Dani Carvajal y su aprendizaje sobre el caso Rubiales: "No creo que dijese nada malo y creo que abrí el prisma a más gente"
El lateral, que debuta en una Eurocopa a sus 32 años tras perderse las dos anteriores por lesión, vuelve a demostrar que no se deja nada en el tintero. Ni en el campo, ni fuera de él.

Dani Carvajal llega a Alemania como campeón de la Champions y MVP de la final con el Real Madrid, pero también lo hace con más de 40 partidos con la elástica de la Selección a cuestas. Trofeos e internacionalidades que le dan empaque y veteranía suficientes para torear cualquier miura. Lo hace además con una personalidad que no deja indiferente a nadie como demostró en su primera comparecencia pública tras estallar la crisis en la Federación con el beso no consentido de Luis Rubiales a Jenni Hermoso, que terminó con el granadino saliendo de la RFEF e inmerso en un proceso judicial por un presunto delito de agresión sexual y otro de coacciones.
"Lo que únicamente defiendo es la presunción de inocencia. No puedes victimizar ni culpabilizar a alguien sin una sentencia firme", aseguró entonces el lateral, uno de los capitanes de la Selección, en rueda de prensa. Una respuesta que hoy vuelve a recordar en una entrevista concedida a El Mundo justo un día antes del debut de España en la Eurocopa.
"Todo es un aprendizaje en esta vida. Cuando pasó aquello, las cosas estaban un poco en el aire. Yo no defendí absolutamente a nadie. Dije que si había habido alguna confrontación, que lo resolvieran las personas indicadas. No me arrepiento de haber dicho nada, no creo que dijese nada malo ni me posicionase hacia un lado o a otro", recuerda el lateral madridista, que recuerda un consejo que le dio su padre con respecto a las polémicas.

"Mi padre me decía: 'no digas nada' y quizá tenía razón, pero tampoco creo que dijese nada malo y creo que abrí el prisma a más gente. Cuando escuchas a alguien que no piensa como tú, cuando ves que algo no es blanco o negro, te hace reflexionar", concluye el defensa que no tiene problemas en decir lo que piensa sin importarle lo que la gente diga de él. "Intento no ser un 'bienqueda' con la gente. Normalmente digo lo que pienso. Si de algo no tengo suficiente información no opino y creo que eso es ser inteligente. Soy una persona real y no busco jardines, pero digo lo que pienso".
Esa personalidad le ha llevado a no caer bien a los seguidores de otros equipos que no sean el Real Madrid. "Para los madridistas soy la p….", reconoce el lateral. "Yo creo que no caigo especialmente bien por mi forma de jugar, porque soy muy agresivo, muy competitivo, me gusta el choque, el contacto, así que cuando no son de mi equipo no caigo bien, pero me da igual. Quien me conoce un poquito sabe que soy una persona con valores, con principios, que lo dejo todo en el campo porque así me lo han enseñado mis padres".
Ese es su objetivo durante el próximo mes, vaciarse en los campos de Alemania para intentar que España conquiste su cuarta Eurocopa, aunque en realidad será la primera para él. A sus 32 años debutará en la máxima competición continental de selecciones tras perderse las dos anteriores por lesión. "El año 2021 de hecho fue horrible para mí en ese sentido", recuerda a la vez que señala que lo único que vale es ganar. "Ganar es ganar. La gente se acuerda del que gana, no del que juega bien y se va en la fase de grupos". Un espíritu 'made in Real Madrid' que ahora intenta trasladar a la Selección para el debut ante Croacia. Otra cita marcada en el calendario de un Carvajal que sueña con volver a reinar en Europa como hizo hace apenas dos semanas.