La pareja de árbitras ACB no se conforma con España: "Aquí nos sentimos apoyadas, pero esto es como una pirámide"
Esperanza Mendoza y Yasmina Alcaraz han hecho historia en la Liga Endesa y cuentan en Relevo lo que aún falla para ver a más mujeres arbitrando en competiciones europeas.

Una notificación y un mensaje. Así fue como Esperanza Mendoza (Cáceres, 1983) y Yasmina Alcaraz (Girona, 1989) se enteraron de que el pasado 7 de enero les llegaba "un pedazo de regalo de Reyes": ambas, amigas y compañeras, iban a hacer historia en la ACB. Las dos árbitras, que desde hace cuatro años comparten el formar parte del estamento arbitral en la Liga Endesa, habían sido designadas para pitar el mismo partido. Ese Surne Bilbao Basket - Baxi Manresa de la Jornada 17 que terminó siendo un referente de la igualdad para el baloncesto español y europeo. Por primera vez en la máxima competición española, dos mujeres formaban parte del quinteto arbitral. Y aunque "aún queda por hacer", ya es "un pasito más" en aras de la igualdad en una profesión que todavía debe apostar más, sobre todo en Europa, por la mujer.
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— Liga Endesa (@ACBCOM) January 7, 2024
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"Siempre digo que para que sea normal debe haber una primera vez y este ha sido el caso. Hemos coincidido cuatro años en ACB, pero en uno de ellos, ella estaba embarazada, entonces no hemos tenido la opción de pitar. Y al cuarto, ha llegado el momento", explicaba Mendoza a Relevo. Eso sí, aunque quieren darle normalidad, sí que reconoce que al enterarse -por otro compañero porque le pilló viajando- lo primero que pensó fue: "Jolín, pedazo de regalo de Reyes". ¿El motivo? Lo explica Yasmina Alcazar: "Hasta tenemos un grupo de whatsapp los tres, Espe, Juan Carlos y yo, porque tenemos mucha relación". Es decir, que la historia tocaba escribirla, además, entre amigos.
"No fue muy diferente a otras veces. Es verdad que aquí lo diferente era que estábamos acompañadas en el vestuario", decía entre risas Alcaraz. Y es que, como explicaba Mendoza, "siempre estamos solas en nuestro vestuario y el hecho de compartirlo era la novedad. Pero la rutina al final no cambia, aunque sí que notamos que al salir a pista teníamos ese foco de atención de la prensa, de alguna fotografía… Pero cuando se pone el balón en el aire es el mismo trabajo de cada semana". Por eso, Mendoza, aunque reconoce que tenía "ese toque especial", no dudó, como suele hacer, en poner en sus redes sociales como si fuera "una jornada más".
"Esto es como una pirámide, cuando la base se va llenando, poco a poco se va llegando a la parte más alta"
"Lo primero es darle normalidad. La normalidad de que sea un chico o una chica, ha hecho todo lo que ha podido, trabajado lo que se le ha pedido igual que los demás compañeros para poder estar en la Liga", explica Alcaraz. Mientras que Mendoza añade la importancia de seguir creciendo de forma progresiva. "Creo que esto es como una pirámide. Cuando la base se va llenando, poco a poco se va llegando a la parte más alta. Todo es progresivo y poco a poco seguro que habrá más mujeres en todas las categorías, igual que en ACB, en unos dos o tres años habrá más mujeres", indica Mendoza que, eso sí, comparte con Alcaraz que, a nivel europeo, sí que hay un 'pero': "Sólo falta que haya oportunidades".
"Es verdad que parece que falta un pasito más por dar. Nosotras estamos en esa lucha, intentando demostrar que somos un árbitro más. Cumplimos las normas para pitar la competición masculina, pasamos pruebas físicas, las mismas que pasan los hombres, los mismos test… Y sólo falta que haya oportunidades", explica la colegiada. Y a ello, Alcaraz añade lo importante que es haber dado este paso en España.
"Todavía no se cree al 100% en nosotras. Cuesta que entremos en competiciones europeas masculinas"
"Dentro de Europa es un adelanto muy grande porque en muchos otros países todavía no pasa, pero encima, pues en España es más importante si cabe porque nuestra liga, si no la mejor, es de las mejores consideradas de Europa", indica Alcaraz. Eso sí, matiza de que todavía se necesita más apuesta por ellas: "Todavía no se cree al 100% en nosotras, y ya no tanto en nuestro país, porque se está trabajando desde hace tiempo con las mujeres árbitros, sino también a nivel europeo que todavía cuesta que entremos en competiciones europeas masculinas porque tenemos competiciones femeninas, pero todavía las masculinas pues está costando".
"Para mí el fallo es que todavía la gente que decide no es consciente de que nosotras a lo mejor estamos trabajando tan bien como nuestros compañeros para poder merecer esas plaza. Entonces, bueno, a lo mejor hay que concienciar un poquito más desde arriba a las personas o cambiar las personas que hay para que se consiga igual que están haciendo en la ACB con nosotras", comenta Alcaraz.
Mientras tanto, ellas siguen su carrera y su camino. Un sendero que iniciaron hace ya bastantes años, lo que les ha permitido ir viendo la evolución que ha tenido la mujer en el mundo del arbitraje y convertirse en ejemplos para las que vengan por detrás. Tanto de lo bueno, como de lo malo, claro. Porque siempre hay alguna piedra por el camino. "Al final somos árbitros y si pusiéramos un micro a todo lo que nos dicen en la grada mucha gente se llevaría las manos a la cabeza, pero no por el hecho de ser mujer, sino por el hecho de ser árbitro. Tengo que decirte que la verdad que en ACB no he tenido a ese nivel de machismo por decirlo así, ninguna mala experiencia con entrenadores y jugadores", comenta Mendoza, que sí cuenta cómo una vez, cuando arbitraba en LEB, recibió comentarios machistas… de una mujer.
"Recuerdo perfectamente cómo al descanso de un partido que estaba siendo duro, igualado al ir al vestuario, una mujer de una mediana edad, como 50 años, me mandó a fregar, ¿no? Y yo me sentí ofendida, no por el hecho. O sea hubiera preferido que me hubiera insultado con cualquier insulto, me hubiera dolido menos que por el hecho de que esa mujer de 50 años me estuviera mandando a la cocina a fregar", relata.
Pero, pese a ello, como ambas explican, también se quedan "con lo bueno" e invitan a quienes vienen por detrás a "que si realmente lo quieren, crean en ello y trabajen duro, porque evidentemente las cosas no vienen solas. Y que se apoyen en compañeros, hombres y mujeres, en su familia y su entorno, para disipar las dudas que puedan surgir", mantiene Alcaraz. Mientras que Mendoza las invita a "que si les gusta, se dediquen al 100%. Que nunca dejen de estudiar, por supuesto, porque nunca sabes qué puede pasar, pero que nadie les diga que no pueden. Al igual que yo en su día vi a Susana Gómez arbitrando en LEB Oro y dije: ostras, si ella está ahí, yo también puedo, que tengan ese coraje, esas ganas de intentarlo y que luchen por sus sueños".