Nikola Jokic pone el grito en el cielo tras sufrir la defensa de los Thunder: "Van contra mi cuerpo, usan mucho las manos"

En un duelo de ataques erráticos, los Oklahoma City Thunder vencieron el domingo 92-87 a los Denver Nuggets y empataron 2-2 esta serie de semifinales de la Conferencia Oeste de la NBA.

Los Thunder, grandes dominadores de la fase regular, tuvieron que pelear hasta el final para evitar un 3-1 en contra que los hubiera colocado al borde de la eliminación.

Su líder, el canadiense Shai Gilgeous-Alexander, comandó el triunfo con 25 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias sin mostrar su habitual eficacia en el tiro (8-19).

El serbio Nikola Jokic, rival del canadiense por el premio MVP (Jugador Más Valioso) de la temporada, firmó 27 puntos (7-22) y 13 rebotes para unos Nuggets que se sobrepusieron a uno de los peores inicios de partido de la historia de los playoffs.

Ambos equipos igualaron la peor producción ofensiva de un primer cuarto en la postemporada, con 25 puntos combinados, y concluyeron el juego con un mediocre porcentaje de 33,5% de acierto en tiros de campo.

"Cada partido es a vida o muerte en una serie contra un buen equipo", subrayó Gilgeous-Alexander. "No queríamos una tercera (derrota). Mientras sigamos mejorando a lo largo de la serie, deberíamos estar en un buen lugar".

El canadiense daba voz al vestuario de los Thunder que saltó a la cancha con la lección bien aprendida del tercer partido y no querían que se repitiera. Por ello apretaron en defensa para desactivar a un Jokic que no está teniendo su mejor serie de playoffs y que tendrá que busca la forma de ser más eficiente en ataque.

"Es un poco de todo. Me están defendiendo muy bien, van contra mi cuerpo, usan mucho las manos, son físicos. Creo que también fallé como dos o tres tiros abiertos hoy. Es un poco de todo", explicó en una rueda de prensa. "Me están cerrando los espacios en la pista, siempre hay un jugador detrás del defensor. Por supuesto que tengo que hacerlo mejor, pero es parte del juego", añadió.

No resultó nada fácil para los Thunder. El duelo fue una pelea callejera entre dos conjuntos con el puñal en la boca, incapaces de anotar con un mínimo de fluidez y en el que 9 puntos de Shai-Gilgeous Alexander en el último cuarto resultaron fundamentales.