BARCELONA

Marc Casadó, el fan de Xavi que dormía entre balones de fútbol

El pivote defensivo jugó sus primeros minutos con el primer equipo del Barcelona.

Marc Casadó debutó con el Barça./GETTY IMAGES
Marc Casadó debutó con el Barça. GETTY IMAGES
Albert Rogé

Albert Rogé

Esta vez, sí. A la tercera fue la vencida. Marc Casadó ya puede gritar a los cuatro vientos que ha jugado un partido oficial con el primer equipo del Barcelona. El equipo de sus sueños. El que admiraba de pequeño y cantaba los goles junto a sus amigos. Plzen fue el escenario. Y jugando de pivote defensivo, la posición que le ha llevado a recibir esa oportunidad.

En las horas previas al partido, con sus más cercanos, Marc no escondía que le daba igual donde le pusiera Xavi. "Por el Barça juego donde haga falta", les decía. Él quería jugar. Si era de pivote, mejor. Pero si era de lateral, sería feliz igual. Y es que cabe recordar que durante la pretemporada, Xavi lo utilizó en el carril diestro. Ante la falta de efectivos, el técnico consideró que Casadó podía cumplir bien en esa posición. Así fue en los partidos que disputó.

En los planes iniciales, estaba considerada la opción de que jugara de lateral. Tras la baja de Sergi Roberto y Kounde, Bellerín es el único jugador disponible. Con pocos minutos en sus piernas, la intención era que disputara la primera hora de partido y pudiera tener descanso pensando en los encuentros ante Almería y Osasuna. Sin embargo, la lesión de Kessié le abrió las puertas del centro del campo a Marc.

Un recuerdo inolvidable

Minuto 67 de partido. Casi sin tiempo para darle muchas vueltas a la cabeza. Kessié caía al césped y Xavi llamaba a Marc Casadó. Nervios en Sant Pere de Vilamajor, su pueblo, aunque su familia y amigos quisieron desplazarse a la Peña Barcelonista de Sant Antoni de Vilamajor, el lugar donde Marc miraba los partidos de pequeño. "Vamos Marc, venga", le gritaban. Aunque estuvieran a muchos kilómetros de él, el centrocampista los tenía muy presentes.

Su partido fue más que correcto. Ordenó, robó y lideró a un centro del campo que precisaba de estabilidad, justo la que Kessié no le había podido dar. 35 toques al balón. 26 pases precisos, con un porcentaje de 89'7. Dos duelos individuales ganados, uno en el césped y otro aéreo. Una buena carta de presentación para un chico que oposita a la posición más deseada, el relevo de Sergio Busquets.

Durmiendo entre balones

En su casa aún recuerdan una anécdota de cuando tenía seis años. Siempre obediente con sus entrenadores, un técnico del Campus le dijo que tenía que amar el balón y dormir con él. Y así lo hizo. Se pasó años durmiendo entre balones. Su descubridor en el Infantil A del Barça, Carles Martínez, explicaba a Relevo que "al verlo todos dijimos que era el Busquets de su generación. Me sigue llamando para pedirme consejos, es muy agradecido".

Como confesó al finalizar el encuentro, de pequeño se fijaba mucho en Xavi para aprender sus movimientos y ejecutarlos dentro del terreno de juego. Ahora, le puede pedir los consejos en persona. Él fue su inspiración durante su formación y él ha sido el que le ha dado la oportunidad de su vida. Xavi siempre estará presente en una carrera deportiva que solo ha hecho que empezar.