F1 | GP MÓNACO

Cómo un piloto que quedó decimosexto 'regaló' el podio a Carlos Sainz

La cautela de Guanyu Zhou durante el accidente de Checo Pérez en las primeras curvas fue fundamental para que el piloto español no partiera en la resalida desde el fondo de la parrilla.

Carlos Sainz, en el podio de Mónaco. /EFE
Carlos Sainz, en el podio de Mónaco. EFE
Jorge Peiró

Jorge Peiró

Guanyu Zhou le puso en bandeja el podio a Carlos Sainz en Mónaco. ¿Cómo es posible que un piloto que haya terminado una carrera en decimosexto lugar y haya tenido un Gran Premio intrascendente haya podido ayudar tanto al español estando tan lejos? Hay que remontarse a la accidentada salida del Principado para entenderlo.

Checo Pérez chocó con Kevin Magnussen armando un estropicio de quilates y dejando el Red Bull partido en dos. Los comisarios no tardaron en sacar bandera roja para detener la carrera por seguridad, después de que la pista quedara infestada de piezas de fibra de carbono de los monoplazas, y fue ahí cuando Sainz pudo perder su podio.

El español había bloqueado neumáticos tras tocarse con Oscar Piastri unos metros antes luchando por la segunda posición y se fue largo en la curva de Santa Devota. En ese momento, el madrileño había caído a los últimos puestos. De no ser por Guanyu Zhou, piloto de Sauber, habría partido en la resalida desde esas malas posiciones.

Como Alonso en Australia

Sin embargo, la cautela del chino mantuvo a Sainz en la tercera plaza en una cita donde no se adelanta y lo normal es mantener tu puesto los domingos. Zhou tuvo las mejores vistas del accidente entre Pérez y los Haas y fue extremadamente cauto cuando vio los restos. Fue tan despacio, casi se detuvo por completo para esquivar las piezas y no dañar su monoplaza, que hasta el coche médico le adelantó.

La clave está en el primer sector, o la línea que lo delimita. Si Zhou hubiera ido más rápido y hubiera recorrido esos metros que le faltaron hasta el segundo sector, Sainz hubiera partido desde el fondo de la parrilla en la resalida. Como era el último, no lo hizo y se quedó donde se quedó. La norma defiende que el madrileño mantuviera su privilegiada tercera posición. Todos los pilotos tendrían que haber cruzado esa línea para que Sainz perdiera posiciones.

Ya ocurrió algo similar en Australia 2023. En el caos de la resalida de aquella cita, el propio Sainz se llevó puesto a Fernando Alonso antes de que saliera la bandera roja. El asturiano, por radio, se acogió al reglamento para reclamar que mantuviera su posición de podio y no partiera en la resalida desde muy atrás. Como Sainz en Mónaco.