REAL MADRID
Así fichó el Real Madrid a Álvaro: "Conmigo va a jugar siempre"
Llegó en el verano de 2020 durante la pandemia. Raúl ha sido su principal valedor dentro de la Fábrica.
Álvaro Rodríguez es el hombre de moda en el Real Madrid. Su impresionante irrupción contra el Osasuna, dando dos asistencias (solo una de ellas válida) en tres minutos ha dado la vuelta al mundo y ha ilusionado al madridismo, que se crece cuando ve a chicos de la casa rendir con el primer equipo. El uruguayo apunta alto y ni siquiera Ancelotti descarta su salto desde el filial.
Si bien cuando llegó al Real Madrid en 2020 había muchas esperanzas puestas en él, no todos le veían con potencial para llegar al primer equipo. Ha sido él solo, con la ayuda de algunos valedores dentro de la Fábrica, quien ha ido rompiendo muros.
Su fichaje se cerró en el verano de 2020, el primero en pandemia, procedente del Girona. El equipo de captación había echado el ojo al espigado delantero catalán que actuaba tanto de delantero centro como de extremo. Con buen ojo, los informes apuntaban a un futbolista con unas condiciones fuera de lo normal y con proyección para llegar a primera división por cualidades y entorno.
La antigua dirección de cantera realizó los primeros informes del chico, trasladando buenas opiniones respecto a su posible evolución y valorándolo como una buena opción para reforzar el ataque del juvenil C. Sin embargo, es la nueva quien cierra el fichaje, justo en el verano de 2020 cuando se renueva la estructura de la Ciudad Deportiva de Valdebebas.
Si bien los contactos ya estaban avanzados, la incorporación se cierra durante la pandemia. El Real Madrid se cuida en salud para que ni Espanyol ni, sobre todo, Barcelona, se le adelanten. En el conjunto blaugrana lo conocía, pero había disparidad de opiniones respecto al futbolista y, ante la duda, no se lanzaron a por él. Esto lo aprovechan los blancos para, después de espiarlo durante toda la temporada (hasta que acabó la competición por el coronavirus), firmar a la perla catalana. Como casi todos los fichajes de cantera de aquel curso, no pudo visitar la Ciudad Deportiva hasta que se incorporó en el mes de julio a la pretemporada del juvenil C. Se cumplía así el sueño del chico, madridista desde niño.
El abrazo del Álvaro Rodríguez con sus padres en Pamplona.
Raúl, el entrenador que le cambia la vida
Si bien su exuberancia física marcaba diferencias desde el primer momento, se decidió que abandonase el extremo y se centrase en jugar solo como delantero centro. Fue entonces cuando apareció uno de sus principales valedores: Raúl González. La primera vez que pasó por sus manos el actual entrenador del Castilla vio el potencial del '9', afirmando que le veía condiciones para llegar a ser profesional, comentan fuentes del club. "Conmigo va a jugar siempre", llegó a decir cuando vio que a su talento le acompañaba una gran actitud. Una promesa que ha cumplido: no tuvo miedo en promocionarlo del juvenil B al filial y ahora es titular indiscutible a pesar de quedarle un año de fútbol formativo por delante.
Tras derrotar al Linares y colocar al Castilla líder de su grupo en Primera RFEF, Raúl recordó cómo se enamoró de su futbolista. Fue cuando era juvenil de segundo año. "Le vi rematar un centro como hacia tiempo que no veía a nadie", comentaba el entrenador. Álvaro suma este año cinco tantos con el filial, además de una asistencia con el primer equipo. Salvo sorpresa, viajará a Liverpool para duelo de Champions del próximo martes.
Álvaro fue uno de los muchos catalanes que el Real Madrid firmó para su cantera los últimos años. El último equipo de captación blanco tenía controlada la zona y se llevaron a cabo fichajes como el de Mario Gila, Por Fortuny, Edgar Pujol o Pol Durán, adelantando a Barcelona y Espanyol en varias ocasiones. La mayoría de ellos están dando un excelente resultado y Álvaro personifica a la perfección lo prolífica que puede ser la cantera catalana en territorio madridista. Si bien no se puede predecir que pasará con él en el futuro, en dos ratos ha demostrado tener nivel como para, de momento, ganarse la confianza de Ancelotti y minutos con el primer equipo blanco.