El Liverpool, para el Real Madrid: un gigante con pies de barro
Los dos finalistas de la pasada edición repetirán en octavos de final de la Champions League.
Real Madrid y Liverpool vuelven a cruzar sus caminos. Será en octavos de final de la Champions. A los blancos les ha tocado uno de los 'cocos' a primeras de cambio, pero los precedentes son muy positivos: han jugado dos finales y una eliminatoria en los últimos años y han salido siempre vencedores. La última vez fue hace apenas seis meses, en París. Sin embargo, las cosas han cambiado desde entonces. El Liverpool sigue dando respeto, pero ha perdido fiabilidad.
El principal lastre han sido las lesiones. Klopp no ha podido contar con su plantilla al completo en toda la temporada y ha perdido a jugadores muy importantes por diferentes problemas físicos. Actualmente están de baja Jota, Luis Díaz, Keita y Arthur, este último fichaje de última hora en el mercado de verano. A lo largo del curso también han tenido problemas físicos Konaté, Matip, Thiago, Robertson y Oxlade-Chamberlain. Esto ha provocado de que el técnico haya tenido que hacer continuos cambios en el once.
Otro aspecto para entender esta pequeña 'crisis' es el mal momento de algunos de sus mejores futbolistas. Van Dijk, estandarte de la defensa, no está haciendo valer la superioridad que demostró en las temporadas pasadas. Lo mismo sucede con Trent Alexander-Arnold, del que se está hablando más por sus continuos errores defensivos que por lo que siempre aporta en ataque. Deberá verse de nuevo con Vinicius, un jugador que siempre ha mostrado sus carencias. Alisson o Fabinho tampoco acaban de alcanzar su mejor versión.
Cambios traumáticos en verano
Este verano, se vivieron muchos cambios en el equipo del norte de Inglaterra. La mejor noticia fue la renovación de Klopp hasta 2026. El alemán seguirá siendo el líder del proyecto. Sin embargo, la dirección deportiva no acabó de fichar las piezas que necesitaba el técnico. Perdieron a Mané, una referencia de las victorias del Liverpool del último lustro. En su lugar se fichó a Darwin por 75 millones de euros más 25 en variables. El uruguayo, que llegó procedente del Benfica, atraviesa en estos momentos un proceso de adaptación que no está siendo sencillo. Además, era necesaria una pieza que reforzase el centro del campo. Se intentó con Tchouameni, pero acabó en el Real Madrid. Finalmente, se tuvieron que conformar con Arthur, que hasta el momento no ha aportado demasiado a la plantilla.
En Premier League, el Liverpool se mantiene a 15 puntos del liderato. Solo ha sido capaz de ganar cinco de 13 partidos. En Champions, por el contrario, se ha mostrado mucho más fiable con cinco victorias en seis jornadas. Sin embargo, el Nápoles demostró su fragilidad superándolo por 4-1.
Salah quiere revancha
La gran amenaza sigue siendo Mohamed Salah, que también renovó su contrato hace unos meses. Por sorpresa y entre rumores de salida en 2023, el club anunció que ataba a su estrella hasta 2025. Suma 14 goles en 20 partidos, de los que la mitad los ha marcado en la máxima competición continental. A sus 30 años no ha perdido olfato y mantiene un físico que le permite ser definitivo en los metros finales. El egipcio busca revancha ante un equipo al que no ha podido ganar. Seis encuentros (cuatro con el Liverpool y dos con la Roma) en los que ha caído en cinco y ha empatado otro.
Tiene margen hasta febrero para ajustar piezas y que la maquinaria funcione como acostumbraba a hacerlo. Sin ir más lejos, en las cuatro últimas temporadas ha ganado una Premier, ha quedado segundo en dos y ha disputado dos finales de la Champions. Un rival temible, pero obligado a mejorar si quiere derrocar al campeón.