OPINIÓN

Los cupos marcan la hoja de ruta del mercado de la Liga Endesa

Willy Hernangómez contra Edy Tavares, esta temporada. /ACB PHOTO/E. COBOS
Willy Hernangómez contra Edy Tavares, esta temporada. ACB PHOTO/E. COBOS

Los jugadores formados localmente -o cupos- marcan el inicio del mercado en la Liga Endesa. Porque sí, la importancia del jugador nacional es capital no sólo reglamentariamente, sino a la hora de la aportación en los respectivos equipos. Como muestra, el botón de los dos descendidos Zunder Palencia y Monbus Obradoiro.

En los palentinos, que sufrieron el serio revés de la lesión de Iván Cruz, sus cupos -Chumi Ortega, Manu Rodríguez, Agustín Ubal y Chema González- sólo disputaron el 16,3 % de los minutos de la plantilla. Mientras tanto, en los santiagueses, los Pol Figueras, Rubén Guerrero, Álvaro Muñoz (también lesionado en el tramo final), Álex Suárez y los minutos testimoniales de Sergi Huguet y Pablo Harguindey constituyeron un 14,52 %. Y claro, si ya vas justo de efectivos de por sí, por presupuesto, hace que la rotación se reduzca aún más, se resienta, y lo acabes pagando.

Y es que asegurarse estas piezas es clave, y cuanto antes mejor. Es un mercado donde no hay recambios y, por tanto, no hay margen de error. Por eso el Baskonia renovó a Sedekerskis hasta 2029 con un muy buen contrato, un cupo cocinado a fuego a lento pero ahora básico en el esquema del equipo como multiusos, que debutaba en la 2014-15, pero no se asentó hasta la 2020-21, habiendo pasado por las competiciones FEB, una corta estancia en Burgos y dos clubes de su Lituania natal. 

O en el Valencia Basket hicieron lo propio con Jaime Pradilla hasta 2027, cuando parecía comenzaba a recibir cantos de sirena. Ambos movimientos, oficializados… ¡a principios de marzo! Cuando sonaba para cambiar de aires, el Casademont Zaragoza redobló sus esfuerzos para mantener al capitán Santi Yusta hasta 2027. Y no había ni acabado la fase regular de la Liga Endesa.

Poco a poco hemos ido/estamos despidiendo a nuestros Golden Boys y eso se refleja en las confecciones de las plantillas. Si un bloque nacional ha sido clave en los últimos años de nuestros equipos ha sido el Real Madrid. Primero dijimos adiós a Felipe Reyes. Ahora haremos lo propio con Rudy y hay que ver qué sucede con Sergio Rodríguez en su segunda etapa en la Casa Blanca.

Aún quedará Llull en la retaguardia, pero el Real Madrid tiene que reconstruirse. Ahí es clave la renovación de Tavares no sólo como uno de los jugadores más determinantes de Europa en el puesto de cinco, sino también por su condición de cupo. Pero si se concreta la salida de Hezonja, los de Chus Mateo perderán otro JFL por lo que en un mercado tan difícil tocará que Hugo González o Ismaila Diagne estén totalmente en dinámica del primer equipo para sumarse a los Abalde y Eli John Ndiaye a la espera de lo que suceda con Alocén (si sale cedido o no) y alguna sorpresa de última hora que pueda llegar. Ahora toca emprender un camino en el que llevaron la delantera en la última década y que el Barça inició el pasado verano con los Brizuela, Parra y Willy Hernangómez.

Asimismo, los equipos tienen que ejercitar la inventiva, una a la que nos tenía especialmente acostumbrado el Baskonia con jugadores como Lampe o Shengelia para intentar encontrar cupos que sean útiles, capaces de estar minutos en la pista y que no sólo sean un número.

El ejemplo es el del UCAM Murcia, trayendo de vuelta a los hermanos letones Kurucs y que pelea por estar en semifinales de Liga Endesa. O el de dar oportunidades para ver el crecimiento del sueco Melwin Pantzar en el Surne Bilbao, y al que la LEB Oro se le había quedado ya pequeña; un Dani García que ha derribado la puerta a base de trabajo en el Baxi Manresa o el montenegrino Jovan Kljajic al que hemos visto destaparse en el tramo final de la temporada en las filas del Dreamland Gran Canaria.

Porque la paradoja ha hecho que, en esta situación de escasez, veamos como Dimitrijevic ha acabado como MVP de la VTB League en el Unics Kazán para comprometerse por tres años con el Milán o que Rolands Smits firme por la misma duración con el Anadolu Efes, ambos pujantes equipos de Euroliga.

Y a todo esto hay que dar dos vueltas de tuerca más. La primera, las de los equipos que juegan las competiciones europeas de la FIBA que necesitan uno más, cinco, para competir. En esa tesitura están los dos finalistas Unicaja y Lenovo Tenerife. Lo que funciona mejor no tocarlo, dice el dicho. Y en eso parece que están los primeros, flamantes campeones de la Basketball Champions League y líderes de la fase regular de la ACB. Con su capitán Alberto Díaz, con Djedovic de vuelta tras su periplo alemán y Tyson Pérez fichado, tienen que ver qué hacer con la continuidad de Barreiro y Yankuba Sima. ¿Uno o los dos? Por eso podrían ser sólo cuatro… Faltaría uno más.

Ahí encaja el deseo revelado por Óscar Herreros de traer de vuelta a un Balcerowski, que ha tenido un curso complicado en el Panathinaikos y que tiene un año más de contrato en Atenas, y por el que también suspiraba su club de procedencia, el Dreamland Gran Canaria (que en el pasado mercado estival perdió a sus dos cincos cupos), y al que quiso fichar el Lenovo Tenerife en el transcurso de este 2023-24 cuando parecía que iba a dejar los greens. Pocos cupos y muchos pretendientes.

Con Jaime Fernández en el dique seco, el Lenovo Tenerife tiene la pole por un Lluís Costa al que el Covirán Granada quiere retener, pero por el que también han entrado Casademont Zaragoza o hasta el Surne Bilbao Basket, tal y como adelantó Ideal. Y es que, estadísticamente hablando, el base ha sido el segundo nacional más valorado por detrás de Willy Hernangómez.

Pero hay más. Porque también quieren a un Sergi Martínez, aún con contrato con el Barça y que ha sido sexto máximo reboteador de la competición y quinto en minutos en las filas del Bàsquet Girona,

Y la segunda, el derecho de tanteo. Porque una vez que acaben los playoffs, y a la vista del panorama, los equipos tendrán que decidir a quién incluyen o no en la lista de jugadores sujetos a derecho de tanteo. Y ahí puede que veamos a algún que otro cupo. Porque el mercado, no ha hecho nada más que empezar.