ATLETISMO

Las lágrimas de emoción de Orlando Ortega que ponen fin a su calvario: "Me he alejado de mi hija de seis meses para poder luchar"

El vallista español se clasifica para las semifinales del Europeo de Roma después de cinco años sin competir en un gran evento.

Orlando Ortega tras su vuelta a la competición./RFEA
Orlando Ortega tras su vuelta a la competición. RFEA
José M. Amorós

José M. Amorós

Orlando Ortega tiene una medalla olímpica en su palmarés, pero quizás aquella gran noche en Río 2016 no se emocionó tanto como esta calorusa mañana del mes de junio en Roma. El hispanocubano volvía a competir en un gran Campeonato después de cinco años marcados por un calvario de lesiones que le robó la gloria y lo llevó a los infiernos del atletismo.

Las lágrimas de emoción de Orlando Ortega tras pasar a semifinales del Europeo.JM AMOROS/RELEVO

Su vuelta no fue la soñada, terminó séptimo (13.79") en unas series que ni siquiera tenían a los doce mejores del ranking 'Road to Rome' y llegó a dar las declaraciones de su eliminación. Fue en ese momento cuando Paloma, la jefa de prensa de la federación, apareció en la zona mixta del Stadio Olimpico móvil en mano y una gran noticia: Ortega había logrado el pase a semifinales. Con uno de los últimos tiempos, sí, pero que ese pase de ronda significaba mucho más.

"Esta es la muestra de lo duro que está siendo", comenzaba con lágrimas en los ojos tras conocer la noticia: "No ha sido fácil llegar aquí. Solo mi mujer, mi familia y mi psicóloga saben todo lo que he luchado para llegar aquí. Me he tenido que alejarme de mi hija de seis meses para poder luchar por estar aquí".

El último gran campeonato de Orlando fue en Doha 2019 y, desde entonces, ha pasado por una sucesión de lesiones. Llegó, incluso, a viajar a los Juegos de Tokio, donde se lesionó en las horas previas a la competición. Luego llegarían varias roturas musculares que le fueron lastrando y retrasando su vuelta: una rotura del recto anterior en la primavera de 2022 que estuvo a punto de llevarle al quirófano, un rotura del músculo semitendinoso en 2023 que sí se operó y, hasta en los inicios de este 2024, una contractura en el aductor izquierdo. "Sabéis que nunca me he dado por vencido", zanjaba, emocionado, alguien que ha estado en lo más alto de su deporte y ahora da pequeños pasos para volver a sentirse competitivo.