FORMULA 1

Toto Wolff recuerda el día que Hamilton terminó por los suelos con una Superbike: "El ingeniero creía que yo lo sabía"

El piloto británico probó en Jerez en 2018 una motocicleta de competición, un holandés que le vio quedó impresionado porque "no tenía miedo".

Toto Wolff recuerda el día que Hamilton terminó por los suelos con una Superbike: «El ingeniero creía que yo lo sabía»
Gonzalo Cabeza

Gonzalo Cabeza

Que a Lewis Hamilton no le asusta demasiado la velocidad es algo que ya podíamos saber. Una carrera jalonada de títulos en la Fórmula1 no se vive si uno siente pánico cuando se dispara el velocímetro. Ahora bien, una cosa es eso y otra es montar en moto, pero por lo que se ve al británico tampoco le asusta nada cuando va a cuerpo descubierto.

Lo ha contado Toto Wolff, su jefe en Mercedes tantos años, en el podcast Armchair Expert. La prueba la hizo hace seis años, en 2018, y en España, en el circuito de Jerez, uno de los más míticos del motociclismo mundial. Allí le dieron una superbike y él lo aprovechó... hasta que terminó por los suelos para temor de sus jefes en Mercedes.

Fue una prueba de dos días en una Superbike YZF-R1supervisada por el equipo Crescent Racing del Campeonato Mundial de Superbikes. Es habitual que los pilotos quieran probar otras cosas, en parte porque tienen mucha querencia a la velocidad, aunque es algo más raro que se lo permitan. Aunque claro, recién ganado el quinto título mundial, todo es más sencillo.

Le vio rodar el piloto de Yamaha WSBK, Michael van der Mark, y quedó realmente impresionado porque el piloto británico "no tenía ningún miedo". Wolff ha contado en el podcast que no pudo contactar con Hamilton y que tampoco sabía que iba a hacerlo. Tampoco pasó nada, un año más tarde, hizo una carrera de prueba contra Rossi y tampoco pasó nada. "No acudí a verlo, pero tuve que dar permiso. Lo di y creo que ambos realmente lo apreciaron".

"Lewis es el chico molesto del colegio que hace todo bien y rápido. Te contaré una historia de la moto. A escondidas -no me lo dijeron- fueron a Jerez a hacer pruebas y uno de mis estrategas era motero", explica Wolff.

El recuerdo del alemán explica que sospechó de lo que había pasado cuando le respondió su ingeniero. "Al llamar a Lewis, su ingeniero contestó y dijo: 'todo está bien, todo está bien, acabamos de terminar de montar, él está bien'".

Claro, esa respuesta abría otras preguntas: "Dije: '¿Qué quieres decir con que está bien? ¿Qué pasó?' ¡En realidad se había caído y mi ingeniero creía que yo lo sabía! Lewis estaba sólo cuatro segundos detrás de los profesionales de MotoGP. Increíble. La sensación física que obtiene de cualquier máquina lo convierte en un campeón", añadió Wolff en su recuerdo de aquellos días.