BALONMANO

"Ojalá el día tuviese 36 horas": el reto de ser madre y sostener a toda una selección en un Europeo

Silvia Navarro, capitana española, se sincera en Relevo sobre lo duro que es su día a día antes de afrontar un nuevo torneo internacional.

Silvia Navarro detiene un penalti ante Noruega en el pasado Mundial. /GETTY
Silvia Navarro detiene un penalti ante Noruega en el pasado Mundial. GETTY
Óscar Méndez

Óscar Méndez

Con 43 años y centenares de partidos a sus espaldas, Silvia Navarro, capitana de la Selección femenina de balonmano, no tiene nada que demostrarle a nadie, pero todavía mantiene el gusanillo por el balonmano, que ahora comparte con su faceta de madre, aunque a veces se le hace cuesta arriba. "Llevo mucho tiempo dedicándome a esto y ahora lo compagino con la maternidad, que no es sencillo. El lado bueno es que mi hijo se está empapando de los valores que tiene el deporte y ese es el legado que le voy a dejar a mi familia, que él pueda disfrutar de todo esto", apunta a Relevo justo antes de afrontar un nuevo torneo con el combinado nacional.

Y es que su día a día es de todo menos sencillo. "Es vertiginoso y si pudiese pedir un deseo pediría que tuviese 36 horas", asegura. "Me levanto muy temprano, desayuno con mi hijo, lo llevo al colegio, voy corriendo a mi primer entrenamiento, vuelvo a casa para hacer la comida, recojo a mi hijo, vamos a actividades extraescolares, vuelvo a otro entrenamiento… Al final lo hago con todo el amor del mundo, pero es costoso" relata.

A sus espaldas, casi 250 partidos con España, varias medallas internacionales y numerosos títulos a nivel de clubes. Hablar de Silvia Navarro es hablar del balonmano femenino en España. Por la Selección han pasado incontables jugadoras en las dos últimas décadas, diferentes generaciones que han ido aumentando el nivel grupal y que siempre se han encontrado con la portera valenciana para salvarles los muebles. "Me siento afortunada por seguir jugando a los 43 años, tanto en mi equipo como con España. Es lo que he hecho durante muchísimos años y todavía parezco una niña con zapatos nuevos", relata justo antes de viajar a Montenegro.

A por todas

Sin nada que perder y sin miedo a nadie. Así llegan tanto ella como la Selección femenina de balonmano al Campeonato de Europa que se celebra desde este viernes en varias sedes del viejo continente. España debutará mañana ante las anfitrionas y que estarán arropadas por 5.000 fervientes aficionados, algo que no aumenta la presión del combinado nacional. "Las que la tienen que tener son ellas por jugar en casa. Nosotras tenemos que intentar darle la vuelta para que sea un punto que juegue a nuestro favor en el choque inicial", cuenta Navarro.

España llega a este Europeo tras finalizar segunda en su grupo de clasificación por detrás de Hungría, con la que intercambió derrotas como locales, y en su preparación se adjudicó recientemente el tradicional Torneo Internacional con victorias claras sobre Túnez (39-29), Egipto (34-23) y Suiza (37-26) que le han servido para ir afinando su puesta a punto.

Encuadradas en el grupo D junto a las balcánicas, Alemania y Polonia, la capitana no se pone un objetivo a largo plazo, sino que sabe que en este tipo de torneos lo más importante es adoptar la filosofía del Cholo Simeone de ir partido a partido. "Lo importante es pasar y puntuar. Siempre cuesta abrir un campeonato, y hacerlo contra un anfitrión mucho más, pero tenemos que intentar no perder, ganar en confianza día a día y pasar el primer corte, porque un Europeo es mucho más exigente que un Mundial", explica Navarro, que es consciente de que esta España no está entre las principales favoritas. "La ilusión no la perdemos porque nunca se sabe qué puede pasar en el deporte", reflexiona.

Para competir ante Noruega, a la que la portera del Rocasa cataloga como "potencia mundial" y "favorita", las 'Guerreras' mantienen las armas que les han llevado, entre otros muchos éxitos, a conseguir medallas en JJOO y Mundiales. "Somos un equipo muy aguerrido en el campo. Si algo nos caracteriza es que no damos un balón por perdido y jamás escatimamos en ganas y empeño. Sabemos de la calidad de todos los equipos, pero hemos demostrado que nosotros podemos competir contra cualquiera", avanza Navarro, que aborda el otro punto fuerte del equipo nacional. "Esta Selección funciona como equipo y como familia. Estamos mucho tiempo juntas y las compañeras que han entrado nuevas se han acoplado perfectamente y estamos muy unidas".

La Selección Española, antes del Campeonato de Europa.  RFE Balonmano
La Selección Española, antes del Campeonato de Europa. RFE Balonmano

Además de Noruega, vigente campeona de casi toda, Navarro destaca el nivel de otras selecciones como Francia, Dinamarca o Países Bajos. "La verdad es que hay auténticos equipazos y no te puedes quedar solo con uno, pero nosotras también estaremos ahí", indica. Un Europeo es un torneo plagado de estrellas y el que arranca hoy no será una excepción. "Haraldsen, Nora Mørk, Estavana Polman, Radicevic... El talento es enorme y cada vez está creciendo más", explica la portera nacional, que añade que es una tendencia que también se da en nuestro país. "Cada año se da un pasito más y ya hemos pasado el peor momento de crisis. Ahora hay mejores jugadoras en nuestra liga y ojalá instituciones y empresas apuesten más por el deporte femenino y también por el balonmano porque necesitamos recuperar gente".

Silvia Navarro y Eli Pinedo celebran la histórica medalla olímpica de 2012.  GETTY
Silvia Navarro y Eli Pinedo celebran la histórica medalla olímpica de 2012. GETTY

Silvia sabe que el día de su retirada no está lejos, aunque todavía no se ha planteado una fecha fija. Lo que sí tiene claro es a quien agradecer todo lo conseguido hasta ahora. "Yo estoy aquí gracias a mi madre. Jugaba a tenis y balonmano, los compaginaba pero no me daba tiempo a todo y al final opté por el balonmano", explica. Sin embargo, cuando parecía que había llegado a la élite recuerda que hubo gente que le dijo que no podría hacer carrera en portería por su baja estatura. "Fue complicado, pero tuve mucho refuerzo familiar y no tiré la toalla", señala. Una experiencia con la que ahora quiere ayudar a esas jóvenes deportistas que están empezando en algún deporte. "Les diría que nadie les quite la ilusión, que no desistan y que todo esfuerzo tiene recompensa". 

Desde hoy y hasta el próximo día 20, las 'Guerreras' volverán a pelear cada balón en una pista de balonmano para seguir levantando a la gente del sofá de su casa cantando cada gol anotado. Saben que no será sencillo, pero llegan con la máxima ilusión. "Tenemos que olvidarnos de lo hecho hasta ahora y centrarnos en lo actual porque partimos todas de cero", comenta Navarro.