Enigmático encuentro entre Rocha y Alejandro Blanco a menos de 24 horas del arranque electoral de la RFEF
El presidente de la Comisión Gestora de la RFEF y el del Comité Olímpico Español se han reunido esta tarde en un céntrico hotel de Madrid.
19:20. Hotel Villa Magna. Madrid. Dos altos directivos del deporte español se reúnen a menos de 24 horas del arranque electoral más esperado en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) tras su año más convulso. Se trata de Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español (COE) y Pedro Rocha, su homólogo en el máximo organismo del fútbol español en sus últimas horas al frente de la Comisión Gestora.
En una esquina del céntrico hotel ambos mantienen un enigmático encuentro antes de un día clave para el -hasta este lunes- presidente de la Federación Extremeña de Futbol. Blanco, con la chaqueta del traje depositada en el asiento de su derecha, lidera la conversación. A su izquierda, el que será candidato a presidir la RFEF por los próximos meses, con el traje y la corbata impolutos, se mantiene algo más encorsetado. Ambos hablan amistosamente. Una recóndita escena en un día marcado en el calendario como homenaje a los padres de España entre quien fuera amigo de Ángel María Villar y Luis Rubiales, por quienes dio la cara públicamente en varias ocasiones, y Pedro Rocha, quien está dispuesto a convencer a la Asamblea de la RFEF para sucederles.
Con la organización del Mundial 2030 entre manos y la participación de las selecciones españolas de fútbol en los JJ.OO, que podrían ser los temas a valorar entre ambos, llama la atención que la reunión se haya organizado en el céntrico hotel escasas horas de que Rocha finalmente rompa la baraja con la convocatoria de las elecciones a presidente de la RFEF a las que se presentará como candidato. Tras reunirse con varios presidentes de las federaciones territoriales para anunciarles personalmente que aspirará a liderar la institución, podría haber adelantado su viaje desde Extremadura para hacer lo propio con una de las figuras más categóricas del deporte español.
Blanco, quien dirige los mandos del Comité Olímpico desde 2005, fue quien tuteló la salida de Villar en 2017 y trató de minimizar el impacto tras la inhabilitación de Luis Rubiales por FIFA que acabó con su dimisión el 10 de septiembre del año pasado. Figura clave en la turbulenta partida tanto de Villar como de Rubiales de la federación deportiva más poderosa, Blanco se convirtió, de alguna manera, en cooperador necesario del Gobierno para desatascar la salida de sus dos amigos, a los que defendió públicamente en varias ocasiones.
"Tenemos el mejor fútbol del mundo porque los que estáis aquí y otros que están trabajando hacéis lo que sea para que vuestros sueños se conviertan en realidad. Ese es vuestro ejemplo y será vuestro legado. Sois un gran modelo para este gran país que es España", dijo en la Asamblea que eligió a Villar en 2017 meses antes de su inhabilitación. "Pude ver el respeto y la admiración de la UEFA por esta federación y por Rubiales, que está haciendo un gran trabajo más allá de las tormentas que puedan pasar. Manifiesto mi apoyo y respeto a ti y a todo tu equipo", se refirió en mayo de 2022 tras la reelección de Rubiales. Asiduo a las asambleas, faltó a la última en la que Rubiales se sentenció. Según el propio Blanco, le había aconsejado "pedir perdón, explicar lo conseguido, y dimitir".
La última vez que se vio a ambos en un acto público fue el pasado 19 de febrero cuando, en la presentación oficial del sello y la moneda conmemorativos del Mundial de fútbol que la Selección española consiguió el pasado mes agosto en Sídney, el Gobierno quiso escenificar, en palabras de las Ministras María Jesús Montero y Pilar Alegría, su apoyo al equipo nacional femenino tras todo lo sucedido. Allí se vio a un discreto Alejandro Blanco y a un exultante Pedro Rocha que quiso ejercer de anfitrión ante la visita más importante a nivel institucional en Las Rozas de los últimos tiempos.
Como el padre que aconseja, aunque no les une una estrecha relación de amistad, quizás Blanco hoy también lo ha querido hacer con Rocha, que ha acudido a él antes de enfrentarse a un proceso electoral que augura impugnaciones y un camino largo. Lo ha hecho el último día al frente de la Comisión Gestora tras días intensos en los que también se ha reunido con los más íntimos de las territoriales, quienes le tendrán que brindar su apoyo en el próximo mes. A todos les ha anunciado que quiere ampliar su etapa al frente de la RFEF y, esta vez, con plena libertad para tomar decisiones y enderezar una institución que se ha visto sacudida como nunca antes.