La intrahistoria de la agresión a Dmitrovic: pidieron la suspensión y Orsato dijo "no ha pasado nada"
El Sevilla expresó su malestar a la UEFA por el incidente con el portero y la decisión del árbitro italiano de continuar el partido.
Con el susto todavía en el cuerpo llegó Dmitrovic al vestuario del Philips Stadion, después de que un hincha del PSV saltase al césped a agredirlo durante el partido. Ese inesperado incidente provocó un profundo malestar en la expedición del Sevilla e incluso los jugadores sobre el terreno de juego y los que estaban en el banquillo solicitaron a los árbitros la suspensión del partido. "No ha pasado nada", replicó Daniele Orsato, el colegiado italiano del encuentro, que ya minutos antes había pasado por alto también los lanzamientos de objetos desde la grada.
Nada más llegar al vestuario, el propio Dmitrovic explicó al director deportivo, Monchi, y al resto de la expedición que el aficionado lo intentó golpear en dos ocasiones, rozándole en la nariz en el segundo intento -le produjo un arañazo en el cuello- hasta que el meta serbio pudo reducirlo pese a que el hincha continuó tirándole de la camiseta. Dmitrovic incluso reconoció que estuvo a punto de responder a la agresión, pero que finalmente se contuvo para evitar males mayores.
Todas estas circunstancias han provocado que el Sevilla expusiera su malestar ante el delegado de la UEFA presente en el estadio, tanto por el incidente en sí, que finalmente el propio Dmitrovic se encargó de resolver hasta que llegaron las fuerzas de seguridad, como por la manera de resolverlo del árbitro italiano, al entender que no se protegió la integridad de los futbolistas ni existió los elementos policiales suficientes en las zonas donde se concentraban los radicales del equipo holandés.
Con todo, en el Sevilla tampoco tienen, en principio, llegar más lejos con su protesta, al entender que no sólo fue una mala actuación del PSV sino también de todos los que tenían el encargo de velar por la seguridad de un partido de fútbol. Además, la propia UEFA también se suele tomar muy en serio este tipo de cuestiones, por lo que al conjunto holandés le aguardará una dura sanción del organismo europeo sin necesidad de que el Sevilla eleve una protesta formal.
"El episodio del hincha habla a las claras que se deberían haber tomado otras medidas. Este tipo de hechos alimentan la posibilidad de que se repitan. Cualquier persona se hace participe y encima agrediendo a un futbolista. Me parece muy grave lo que pasó hoy. No sé el tipo de sanción que debería haber tomado, porque debería haber sido más severo. Seguir el partido en esas condiciones... Jugamos un partido de manera limpia, merecimos ganarlo, no pudimos, pero debería haber concluido en ese momento. Demasiada violencia permitida para que continúe un partido", explicó el propio Jorge Sampaoli en la sala de prensa.