Los Knicks hacen estallar a la Gran Manzana: miles de personas se echan a la calle y hasta Bad Bunny y Thimothée Chalamet se contagian de la locura del Madison
Los aficionados de los Knicks celebraron durante la madrugada el pase del equipo a las Finales del Este por primera vez en 25 años.

Con las calles alrededor del Madison Square Garden repletas de aficionados en un ambiente de euforia total, la ciudad de Nueva York celebró este viernes la clasificación de los Knicks para su primera final de la Conferencia Este en 25 años.
Los Knicks trituraron a los Boston Celtics por 119-81 y destronaron a los vigentes campeones de la NBA por 4-2. No alcanzaban una final de conferencia desde el año 2000, no juegan unas Finales desde 1999 y no ganan un título desde 1973 (el otro que tienen es de 1970).
Con todo ello no es de extrañar que los fans que habían acudido al Garden festejaran por todo lo alto una jornada histórica y al grito de "Knicks in Six!" (Los Knicks ganan en seis partidos).
Pero algunos ya pensaban en su rival por un puesto en las Finales: los Indiana Pacers, el equipo que el año pasado les eliminó en segunda ronda y que en el 2000, con Reggie Miller al mando, les cerró las puertas de la serie por el anillo.
Los Knicks partían en semifinales del Este con todas las de perder ante unos temibles Celtics que parecían favoritos claros y contra los que habían perdido en sus cuatro duelos de temporada regular.
Pero el equipo liderado por un estelar Jalen Brunson le dio la vuelta a los pronósticos, remontó los dos primeros encuentros en Boston una diferencia de -20 y supo cerrar este viernes la serie con una victoria aplastante aprovechando la desgraciada ausencia en los Celtics de un Jayson Tatum lesionado de gravedad.

Había muchas dudas en torno a estos Knicks de Tom Thibodeau, con un quinteto sólido que completan el dominicano Karl-Anthony Towns, Josh Hart, OG Anunoby y Mikal Bridges pero que dejó incógnitas durante la temporada regular por su 'Brunson-dependencia' en ataque, la limitada aportación de su banquillo, la enorme carga de minutos de sus titulares, su incapacidad para competir contra los mejores conjuntos de la liga, etc.
Sin embargo, los Knicks sacaron adelante una espinosa primera ronda contra los Detroit Pistons (4-2) y ahora mandaron a casa a unos Celtics que son rivales eternos firmando además su mayor triunfo en la historia del 'playoff' (+38).
Bad Bunny, un 'knickerbocker' más
Los New York Knicks se clasificaron este viernes para una final de la Conferencia Este por primera vez en 25 años y entre los famosos que no se lo quisieron perder en primera fila del Madison Square Garden destacó Bad Bunny.
El reguetonero puertorriqueño, que ya había acudido a los dos primeros partidos en Nueva York de esta semifinal del Este, disfrutó a pie de pista del enorme triunfo por 119-81 con el que los Knicks eliminaron por 4-2 a los Boston Celtics, vigentes campeones de la NBA.
Bad Bunny se sentó este viernes junto al actor Timothée Chalamet, otro gran fan de los Knicks y protagonista entre las celebridades en esta postemporada del equipo neoyorquino.
El cineasta Spike Lee, sin duda el aficionado más famoso de los Knicks, el actor y director Ben Stiller y el músico Lenny Kravitz también celebraron la victoria de unos Knicks que ahora se medirán a los Indiana Pacers por un puesto en las Finales de la NBA.