FÓRMULA 1

Álex Palou completa su debut soñado en el GP de EE UU

El piloto español, ganador de la IndyCar 2021, se estrenó por todo lo alto con el McLaren MCL36 en la primera sesión de libres de la F1 en Austin.

Álex Palou en su debut con McLaren en los libres 1 del GP de EE UU de F1. /AFP
Álex Palou en su debut con McLaren en los libres 1 del GP de EE UU de F1. AFP
Sergio Lillo

Sergio Lillo

A las 21:01 hora española (14:01 en Austin), Álex Palou ha podido saborear de primera mano lo que es pilotar un Fórmula 1actual en un fin de semana de gran premio. El piloto barcelonés, el 21º español en disputar una sesión oficial de F1, no olvidará nunca su primera vuelta al Circuito de Las Américas de Austin con el McLaren MCL36. El escenario no ha sido nuevo para él, ya que fue allí precisamente donde debutó en el pandémico 2020 en la IndyCar, la misma que conquistaría un año después en su segunda temporada.

Palou ha llegado a la cita después de haber disputado cuatro jornadas de test con el monoplaza de 2021. Las tres primeras fueron en el Circuit de Barcelona-Catalunya a mediados de septiembre, donde se repartió el tiempo en pista con el mexicano Patricio O'Ward, y la última fue a principios de octubre en el Red Bull Ring, donde disfrutó de una jornada para él solo. En tota, alrededor de 850 kilómetros sobre el asfalto y una buena ronda de horas de simulador en Woking —se estrenó allí a finales de agosto— para estar listo de cara a uno de los días más importantes de su carrera deportiva.

Aunque su estreno lo ha completado con el dorsal 28, que no tiene ningún significado para él y que le fue asignado a McLaren aleatoriamente, la sonrisa con la que se bajó del coche una hora después habla por sí sola. Y no era para menos. El catalán de 25 años había llegado a estar a solo tres décimas de Lando Norris, su compañero de equipo y con 78 carreras en F1 a cuestas. Lo logró cuando ambos montaron el neumático medio en la primera media hora de sesión.

No obstante, McLaren le encargó completar una tanda larga final con ese neumático usado, en lugar de montar el blando (más rápido), como sí hizo Norris. Esto propició que Palou solo pudiera acabar 17º la primera sesión de entrenamientos libres del GP de EE UU. Pero que le quiten lo bailado.

Palou demostró desde los primeros instantes su comodidad dentro del habitáculo del McLaren y cuando su ingeniero le dijo a media hora del final de la sesión que estaba apretando demasiado el freno en la curva 11 y provocando un bloqueo de los neumáticos traseros, le respondió con una sonrisa en los labios: "Sí, entendido. Simplemente llegué demasiado rápido. Este coche es una auténtica locura, tío".

Después de bajarse del coche comentó en los micrófonos de DAZN F1 tras la pregunta de si le gustaría verse en la F1: "Bueno, obviamente, a quién no, para eso estamos aquí. Pero la verdad es que el trabajo que teníamos que hacer era prepararnos para poder completar la FP1 con McLaren, lo hemos hecho y ya hemos sacado la cabeza por aquí".

"Estoy súper contento. Era un sueño conducir un F1 y más en una sesión oficial y se me ha pasado súper rápido. Hicimos mucho trabajo al principio para el equipo y después nos centramos más en mí para que estuviera contento. Este coche es de locos y sentí que era capaz de más si hubiese tenido más tiempo. Pero nuestro plan hoy no era ir rápidos, era sumar vueltas de experiencia", añadió posteriormente en rueda de prensa.

"A lo largo de mi carrera me di cuenta de que la F1 no era un lugar al que podría llegar realmente y fui a la IndyCar y logré ganar. Ese campeonato me dio la oportunidad de estar aquí hoy. Si alguien me da un asiento, por supuesto que lo cogeré, pero no es mi último objetivo. Tengo una carrera en la IndyCar, he tenido éxito y quiero ganar el máximo número de campeonatos posibles".

El español, que hace unos meses no veía claro su futuro después de entrar en una confrontación legal con su equipo en la IndyCar, Chip Ganassi Racing, tiene motivos para sonreír. No será la última vez que se suba a un F1 actual esta temporada, aunque los planes todavía no están cerrados.

Palou ha vuelto a demostrar de qué pasta está hecho y ha dejado claro que si le dan la oportunidad, es capaz de aprovecharla desde el minuto cero. En el box, el oscarizado Brad Pitt fue testigo de excepción de un día histórico para el niño que acudía con su padre a las gradas del Circuit de Barcelona-Catalunya y que, ya de joven, tuvo que marcharse a Japón para buscarse la vida en el mundo de las carreras.