BALONCESTO

Hezonja, un Clásico en Euroliga desde el otro lado

El croata visita el Palau, la que fue su casa, defendiendo el escudo de un Real Madrid en el que ya ha despejado todas las dudas.

Mario Hezonja, en un partido de Liga Endesa con el Real Madrid. /OSCAR J. BARROSO / GETTY IMAGES
Mario Hezonja, en un partido de Liga Endesa con el Real Madrid. OSCAR J. BARROSO / GETTY IMAGES
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Han pasado siete años, ocho meses y siete días de aquel partido en el que 'Super Mario' apareció por última vez en un Clásico. La fecha de la cita fue el 5 de febrero de 2015; el escenario, el Wizink de Madrid, entonces denominado Barclaycard Center; y la función era en Euroliga. Casi nada para darse a conocer (aún más) ante toda Europa. Le faltaban tan solo días para cumplir los 20, pero cuando Mario Hezonja saltó a la pista demostró que la edad solo es un número. Y que si había que tirar de casta para plantar cara, vestido de azulgrana, ante un todopoderoso Real Madrid, lo iba a hacer sin que le temblase la muñeca.

Con el 8 a la espalda, firmó un encuentro casi impecable con 22 puntos, un rebote y una asistencia que le valieron para recibir la segunda mejor valoración de su equipo. Aquel día fue, junto a Tomic, el hombre de Xavi Pascual, entonces entrenador de un Barça de nombres que aún siguen resonando (allí estuvieron Satoransky o un joven Álex Abrines, entre otros) y que no pudo con Rudy, Chacho, Llull y compañía. Cosas de la vida, la suerte o el azar, esos nombres hoy se repiten en el roster, algunos aún con los mismos dorsales, pero todos bajo el mismo escudo… Salvo Hezonja.

Un talento en el radar de la NBA

Al término de aquella temporada, Hezonja fue elegido en la quinta posición del Draft de la NBA por los Orlando Magic. El de Dubrovnik comenzaba su aventura entre la élite del baloncesto mundial, una travesía en la que dejó algunas cosas, pero no tantas como se esperaba, que lo llevó hasta Nueva York, con los Knicks, y a Portland. Desde allí vio cómo se gestaba, en el año 2019, aquel sonoro fichaje de Mirotic -quien había brillado años antes en el conjunto blanco- por el que había sido el equipo que a él tanto le dio: el Barça.

Mario Hezonja machaca con los Magic.  GETTY IMAGES
Mario Hezonja machaca con los Magic. GETTY IMAGES

Desde la lejanía, concretamente Memphis, tras ser traspasado en noviembre de ese año a los Grizzlies, Hezonja vio aquel primer año de un señalado Mirotic por la hinchada merengue, sin saber entonces que su camino sería el mismo, pero a la inversa, previo paso, de nuevo, por Europa. Fichó por el Panathinaikos en febrero de 2021, tras lo que llegó un verano en el que el Barça tenía sus derechos a final de temporada, pero no quiso incorporarlo a su plantilla, y finalmente acabó firmando por el UNICS Kazan.

Un año después de su regreso al viejo continente y tras cumplirse tres de aquel golpe azulgrana, los blancos han devuelto la jugada y Hezonja es el protagonista vestido de blanco. Y sí, aunque lo cierto es que ya se ha dado un Clásico desde su regreso a España, el de la Supercopa, el croata no sacó a relucir su arsenal. 'Super Mario' no estuvo en Sevilla en esa final que dio al Madrid su primer título de la temporada.

Tanto fue así, que su actuación pasó totalmente desapercibida y sembró grandes dudas en torno a su fichaje... Aunque solo durante cuatro días, pues en su estreno en Liga Endesa, el jueves posterior, ante el Girona, brilló con luz propia e hizo brillar a sus compañeros con 23 puntos, 7 rebotes y 26 de valoración. Y unos días más tarde, terminó de consagrarse otra vez como 'Super Mario' en Europa, ante su exequipo, el Panathinaikos. Aquel partido elevó con tesón y acierto de cara a aro (firmó ocho puntos consecutivos) la reacción de todo el Real Madrid para el resto del encuentro.

Esta noche toca la segunda cita en Europa, el Clásico desde el otro lado, luciendo el 11 a la espalda, como visitante en el Palau y sin su "homólogo" en el equipo contrario (Mirotic es baja por lesión). Llega la gran prueba ante su exequipo en la que aquellos Chacho, Rudy y Llull, que también estuvieron en 2015, ahora son sus compañeros, mientras que Satoransky y Abrines también volverán a formar parte del elenco, esta vez como rivales.