Crawford apuesta por sí mismo
Terence Crawford regresa al ring este sábado. Se ha hecho su propio promotor para intentar cerrar su combate contra Spence, pero de momento le espera Avanesyan.

En noviembre de 2021 Terence Crawford derrotó a Shawn Porter. En ese momento decidió dar un vuelco a su carrera. El de Nebraska, de 35 años, ha sido campeón en tres divisiones (ligero, superligero y welter) y unificó el superligero. Es uno de los púgiles más talentosos de la actualidad, pero le han faltado grandes nombres. Su expromotora, Top Rank, no le ha querido cruzar con tops de otras empresas y eso le ha lastrado. Cansado de ello, Crawford decidió no renovar su contrato con ellos y se convirtió en su propio manejador. El combate contra Errol Spence es el que toda la afición espera durante años y ahora parecía listo para darle. Solo era cuestión de que quedase libre el 1 de enero de 2022.
La fecha llegó e incluso el año va a terminar y no hemos visto ese combate. Una vez fue libre, Crawford denunció a Top Rank y su presidente, Bob Arum, al entender que por motivos raciales no le habían dado los combates merecía. A la par comenzó a hablar con Premier Boxing Champions (PBC), empresa que mueve a Spence. De inicio le tocó esperar, y es que PBC decidió unificar todas las coronas bajo su paraguas y enfrentó al estadounidense contra Ugás. El texano ganó y es el campeón WBC, WBA e IBF del welter. Crawford solo tiene el cinturón WBO, por lo que era la cara b. Las negociaciones se alargaron y según apunta Crawford, aceptó todo lo que le ofrecieron. Pese a ello, el combate no se dará.
Cansado de esperar, Crawford dio un paso al frente a finales de noviembre. Buscó su retador oficial WBO, llamó a David Avanesyan (29-3-1, 17 KO) y organizaron una pelea para este sábado en Omaha (Nebraska). El campeón peleará en su ciudad y se espera una gran entrada en el CHI Health Center (con capacidad para algo más de 17.000 espectadores) y además ofrecerá la pelea por su propio PPV (al precio de 39,99 $ para todo el mundo). Al margen de todo. La apuesta por sí mismo es clara, ahora habrá que dar la respuesta. Pese a su gran talento no es demasiado taquillero, por lo que es incierto el negocio. En el ring, pese a que Avanesyan ha sido un ogro para los españoles, noqueando en dos ocasiones a Kerman Lejarraga y una a José del Río, Crawford es superior. Lo lógico sería una victoria gracias a su movilidad, calidad y ritmo para después retar a Spence. Todo puede pasar, pero con su edad Crawford es consciente que necesita ese combate. El tiempo pasa para todos y parado puede que un día se vea sorprendido por el paso de los años. Apostó por sí mismo, pero el all-in debe ser total. Spence es su única salida, pero antes le toca Avanesyan. No lo pondrá fácil el ruso.