EUROPEO U16

Descubriendo el camino al éxito de Finlandia

Por primera vez en su historia, Finlandia se colgó el oro en un Europeo. Nos adentramos en el baloncesto femenino del país nórdico junto al entrenador Janne Hänninen.

Las jugadoras finlandesas celebran el oro en el Europeo U16. /FIBA
Las jugadoras finlandesas celebran el oro en el Europeo U16. FIBA
Luis Vallejo

Luis Vallejo

El Europeo U16 femenino clausuró un verano más de competiciones de formación. La cita disputada en Miskolc coronó por primera vez en la historia a Finlandia, convirtiéndose en el primer país nórdico en colgarse un oro en un campeonato FIBA. Después de más de 100 ediciones de Europeos y Mundiales en el ámbito femenino, llegó la vencida. La gran recompensa a un proceso de trabajo puesto en marcha años atrás.

"Como siempre, teníamos tres tipos de objetivos antes de comenzar el campeonato, fijados por las jugadoras. Nosotros, el staff, les ayudamos a conseguirlos", cuenta Janne Hänninen, entrenador del combinado finlandés. "Nuestro mínimo era hacer TOP-10, el objetivo principal pasaba por colarnos en el TOP-5 y nuestro sueño era colgarnos el oro", explica desde su casa en Helsinki. Y lo cierto es que el sueño terminó por cumplirse en un ejemplo de cooperación y humildad a nivel colectivo iniciado por el staff.

Si uno se fija en la documentación oficial de FIBA, podrá observar que el técnico principal del equipo era el experimentado Jussi Raikka. No obstante, durante el torneo, fue Janne Hänninen el encargado de dirigirlo. Esto se debe a que Raikka estuvo a los mandos de la U17 en el Mundial de México, donde Finlandia alcanzó la 8ª plaza, y se perdió la preparación del Europeo durante los meses de junio y julio. Una situación por la que decidió ceder el testigo a su asistente y resto del staff: "Ha sido una demostración de las habilidades del equipo técnico formado por Janne Hänninen, Camilla Grönberg, Tuomas Rahkonen y Sina Peisalo. Mi tarea más importante, con diferencia, fue asegurarme de que Anna Gardziella (una de las referentes del equipo) estuviera lista para ayudar después del Mundial. Y después mostrar mi apoyo y confianza a las jugadoras y entrenadores", reconoció Raikka, con labores de asistente en Hungría, al medio local Basket.Fi.

Janne Hänninen da instrucciones a sus jugadoras en un tiempo muerto.  FIBA
Janne Hänninen da instrucciones a sus jugadoras en un tiempo muerto. FIBA

Esa cooperación entre técnicos es la que Hänninen destaca como una de las claves no solo del torneo, sino del progreso que está viviendo Finlandia en general. "Todo comenzó hace unos 15 años, cuando se puso en marcha un modelo para formar entrenadores. Ahora está dando sus frutos", afirma. Los encuentros entre técnicos para tratar diferentes temáticas relacionadas con su trabajo son frecuentes, incluso con algunos de los referentes como Tuomas Lisalo, campeón de la BCL en 2023, de la EuroCup en 2024 y actual asistente en los Memphis Grizzlies. "Compartimos muchísima información entre nosotros, esa es nuestra fortaleza. Lassi Tuovi (entrenador de los Yokohama B-Corsairs y actual seleccionador masculino, con pasado en los Utah Jazz y Virtus Bologna) está siempre implicado en estos eventos", asegura Hänninen.

No obstante, a pesar de este cambio en el banquillo, todo estaba bien preparado desde hacía bastante tiempo para el Europeo U16. Con el objetivo de no hacer de la preparación una contrarreloj, Finlandia inició el proceso en 2023. "Fuimos capaces de hacer cuatro training camps, de cuatro días cada uno, y también nos juntamos después de Año Nuevo en la Baltic Sea Basketball Cup. Tuvimos unos 24 días en total durante la temporada", explica el técnico. El proceso contó con una doble vertiente: preparar el Europeo U16 y, a su vez, realizar un seguimiento de todo el talento con el que cuentan. Por esa razón, no eran siempre las mismas jugadoras las que acudían a las concentraciones, aunque sí se intentaba que fuera el mismo staff.

Desde la Federación de Baloncesto de Finlandia se ha instaurado un modelo a seguir por todas las selecciones de formación. "Si quitaras los logos de las camisetas, podrías reconocer a cualquier equipo finlandés. La idea es siempre la misma", apunta Hänninen. También los objetivos. No solo competir, sino priorizar siempre el progreso de las jugadoras con mayor potencial: "Necesitamos buscar las piezas que mejor encajen en nuestra Selección Absoluta. Las que tengan una mayor proyección en el primer equipo".

Hänninen forma parte de las selecciones de formación desde el Europeo U16 de 2019 disputado en Macedonia del Norte. El primero de Finlandia en División A tras siete ediciones consecutivas en la categoría de plata. Sin entrar a valorar lo sucedido en los años previos, el técnico tiene claro qué ha ido mejorando en este último lustro: "La clave son las rutinas diarias con los clubes. Como decía antes, el nivel de los técnicos ha mejorado y cada vez entrenan mejor. Por eso cada vez recogemos mejores jugadoras en nuestras selecciones. También hacen cada vez más entrenamientos con pesas. Los mantenemos durante los torneos, en eso nos diferenciamos de algunos otros países. Y después, la estructura en las selecciones de formación finlandesas va mejorando. Nos fijamos mucho más en los detalles", se explaya, recalcando que todo esto se encuentra enmarcado en un proceso largo, iniciado por figuras como Henrik Dettmann, Anton Mirolybov y Jyri Lohikoski.

Durante la temporada, Hänninen entrena en la Helsinki Basketball Academy, otro de los pilares con los que cuentan a nivel formativo en Finlandia. En un modelo cooperativo entre diferentes entidades e instituciones, la Federación Finlandesa de Baloncesto facilita así los estudios a los deportistas a la vez que trata de formar jugadores y jugadoras para las selecciones nacionales. Desde su fundación en 2012, por el programa han pasado jugadores de la talla de Lauri Markkanen, Elias Valtonen, Mikael Jantunen, Awak Kuier (Reyer Venezia/Dallas Wings) o Elina Aarnisalo (UCLA).

El primer equipo femenino compite en la máxima categoría nacional (la entrenadora española Sandra Prieto se proclamó campeona en 2024 con el Torpan Pojat Helsinki) y, aunque terminó la liga en última posición, sus objetivos poco tienen que ver con la tabla de la competición. La mirada es más global, más a largo plazo, al igual que en otras academias del país como en Turku o Jyvaskyla, diferenciadas todas entre sí tanto a nivel geográfico como en diversos detalles de su funcionamiento. Una red formada por la federación que complementa a los clubes del país nórdico, entre los que hay cooperación y comunicación. Un ejemplo de ello es Niko Nyholm, entrenador del Tapiolan Honka y, a su vez, parte del sistema formativo de la federación. "No hay agendas individuales, es todo colectivo", resume Hänninen.

En el horizonte, el EuroBasket 2027 comienza a asomar la cabeza, donde Finlandia será una de las organizadoras junto a Lituania y hasta dos países más, a falta de confirmación por parte de FIBA. Una cita marcada en rojo en el calendario, aunque con multitud de pasos intermedios por el camino. Como la clasificación al EuroBasket 2025, en la que el país nórdico acumula una victoria en dos partidos y se jugará su billete ante Hungría, Eslovenia y Bulgaria en las próximas ventanas FIBA. Todo un reto ya que el país nórdico no ha estado presente en ninguna cita continental desde 1987. "Será algo grande para nosotros si lo conseguimos", asiente. Grandes objetivos para un país que busca seguir mirando hacia arriba, pero sin saltarse ningún proceso intermedio.