ATHLETIC CLUB

Una goleada histórica y un doblete del primer lehendakari: la historia de unos amistosos en 1923 que dejarán sin flores a Pichichi

Hace más de un siglo, el Athletic se midió en San Mamés al Slavia de Praga y al Viktoria Plzen, rivales en la Europa League, en unos duelos con muchas anécdotas.

Chivas fue el último equipo en depositar el ramo en el busto de Pichichi./Athletic Club
Chivas fue el último equipo en depositar el ramo en el busto de Pichichi. Athletic Club
Patxo De la Rica

Patxo De la Rica

En más de 125 años de historia, el Athletic Club tiene miles de anécdotas. Este jueves, cuando los chicos de Ernesto Valverde salten a San Mamés, se reescribirá una que, por curiosa y abultada, guarda un lugar importante en los libros históricos del conjunto bilbaíno. No hay precedentes entre bilbaínos y checos si hablamos de duelos oficiales, pero el Slavia de Praga conoce San Mamés. No el moderno y renovado estadio rojiblanco, pero sí el carismático y antiguo escenario. Todavía sin arco y sin remodelación, el conjunto centroeuropeo visitó hace más de un siglo Bilbao en un doble amistoso que dejó huella y que también tuvo como invitado al Viktoria Plzen, casualmente rival de los rojiblancos en esta Europa League.

En la época, el parón navideño servía para disputar diferentes amistosos y conocer el fútbol continental. Años antes, los vascos se habían enfrentado al Bienne de Suiza, el Sparta de Praga o el Casuals de Inglaterra, entre otros, pero esta Navidad era diferente porque el Athletic, como ahora, lucía con orgullo ser el vigente campeón de la Copa. En el banquillo, toda una leyenda como Frederick Beaconsfield Pentland, conocido como Mr. Pentland y quien tiene el honor de ser el entrenador más laureado del club vasco (2 Ligas, 5 Copas y 5 Campeonatos Regionales). Un equipo prácticamente invencible. Sin embargo, el 23 de diciembre de 1923, el Slavia de Praga superó a los bilbaínos sin discusión: 2-9. La mayor goleada recibida en la historia del cuadro vasco.

"El Slavia de Praga es una maravilla", titulaban los diarios de la época. "El secreto del resultado es, no obstante, fácil de desentrañar. Un equipo que juega mucho, infinitamente más que los nuestros, y una tarde desgraciada del Athletic. Y, sobre todo, el estupor, la sorpresa que se apodera de los nuestros ante aquella avalancha de los primeros goles que se les vino encima", iniciaba la crónica de aquel encuentro. A lo largo del texto se recordaba que los bilbaínos estaban sobre aviso por un enfrentamiento el año previo ante el Sparta, rival regional del Slavia, que ya había dejado una buena sensación en Bilbao. "Todas nuestras impresiones, sin embargo, se superaron. El efecto que nos produjo el Slavia fue maravilloso", resumía el cronista, antes de describir los 'goals' sin poner nombre a los artífices de los mismos.

Parte de la crónica publicada en 1923 sobre el encuentro. @DedekMadden
Parte de la crónica publicada en 1923 sobre el encuentro. @DedekMadden

En la web del Athletic, sin embargo, se recoge también aquel amistoso y se le otorgan seis de las nueve dianas a Stapl. Sorprende que solo dos días después ambos equipos volvieran a verse las caras, recuperándose los rojiblancos para firmar un 4-4 que, dicen los testigos, debió ser un triunfo local. En aquella gira de partidos, el Athletic también se midió al Viktoria Plzen, quienes visitarán La Catedral en el mes de enero en la última jornada de esta primera fase de la Europa League.

Aquel enfrentamiento dejó también una anécdota imperdible. El Athletic, con un equipo de 'reservas', superó por 3-0 a los centroeuropeos y lo hicieron con un doblete de José Antonio Agirre, primer lehendakari vasco algo más de una década después. El histórico político vasco, que ocupó el cargo durante la Guerra Civil, disputó cerca de 50 partidos con la camiseta rojiblanca y este fue uno de ellos, al que seguro que guardaría cariño por haber sido el gran artífice del triunfo.

Homenaje a Pichichi

Unos encuentros que están en los anales históricos del club y que, de hecho, están de actualidad más de un siglo después. No solo porque son los únicos precedentes ante ambos equipos, sino porque han sido estudiados de cara a una tradición centenaria. Todos los rivales que visitan por primera vez San Mamés depositan un ramo de flores en el busto de Pichichi como homenaje, algo que no está previsto que suceda en el caso de los dos conjuntos checos por esos amistosos mencionados.

Si bien no hicieron ofrenda en su momento, ya que Rafael Moreno Aranzadi (Pichichi) había fallecido solo un año antes y aún ni siquiera existía su busto -se estrenó en 1926-, al haber jugado ya en La Catedral están en la misma situación que muchos otros equipos del fútbol español que nunca hicieron ese tributo por haber ya jugado en el estadio rojiblanco antes de popularizarse esta entrega. Es por ello que, según las fuentes consultadas, no se hará este homenaje.

La buena noticia es que sí lo viviremos en este año en otro encuentro continental. El Athletic se enfrenta también en esta fase de liga al Elfsborg sueco, que nunca se ha medido al cuadro vasco y que, por tanto, sí realizará la entrega floral al busto del histórico delantero rojiblanco cuando pisen San Mamés el próximo 28 de noviembre.

Esa imagen es icónica y guarda también algunos secretos. Aunque se le otorga al MTK Bucarest el honor de ser los pioneros, en 1927, varios historiadores lo han puesto en duda en los últimos años. El Haro Sport Club homenajeó a Pichichi en 1924, aunque entonces no existía el busto y lo hicieron junto a una imagen del histórico delantero, por lo que el conjunto riojano sería el creador de esta bonita tradición que sigue vigente y que es uno de los mayores orgullos de San Mamés.