.

¿Te daba miedo que llegara el momento de tener que utilizar el término exfutbolista?

Quizás siendo más joven sí. Siendo más jovencito sí que me daba más miedo, aunque es cierto que con el paso de los años uno va viendo que inevitablemente ese momento va a llegar. Forma parte de la vida. Todo tiene un inicio, un proceso y un final. He tomado la decisión bastante en paz conmigo mismo y ahora con ganas de seguir y ver lo que me depara la vida.

¿Imaginabas así tu retirada o te la esperabas con una ovación en un terreno de juego?

No necesito retirarme por una ovación. Me quedo más con el trayecto, con todo lo que he podido vivir. Le doy mucho valor a eso. Sí que es verdad que el último partido que jugué con el Lugo yo no sabía que iba a ser el último porque en principio iba a estar un año más allí, pero las circunstancias han llegado así. He tomado la decisión cien por cien convencido, no he tenido ninguna duda.

Fran Mérida y cómo no se cuidó bien en Londres. Relevo

Imagino que habrás recibido cientos de mensajes. ¿De Arsène Wenger ha caído alguna felicitación?

He recibido mensajes de muchísima gente. Piensa que desde que me marché a Londres han pasado casi 20 años. He coincidido con muchísimos compañeros, rivales, gente del fútbol... He recibido muchísimos mensajes de cariño. Con Wenger no he podido hablar. Hace mucho tiempo que no tengo contacto con él, pero sí me ha escrito gente del Arsenal. Son personas que han sido importantes en mi proceso y les estoy muy agredecido.

Siguiendo con el Arsenal, te marchaste a Londres cuando eras canterano del Barça y tenías 16 años. ¿Te acuerdas quién te dio la noticia y con quién estabas?

Claro que lo recuerdo. Volvía de viaje y vino a recogerme mi padre. Me comentó que habían hablado con él sobre la posibilidad de ir al Arsenal. Al principio pensaba que me estaba gastando una broma, pero luego vi que no, que iba en serio y nos reunimos con Francis Cagigao, que fue la persona que estuvo ojeándome para poder llevarme al Arsenal. Hablé con ellos y nos comentaron su idea. Le estoy muy agradecido a Francis porque apostó muy fuerte por mí y me dio una oportunidad que, literalmente, me cambió la vida.

"Nunca quise ser igual que nadie"

Fran Mérida

¿Te costó marchaste o lo tenías muy claro?

Me costó tomar la decisión primero, porque estaba muy a gusto en el Barça, y segundo, porque no era solo irme a otro club. Pero lo que realmente me costó fue separarme de mi familia tan joven. Yo tenía una vida bastante rutinaria, del mismo colegio, los mismos compañeros con lo que entrenaba en el Barça... Pensar en dejarlo todo e irme solo, al principio me dio un poco de respeto, pero tenía que tomar una decisión y entre mi familia y yo decidimos que era lo mejor. Tenía que coger ese tren.

Tu salida del Barça trajo consigo una penalización por los derechos de formación ¿Tuviste que pagar tú esa 'multa'?

Por suerte no tuve que pagarla porque si no estaría aún devolviéndola. Hubo una penalización para mí por derechos de formación, creo recordar. El Arsenal se hizo cargo de eso. No me acuerdo exactamente de la cantidad, pero a día de hoy tendría que estar pagándola. Gracias a Dios el Arsenal se portó muy bien y solucionó ese tema.

Hace unos años, en una entrevista en El País decías que te arrepentías de ciertos compartamientos que tuviste cuando viviste solo en un piso en Londres

Con 20 años no comía como un deportista de élite ni tampoco respetaba las horas de descanso necesarias. Ni sabía cocinar y tampoco quería aprender. Cuando van pasando los años te das cuenta de que nuestro cuerpo es nuestra arma para poder competir y desde la inocencia y la inconsciencia no lo hacía. Con los años, y tras algún que otro palo deportivo, te vas dando cuenta de que hay que cuidar todos los detalles para poder jugar en el mundo profesional. Lo que pasa es que con 20 años piensas que puedes comer comida basura y al día siguiente vas a rendir igual de bien.

En Londres, ¿te apoyaste mucho en Fàbregas y en Almunia?

Muchísimo, tanto en Cesc como en Almunia y también en Philippe Senderos, que habla muy bien español. Fueron un gran apoyo para mí. Yo era el más jovencito. Es cierto que empecé en el filial, pero cuando comencé a entrenar con el primer equipo sí que estaban encima mío, no dejaban que nadie me tosiera. Me protegieron muy bien. Fuera de lo que es el entorno del entrenamiento y de los partidos me invitaban muchas veces a cenar para que tuviera un poco de vida. Yo estaba solo y si no hacía algo de vida con ellos, prácticamente mi día era estar en casa encerrado.

¿Crees que te perjudicó que te compararan tanto con Cesc?

Perjudicar... depende de la personalidad de cada uno. A mí no me afectó, pero tampoco me gustaba. Me explico. Cesc y yo tuvimos un trayecto similar en cuanto a que jugábamos en el Barça y fuimos al Arsenal a una edad muy joven. En ese momento Cesc ya estaba jugando a alto nivel, ya había debutado con el primer equipo del Arsenal y lo había hecho también con la Selección. Yo veía como algo bueno que la gente creyera que podría llegar a un buen nivel, pero por otro lado, nunca quise ser igual que nadie, siempre quise ser yo y siempre dije lo mismo: 'con tener un cuarto de lo que tenía Cesc en cuanto a su inicio de carrera me conformaba'. No es normal que un chico de 17 años fuera titular en un Arsenal peleando por la Premier League y debutara en la Selección. Eso quiere decir que Cesc, como así demostró en su carrera, fue un jugador especial.

"Estaba frustrado conmigo mismo. Me faltó equilibrio emocional para haber parado"

Fran Mérida

Tras tu periplo por Inglaterra y una cesión entre medias a la Real Sociedad en 2010 fichas por el Atlético de Madrid. ¿Qué ocurrió para que no pudiéramos ver allí tu mejor versión?

La verdad es que no conseguí dar mi mejor nivel. No sé si por no estar preparado, no lo sé, pero la realidad es que no conseguí dar mi mejor versión. Eso luego me ha servido para el futuro, para aprender que hay veces que las cosas no salen. Ojalá me hubiera marchado de allí de otra manera en el sentido de haber podido ofrecer más. Siempre fui consciente de eso, pero me quedo con lo positivo. Aprendí muchísimo. En aquel momento lo pasé regular porque soy del Atleti y me hacía muchísima ilusión poder estar allí. Pese a como se dio todo, a día de hoy te diría que me quedo con muchas cosas positivas. Pude ganar un título con el equipo del que soy aficionado y vivir muchas experiencias y aprender de errores que luego no he vuelto a cometer.

Fran Mérida y por qué no le fue bien en el Atlético. Relevo

¿Qué es lo que no te dejó ser el Fran que llamó la atención del Arsenal? Porque la calidad la tenías.

Tener, entre comillas, condiciones para poder jugar en un sitio es relativo. Luego tú tienes que demostrarlo y yo no supe hacerlo. Probablemente me llegó en un momento de no tener todovía la madurez al cien por cien. Fui irregular. El primer año sí es verdad que fue bueno. Si no recuerdo mal, jugué más de 25 partidos y metí tres goles. Para un chico de 20 años que está en el Atleti creo que son números buenos. El segundo año ya hubo un cambio en la dirección deportiva. Hubo un cambio de entrenador y me comunicaron que no contaban conmigo la última semana de mercado y me tuve que buscar la vida. La cesión no fue bien y encadené un par de años en los que no salieron las cosas y probablemente yo no estaba mentalmente fuerte. Lo pagué, aprendí y luego le pude dar la vuelta.

¿Por qué no estabas mentalmente fuerte? ¿Quizás por esas expectativas que había puestas en ti?

Eso no me preocupaba, y lo digo con todo el cariño. No era un tema de lo que pensara la gente. Era algo de que quizás yo iba con unas expectativas y quizás, cuando ves que no se cumplen, te frustras y empiezas a dudar de ti mismo. Pero era algo mío, no era pensando en la gente o en el qué dirán. En el Atleti no pude estar a un gran nivel y aún así disfruté de buenos momentos. Aprendí y me sirvió para el futuro, sin duda. Si ahora hablara con el Fran de 20 años que estaba en Atleti le diría que tuviera paciencia, que es muy joven, que queda un mundo por recorrer. Con 20 años te quieres comer el mundo, lo quieres ya todo porque te ves preparado, pero en realidad hay que tener paciencia y esperar el momento. Eso fue lo que me ocurrió.

Del Atleti te marchaste traspasado al Hércules y de ahí te fuiste a jugar a Brasil al Atlético Paranaense. Tenías 23 años, muy joven para alejarte del foco ¿no?

Tomé la decisión porque venía, como te decía antes, de un par de años duros. En mi último año en el Atleti no lo pasé demasiado bien porque prácticamente no jugué y me costaba asimilarlo. De ahí me fui al Hércules, a un proyecto donde la idea era hacer un equipo para ascender, pero todo salió al revés. Los meses que estuve participé en muchos partidos, pero digamos que no salió bien. Me surgió la oportunidad de ir a Brasil y quizás ahí no tomé la mejor decisión en el sentido de que, y es algo que luego he aprendido, no se pueden tomar decisiones cuando uno no está mentalmente equilibrado. Yo ahí estaba frustrado conmigo mismo porque no conseguía quizás la expectativa esa que en mi mente se había creado de que yo podía ser jugador profesional de alto nivel. Al ver que se me estaba escapando, pues ahí quizás me faltó equilibrio emocional para haber parado y haber dicho 'Oye Fran, tranquilo, relájate, vamos a centrarnos en lo que puedes controlar y de ahí pues vamos para arriba'. Eso fue un poco lo que me pasó.

Fran Mérida explica por qué tuvo que parar. Relevo

No paraste en ese momento, pero a tu regreso de Brasil estuviste seis meses sin equipo

Sí, de hecho, al volver de Brasil ahí sí que me di cuenta de que estaba dando bandazos y que tenía que parar y hacer autocrítica conmigo mismo, ver qué estaba haciendo bien, qué estaba haciendo mal y a raíz de ahí pasé seis meses en Barcelona entrenando con El Prat, un equipo de Barcelona. Ahí hice un trabajo, sin psicólogo ni nada porque ahí no se llevaba o no se nos hablaba sobre eso, y por mi cuenta me miré al espejo empecé a comer mejor, a cuidarme y me dije: 'empezamos de cero y a disfrutar'. A disfrutar porque estaba perdiendo el disfrute por el juego y eso sí que no me lo podía permitir, independientemente de que pudiera jugar más arriba o más abajo. Nunca me habría perdonado el no disfrutar jugando. Ahí hice una reflexión durante esos meses conmigo mismo, yo solo, y por suerte tuve el valor de decirme a mí mismo las cosas que estaba haciendo mal y cambiar ciertos hábitos como empezar a comer mejor, empezar a ir al gimnasio y ciertos hábitos que son necesarios para poder competir.

Entiendo que lo que querías era volver a disfrutar del fútbol como sí lo hacía esa Fran que se marchó a Londres con 16 años

Totalmente. Después apareció el Huesca esas últimas semanas de mercado. Fueron duras porque, siendo totalmente sincero, nadie me quería y era lícito, estaban en su derecho. No tenía ninguna opción y mediante Antonio López, que fue mi agente durante gran parte de mi carrera, pues surgió la opción del Huesca y dije 'esta es la mía, ahora tengo que agarrar esto como sea y sobre todo disfrutar, valorar el ir a entrenar, entrenar con compañeros, competir'. Me fui a Segunda B y pasé un año y medio muy bueno donde conseguimos el ascenso a Segunda. A Huesca le tengo un cariño muy grande porque, en un momento delicado deportivamente hablando, me echaron una mano, me dieron cariño, me respetaron y me ayudaron a poder volver a jugar al fútbol profesional en Segunda División.

"Nadie me quería y era lícito"

Fran Mérida

Además del Huesca, otro equipo que guardo un lugar especial en tu corazón es Osasuna

Después de Huesca me vine a Pamplona y bueno, qué te voy a decir, lo he dicho infinitas veces y lo repito porque lo siento. Osasuna es el club que más me ha marcado. Pudimos vivir años muy buenos no solo a nivel deportivo. A nivel de grupo hicimos un grupo muy bueno y de hecho, seguimos en contacto muchos jugadores de aquel equipo y algunos nos juntamos en verano. Aquella etapa de Osasuna fue maravillosa.

Fran Mérida quiere seguir vinculado al fútbol y ayudar a los más jovenes . Relevo

¿Con qué se queda Fran de su carrera?

Quedarme con algo es complicado. Desde que me marché a Londres han pasado 19 años. Quizá, por decirte uno, me quedo con haber tenido la capacidad de darle la vuelta a la situación porque con 24 años estaba en mi casa sin equipo y pintaba feo. El poder darle la vuelta y estar así durante seis - siete años entre Primera y Segunda División... He podido disfrutar y me siento orgulloso de haber tenido la capacidad de saber parar y de tener autocrítica conmigo.

"Osasuna es el club que más me ha marcado"

Fran Mérida

Tu familia, en ese momento, sería un gran apoyo

En ese momente mi padre, que me veía sufrir, estuvo ahí apoyándome. He tenido mucha suerte porque mis padres nunca me han exigido nada. Jugando en una cantera como la de Barça, que puede confundir a ciertos padres con sus hijos, ellos siempre me dejaron ser yo mismo y equivocarme yo. Me han aconsejado, pero nunca me han exigido nada. Ni cuando metía un gol me decían que era muy guapo, ni cuando no metía me decían que era muy feo. Tengo mucha suerte de la familia que tengo.

Y ahora tras la retirada, ¿te gustaría seguir vinculado al fútbol?

Sí. Estoy formándome para poder ser agente de futbolistas y si todo va bien, empezaré a trabajar en Antonio López Management, la agencia del que fue mi agente y es mi amigo. En un futuro lejano me gustaría ayudar a chicos en muchos aspectos y no solo deportivos. Hay que tener calma, esperar el momento. Yo lo tuve que aprender unos años después cuando me llevé ese palo deportivo de estar sin equipo, pero a día de hoy doy gracias a eso porque me ayudó y no solo para el fútbol, también para la vida.