CASO OSASUNA

UEFA investiga a Osasuna: el artículo 4.1g puede dejarle sin Europa

La reglamentación de la UEFA Conference League deja claro que no será admitido ningún club que haya estado involucrado en compra de partidos. Osasuna lo estuvo en la 2013-14.

Chimy Ávila, durante un partido de este curso con Osasuna./Getty Images
Chimy Ávila, durante un partido de este curso con Osasuna. Getty Images
Patxo De la Rica

Patxo De la Rica

Osasuna consiguió el pasaporte a la Conference League tras una excelente temporada sobre el césped, pero el club navarro está en estos momentos inmerso en un proceso de validación por parte de la UEFA que podría traerle problemas. La entidad rojilla, como cualquier otra, debe superar el filtro del proceso de admisión de la UEFA, que tiene en cuenta diferentes aspectos deportivos, administrativos, judiciales… Y ahí está el germen de la incertidumbre que reina en estos momentos en las oficinas pamplonesas.

Según han publicado esta tarde ElCorreo y La Vanguardia, la UEFA ha abierto un expediente a Osasuna por contravenir su normativa. La noticia fue una sorpresa para el club rojillo en primera instancia, hasta que pasadas las 20:00 horas fueron notificados de que se iniciaba "una investigación al respecto". ¿De dónde nace? Del Reglamento de la UEFA Europa Conference League.

En dicha normativa, el Artículo 4, "Criterios y procedimiento de admisión", se refiere a diferentes aspectos que debe cumplir cualquier club para disputar la competición europea. Desde "haberse clasificado para la competición por méritos deportivos" hasta otros epígrafes mucho más específicos. Así reza el 4.1/g, referente a no haber estado involucrado en amaño de partidos:

Artículo 4.1 / g del Reglamento de la UEFA Europa Conference League

"No haber estado directa y/o indirectamente involucrado, desde la entrada en vigor del Artículo 50(3) de los Estatutos de la UEFA, es decir, el 27 de abril de 2007, en ninguna actividad destinada a organizar o influir en el resultado de un partido"

En este sentido, el pasado mes de enero el Tribunal Supremo confirmó la condena a varios exdirectivos de Osasuna por amañar partidos. Concretamente un choque ante el Betis de la temporada 2013-14. La sentencia del Supremo dio por probado que el club navarro pagó al conjunto sevillano por dejarse perder en la lucha por evitar el descenso.

En este fallo se rebajaron las penas que la Audiencia de Navarra había impuesto en 2020 a Ángel María Vizcay Ventura, Miguel Ángel Archanco, Juan Antonio Pascual Leache, Jesús Peralta García, todos ellos directivos de la entidad rojilla en la época, pero se confirmó el mencionado amaño.

El hecho de que se esté estudiando el caso en el proceso de validación no supone una exclusión inmediata, ni mucho menos, pero sí un problema para Osasuna. El club navarro, una vez ha sido notificado por la UEFA, está estudiando el tema con sus servicios jurídicos y, en breve, realizarán una comunicación al respecto.

Osasuna se defiende

La entidad navarra, tras analizar el caso con su equipo jurídico, ha emitido un comunicado en el que se defiende y recuerda que la sentencia del Tribunal Supremo "paradójicamente exime al club de responsabilidad penal". Osasuna cita parte de la sentencia y recuerda que la entidad, como club, "lejos de ser condenada ha sido acusación particular y ha perseguido vía judicial a los responsables de los mencionados hechos", que eran sus directivos de la época y que "dañaron gravemente la reputación del club".

"Osasuna se personó como acusación particular, es decir, como perjudicado, en el proceso judicial que concluyó con la condena de dichas personas y con una sentencia que les ha obligado a pagar al club una indemnización económica cuantiosa que ha derivado en el embargo de propiedades y bienes de dichas personas por parte de la entidad", escriben en su comunicación.

Consecuencias

En caso de que la investigación prospere y UEFA decida no admitir a Osasuna, el Athletic Club podría verse beneficiado directamente. Los rojiblancos finalizaron LaLiga en octava posición, por lo que una opción, que debería confirmar la RFEF, sería la de que sea el cuadro vasco el que dispute la próxima Conference League.