BALONCESTO

La pesadilla de Pierre Oriola

El jugador español ha rescindido su contrato con el Bàsket Girona, tras haber jugado solo siete partidos.

Oriola dice adiós a su paso en el Bàsket Girona. /Damián Torres
Oriola dice adiós a su paso en el Bàsket Girona. Damián Torres
Álvaro Valdemoro García

Álvaro Valdemoro García

En el deporte nunca se sabe cómo te vas a levantar al día siguiente. Unos días tocas la gloria con un título bajo el brazo y hay otros días que lo que quieres es dejarlo todo y dedicarte a otra cosa. Este es el caso de Pierre Oriola, un auténtico líder y capitán tanto dentro como fuera de la cancha de baloncesto. Un profesional que está viviendo una auténtica pesadilla.

Seguramente, la tarde-noche del domingo fuese uno de los peores días de su carrera, cuando tuvo que rescindir el contrato con su actual equipo, el Bàsquet Girona. Conociendo las características del catalán, una de las cosas que más le duela es que apenas ha podido aportar al equipo, ya que ha jugado menos de 10 partidos con una media de 2,7 puntos y 4,9 de valoración.

Este pacto entre el jugador y el club viene lastrado por el calvario de las lesiones que continúa sufriendo en la espalda. Estos problemas le han impedido jugar siete encuentros en lo que va de campaña. Sin embargo, este tipo de contratiempos ya le vienen acompañando desde hace varias temporadas, sobre todo, la última con el F.C. Barcelona, donde sólo disputó 16 encuentros. La cifra más baja desde que juega en la mejor división del baloncesto español.

El pívot llegó al equipo gerundense como una de las figuras más importantes. Un movimiento bueno para ambas partes después de varios meses de negociación. El internacional español quería dejar atrás su peor año en el conjunto culé donde apenas tuvo continuidad en su último curso con Jasikevicius, cosechando unos registros muy pobres.

De protagonista a secundario

El jugador llegó a la Ciudad Condal hace cinco temporadas como un fichaje prometedor para fortalecer la pintura y dar seguridad en el juego interior. Vino con gran cartel, siendo campeón de la Liga Endesa y subcampeón de la Copa del Rey y de la Eurocup con el Valencia Basket.

Su estancia en Barcelona no fue mala, pese al último año. En sus cinco temporadas vistiendo la elástica azulgrana, conquistó una Liga Endesa (2021) y cuatro Copas del Rey (2018, 2019, 2021 y 2022). Aunque es cierto que su papel como protagonista en el equipo se puede apagando, pasando a ser testimonial.

Desde que el catalán diese positivo por COVID al final del 2021, el ala-pívot no levanta cabeza y no consigue encauzar una buena racha de partidos disputados. Más tarde, aparecieron los problemas en el sacro que le han estado persiguiendo hasta la fecha de hoy.

A los problemas físicos también hay que añadirle la poca confianza que le dio el entrenador lituano en la entidad culé. Su último partido como blaugrana fue el pasado 29 de mayo. Fue en Gran Canaria, en el segundo enfrentamiento de los cuartos de final de la Liga Endesa. El pívot catalán jugó 11 minutos y anotó 4 puntos. Desde entonces ya no jugaría más con el Barça.

Una baja importante la del de Tárrega y que iba a notar el técnico lituano a la larga, ya que para jugar partidos decisivos (tanto en la Final Four de la Euroliga como en los Play-off de la ACB) hace falta más cosas aparte de calidad y ni así tuvo la oportunidad de aportar su garra en la pista y contagiar al público con sus acciones.

Tras poner fin a su etapa en el Barça, Oriola reconoció que había perdido la ilusión por pisar en una cancha de baloncesto, tras estar un año y medio parado por culpa de las lesiones. De hecho, en su puesta a punto para esta vigente campaña, tuvo que trabajar en solitario para recuperarse de su lesión.