Baena - Valverde, tras el puñetazo: historia de un careo que no llega

El 'caso Baena- Valverde' sigue en 'stand by', a la espera de que la Comisión Antiviolencia, la Policía y un juez esclarezcan lo sucedido el pasado 8 de abril en el aparcamiento del Santiago Bernabéu. Esa noche, al término del encuentro entre el Real Madrid y el Villarreal, el uruguayo propinó un puñetazo en el pómulo izquierdo a Baena, sin compañeros como testigos, pero sí miembros de seguridad y las cámaras de la zona.

El medio blanco se duchó rápido y salió del vestuario dirigiéndose al autobús del Villarreal. En las inmediaciones se encontraba Baena, en chanclas y con capucha, esperando para partir con su equipo. Se abalanzó sobre él, lanzándole el tan sonado puñetazo y afirmando: "Esto para que hables de mi hijo". Viendo el tumulto, varios jugadores del Real Madrid allí presentes y el delegado del Villarreal entraron a separar a ambos, disolviendo la situación.

Al día siguiente, el jugador del Villarreal, Álex Baena, denunció al futbolista del Real Madrid. Previamente, intentó hablar con él, pero el uruguayo mantuvo que en el anterior encuentro, el que les enfrentó en Copa del Rey en La Cerámica el 20 de enero, se había referido a su situación personal. En concreto, en una etapa en la que su pareja atravesaba un duro momento en su embarazo, hasta el punto que debía interrumpirse y perder al bebé.

Como contamos en Relevo, Baena no era en principio partidario de poner la denuncia, pero quería dejar claro que él nunca había afirmado nada sobre el hijo de Valverde. Una vez filtradas a los medios de comunicación, esperaba un desmentido del internacional uruguayo. De haber sido así, no habría denunciado.

Baena insiste en que jamás le dijo nada en referencia a eso, y que ni sabía cuál era la situación personal de Valverde, por lo que cree que éste confundió la palabra "llorones", que sí le espetó en el campo.

Los compañeros de Baena coinciden en que se trata de un jugador de 'sangre caliente' en el campo, y que durante algunos partidos puede tener encontronazos verbales con rivales, pero que se trata de una buena persona que "nunca tendría un comentario tan retorcido y dañino, ha sido todo un malentendido", recordando lo mucho que le ha afectado a nivel emocional y familiar la acusación de Valverde.

El centrocampista del conjunto castellonense lo ha pasado mal desde entonces. Titular habitual esta temporada, tanto para Emery como para Setién, había perdido esa condición en los últimos partidos, empezando en el banquillo. Ante el Athletic, en el último encuentro, se desquitó, con titularidad y doblete goleador. Poco a poco parece que recupera su normalidad.

En los días posteriores a aquello que sucedió, la directiva del Villarreal contactó con la dirección deportiva del Real Madrid proponiendo que hablasen los jugadores y mediar así entre ellos para que se resuelva la situación, algo que en el club blanco vio con buenos ojos. Sin embargo, las semanas han pasado y no ha habido respuesta por parte de los blancos.