Albert Riera y Víctor Sánchez del Amo, el 'derbi' español en Eslovenia que puede decidir el título: "Hacemos marca España"
Los actuales técnicos de Celje y Olimpija, con una amplia trayectoria como futbolistas en la Liga, dirigen a dos de los equipos punteros del país y se ven las caras en un duelo clave.
En Eslovenia hay un derbi español. Al menos en cuanto a los banquillos. Albert Riera, exfutbolista de Mallorca, Espanyol, Liverpool y Manchester City entre muchos otros, es el actual entrenador del NK Celje, vigente campeón de liga. Víctor Sánchez del Amo, canterano del Real Madrid que vistió la camiseta de Racing de Santander, Deportivo de la Coruña, Elche y Panathinaikos, dirige al Olimpija de Ljubljana, actual líder de la liga que fue campeón hace dos años, precisamente, con Riera en los banquillos. Los dos están en los puestos altos de la tabla y hoy mismo tienen un duelo vital por el título.
Riera fue el primero en llegar a los banquillos eslovenos. Lo hizo en el año 2022, en su primera aventura como entrenador principal y poco después de haber colgado las botas en el mismo país. Tomó las riendas del Olimpija, que a principios de siglo sufrió una refundación por problemas económicos y tuvo que reiniciar su andadura en el fútbol desde lo más profundo de las divisiones eslovenas. Cuando el manacorí asumió las riendas, el Olimpija sumaba seis títulos de liga (cuatro del equipo anterior a la bancarrota y dos del actual), el segundo equipo más laureado detrás del Maribor.
Él consiguió el séptimo, aunque antes tuvo que enfrentarse a un episodio incómodo: la rueda de prensa de su presentación fue boicoteada por un grupo de ultras descontentos por la destitución del entrenador anterior, Robert Prosinecki. "Todo el mundo lo recuerda", rememora Riera para Relevo. "Es una forma de explicar la realidad que me encontré. El Olimpija venía de ser tercero tres años seguidos y la gente no estaba contenta. Cuando entró la directiva nueva decidieron sustituir a Prosinecki, muy querido aquí, y los ultras se pusieron de su parte".
Albert Riera capeó la situación, prometió resultados si le dejaban trabajar y los consiguió. "Ganamos ocho partidos seguidos y enseguida fui coreado; al final ganamos la Liga y la Copa después de tres años malo del Olimpija", afirma el balear. Sin embargo, al terminar la temporada, no se pusieron de acuerdo en la renovación, según el técnico, por desavenencias con la directiva: "Les gustaba mucho meterse, y yo tengo carácter y tengo claro que las decisiones en el campo las tomo yo".
Riera y Olimpija separaron sus caminos y el Celje, también esloveno, se hizo con sus servicios. La temporada arrancó bien, pero en el mes de octubre Riera recibió una llamada para ocupar el banquillo de un exequipo: el Girondins de Burdeos. El Celje terminó ganando la liga la temporada pasada, y el ex del Mallorca se siente parte del título. "Gané el 30% de los puntos y estaba a gusto antes de irme, pero apareció el Girondins, donde me sentí muy querido, y creía que podía avanzar en mi carrera de entrenador". En octubre del año pasado, el equipo francés estaba en Ligue 2, y el objetivo era ascender. No obstante, acuciado por graves problemas económicos, el Girondins no pudo reforzar el equipo como había prometido y a final de la temporada pasada separaron sus caminos. Ahora el Girondins está en cuarta división y lucha por sobrevivir.
"El mismo día que salgo del Girondins, el Celje me llama para que vuelva porque saben la forma que tengo de trabajar", cuenta Riera. Su actual equipo, antes de la liga de 2024, solo había conseguido levantar el título en 2020, y era alguna temporada coqueteaba con el descenso o se quedaba a media tabla. Por eso, Riera está contento de haber metido al Celje en la lucha histórica que mantenían los otros dos equipos de Eslovenia: el Maribor y el Olimpija, club en el que él mismo ganó la liga y cuyo banquillo ocupa ahora mismo otro español.
Dos entrenadores españoles entre los tres equipos más importantes
"Vine aquí porque es la primera vez que se me plantea un proyecto para pelear por títulos", atiende también a este medio Víctor Sánchez del Amo. "Hasta ahora como entrenador había estado en equipos que peleaban por no descender, o en los que entraba a mitad de temporada, pero ahora esta oportunidad es una gran motivación", remata. Y las cosas no pueden irle mejor. Con un presupuesto inferior a sus rivales, lidera la liga con 28 puntos y una sola derrota. Ha firmado un arranque con números de récord para el club, como el de haber estado 17 partidos invicto entre todas las competiciones, con una plantilla similar a la que quedó tercera la temporada pasada.
Tanto el Celje de Riera como el Olimpija de Sánchez del Amo están este año en la Conference League, y ambos han conseguido una meritoria victoria en la competición, aunque los dos están centrados en el título de liga. Hoy mismo se enfrentan, un partido importante para la clasificación: antes de arrancar la jornada, el Olimpija la lideraba con 28 puntos y el Celje, cuarto en la tabla, estaba cinco puntos por detrás.
"Nos hemos dejado puntos contra rivales más pequeños, pero es cuando jugamos entre los equipos fuertes donde se decide el campeonato", defiende Riera, una línea en la que también apunta Sánchez del Amo. "Nos enfrentamos cuatro veces en cada liga y entre nosotros se dirimen las posibilidades de ser campeón", argumenta el extécnico de Deportivo, Betis, Málaga y Cartagena. Ya se vieron las caras en una ocasión y el partido terminó en 2-2.
Esta cita será de nuevo un partido especial para Albert Riera, que se enfrenta a su exequipo, aunque está plenamente centrado en el Celje. "Es la segunda vez que vengo aquí y me siento muy querido, lo que pasó allí es un punto y aparte, con la directiva actual no volvería", sostiene Riera, que no descarta entrenar en España cuando termine este ciclo en Eslovenia.
En la banda del estadio del Celje coincidirán dos entrenadores que han tenido grandes mentores. Riera, por ejemplo, ha estado a las órdenes de Benítez, Valverde, Terim y Luis Aragonés. "De cada uno intento coger no lo mejor, sino lo que yo puedo transmitir. Me considero un entrenador que tengo claro lo que quiero, y primero el carácter y la personalidad. Sánchez del Amo coincide en que algo que gusta mucho en Eslovenia de los entrenadores españoles es la forma que tienen de vivir el fútbol. "Transmitimos metodología, pero sobre todo pasión", declara el madrileño, que opina que los entrenadores nacionales son una parte más del gran momento que vive el fútbol español, como se comprobó en la última Eurocopa o en la gala del Balón de Oro. "Cuando salimos fuera hacemos marca España", remata. También en Eslovenia.