Más runrún con Willy Hernangómez tras pedir más a Grimau: sólo siete minutos hasta con Vesely eliminado...
El pívot sólo saltó al parqué durante la primera parte y su actuación no fue acertada. Ni siquiera regresó a pista cuando el Barça se quedó sin pívot.

Tres días. Eso es lo que ha durado vigente la reivindicación de más minutos que había hecho Willy Hernangómez. Porque por más que el pasado 28 de marzo, el pívot azulgrana asegurase que le gustaría "tener un rol más grande y ser más importante. No ha habido ningún partido o uno en el que he jugado más de 30 minutos", este domingo en la victoria ante Monbus Obradoiro (84-89) el mensaje que le ha lanzado su entrenador, Roger Grimau, ha sido claro... Y totalmente opuesto. El pívot tan sólo ha jugado siete minutos y 25 segundos durante la primera mitad. Y ni siquiera ha regresado a cancha cuando el Barça se ha quedado sin pívot tras la eliminación de Jan Vesely.
Cuando el pasado jueves, Willy Hernangómez reconoció en una entrevista con Rac1que quería tener más minutos para poder mostrar más -"en 15 o 20 minutos es difícil hacer muchas cosas y poder ayudar al equipo, creo que es algo que me llegará", dijo-, lo que seguramente nadie imaginaba es que este domingo su aportación iba a quedar reducida a casi algo testimonial.
"Cuando tienes una plantilla de 14 muy buenos jugadores, es realmente jodido que todos puedan tener minutos y lo importante es que están conectados y cuando tienen la oportunidad la intentan aprovechar. (...) Ha sido por sensaciones de cómo estaba Jan, del tipo de defensa que queríamos plantear... Hay veces que me decanto por unos jugadores y otras por otros. Choca ver que hay jugadores que no juegan minutos, pero son sensaciones", se justificaba Roger Grimau tras el choque. Y lo cierto es que lo que dejó Willy sobre el parqué en el tiempo que estuvo en pista no fue bueno.
El pívot no estuvo acertado en ataque (un punto) ni en defensa (hizo dos faltas y no cazó ningún rebote), pero tampoco tuvo la oportunidad de demostrar otra cosa. Y es que Grimau, directamente, abogó por un quinteto bajito (small-ball) cuando se quedó sin Vesely, que fue eliminado tras recibir una técnica al protestar la que había sido su cuarta falta personal. Y teniendo en cuenta que tampoco estaba Jabari Parker, que no fue de la partida por decisión técnica.
"Era sobre todo por si hacíamos situaciones de cambios, estar más equilibrados ahí", admitió el técnico en los micrófonos de Movistar Plus+. Y aquella apuesta fue por dejar caer a Oscar Da Silva al puesto de '5' para completar el quinteto. Es decir, jugar sin pívot y no probar con Willy, que venía de reclamar más minutos públicamente, y que estaba sin problemas físicos ni de faltas.
Sea como fuere, lo cierto es que el runrún sobre lo que ocurre con Willy Hernangómez dentro del Barça no cesa. Básicamente, porque por contrato y cómo fue su fichaje, estaba llamado a convertirse en uno de los jugadores referentes del continente y no termina de despegar. Porque aunque a veces se le ha visto firmar grandes actuaciones, no ha tenido regularidad ni tampoco continuidad como para ello.