Hugo González rompe su silencio y relata su odisea en los JJOO: "Lo normal es que todo hubiera salido bastante mal"

Hugo González de Oliveira es, campeón del mundo y la gran estrella de la natación española y lo volvió a demostrar siendo el único capaz de disputar una final olímpica en París, además por partida doble. Pero, quizás, llegar como opción de medalla tras su oro mundial el pasado febrero en Doha le ha hecho no contar con reconocimiento e incluso, recibir críticas. Lo que nadie conoce es lo que el nadador balear, que acaba de firmar por el CN Terrasa en busca de "volver a disfrutar", pasó en los momentos más importantes de su preparación olímpica y decide desvelarlo en Relevo.

Te diría que un 9. En las dos pruebas principales pasamos de ronda y sacrificamos el 200 estilos para rendir mejor en una. En el 100 de espalda, estuve a una o dos centésimas de hacer mi mejor marca. Creo que la carrera es idéntica a donde conseguí mi mejor marca y que cambia el toque en la pared. Y en el 200 espalda, no es que sea idéntica, es que es mejor que la mejor que he hecho nunca. Pero los últimos 25 metros no tuve el empuje que creo que suelo tener al final, de ahí que no saliera mi mejor mejor marca personal y saliera un 1:55.

Mi marca personal en el 200 espalda.

Es difícil tener esa opinión en cuenta, la verdad. Porque la natación son marcas, no rankings. Partir de favorito por el resultado en el Mundial de Doha donde la marca que hice es la misma que hice aquí... a mí me cuesta ver ese favoritismo. Por ejemplo, favoritismo sobre un húngaro [Hubert Kos] que ganó el año pasado con mejor marca que la que yo hice en Mallorca o sobre Murphy, que también tenía mejor marca en esta misma temporada y en todas las temporadas pasadas. El bronce era una buena aspiración que, si los otros dos lo hacían mal, me podría permitir quedar segundo o ganar. Al final, mi carrera no salió perfecta y fue 1:55. Creo que para suspender hubiera sido no entrar en final, quedar octavo o cosas así.

Yo no creo que me haya venido mal a mí, yo creo que a mí me ha ayudado. Incluso, a seguir teniendo motivación. Para decir: vale, un chaval que no me ha sacado tanto como cuatro segundos en yardas, si me sacase lo mismo en piscina larga también estaría en el podio. No es la realidad, me saca bastante más en larga. Creo que Leon Marchand nunca ha competido en yardas al 100%. Tenerlo a él me ha servido de motivación de intentar dar mejor nivel.

Creo que a lo mejor no terminé de gestionar muy bien la presión en los Juegos. Si hubiese seguido con la misma línea de disfrutar, de no tener miedo a hacer mi carrera, no tener miedo a que un entreno salga bien o que salga mal, me hubiera salido mejor. Después de hacer las cosas muy bien en Mallorca, en los entrenamientos el nado empiezan a ser mucho más tenso, mucho más rígido. Creo que incluso al dormir, al comer, el día a día fuera de la piscina empieza a ser un poco más tenso y eso no permite ser o mantener el mismo estilo. El Mundial de Doha salió muy bien porque precisamente lo estaba disfrutando. No tenía miedo a si quedaba primero o quedaba octavo. Daba igual porque era preparatorio, el objetivo era competir y dar el mejor nivel.

A lo mejor en París, en mi cabeza, sí que pasaba algo si no salía bien. Si no conseguía la medalla, sí que pasaba algo. Yo creo que eso fue sobre todo el cambio, el tipo de presión que a lo mejor me hizo un poco más de daño. Cuando empiezas a pensar demasiado en las cosas que tienen que salir perfectas y no salen perfectas...

Yo salí de Mallorca con la noticia de que 'Taja', mi entrenador del Canoe, no iba a formar parte del equipo olímpico. Esto no fue fácil de entender, sobre todo porque la semana antes del Mundial de Doha estuve con 'Taja'. El plan entonces fue entrenar en Estados Unidos, venir una o dos semanas a España, entrenar con mi entrenador, ir a Doha y salió bien. Para París, entrené en Estados Unidos, vine una o dos semanas, competí en Mallorca... y el plan era entrenar con Taja e ir a los Juegos. Y nada más salir de Mallorca, me dicen que 'Taja' no puede formar parte de la concentración porque no es mi entrenador principal [para la RFEN, el entrenador principal es Dave Durden].

Pudo venir al final, después de una semana de llamadas a tres personas distintas de la federación y hasta al COE [Comité Olímpico Español] para ver si podían ayudar a cambiar lo que estaban pensando. Al final, hubo muchas conversaciones y lo llevaron a Mallorca, pero eso ralentizó mucho la preparación física. Todo el mundo desconoce que, desde el 1:54 de Mallorca hasta los Juegos, hay tres semanas en la que la planificación es horrible.

Sí. Si los Juegos hubieran sido en junio, viniendo del entrenamiento con mi propio grupo de entrenamiento, creo que hubiera rendido a mi máximo nivel. Y sin toda esta presión que se junta con volver de Mallorca, escuchar que mi entrenador no está considerado para formar parte del equipo olímpico, que yo esté pensando durante una semana entera que voy a estar solo en los Juegos... Es como si a Leon Marchand le dicen un mes antes que no entrene con Bob Bowman. Creo que el 1:55 [en 200 espalda] y el 52.73" [en 100 espalda] es lo mejor que pude hacer adaptando mis entrenamientos a una situación en la que no me siento cómodo. Teniendo en cuenta todo esto que estoy diciendo ahora en alto, el resultado es bastante bueno porque lo normal es que hubiera salido bastante mal.

Sí, dormí fuera de la Villa en un hotel cerca de la piscina. Las condiciones de la Villa dejaban mucho que desear. Estamos en pleno julio, es París y no es España, pero la falta de aire acondicionado, compartiendo apartamento nueve personas con uno durmiendo en el salón, dos baños... no es lo ideal. Luego, el restaurante donde comíamos estaba a 10 minutos andando de nuestro edificio. Los buses estaban a 40 minutos de la piscina y los primeros 5 días los conductores se perdieron. Sin ir más lejos, Mario Mollá cogió un bus que tardó una hora y cuarto en llegar. Por suerte, la federación española sí que me ayudó en esto.

Estuve cinco días. Creo que la famosa foto de Tomas Ceccon durmiendo en el suelo, en el césped de un parque, es posterior a su carrera pero es porque mentalmente ya estaba harto, no podía más. Y una vez terminado sus carreras, ¿para qué seguir durmiendo en la Villa? Yo, una vez me enteré que el equipo americano y el francés dormían en un hotel cerca de la piscina, también lo hice. Creo que muchas veces un campeonato de España se ha organizado mejor que los Juegos.

Bastante tranquilo. Esa sería la palabra si tuviera que definirme ahora mismo. Cambio de ambiente, sin ningún tipo de presión, no hay nada que deba a nadie o que tenga que hacer. Más bien quiero volver a disfrutar de competir, si acabo yendo al campeonato internacional más cercano que es el Mundial de piscina corta. Por cierto, creo recordar que nunca he preparado una piscina corta al 100%. Me ayuda cambiar compañeros de equipo, cambiar el entrenador, de ambiente, de ilusión, de ver qué pasa... Opto por disfrutar del camino, más que seguir con las mismas expectativas de siempre.

Voy a entrenar en Terrassa, con el equipo equipo absoluto del club a las órdenes de Raúl Navalón. Son chavales bastante jóvenes, creo que no hay gente mayor que yo. Por ahora, quiero volver a entrenar y volver a disfrutar del deporte. La temporada pasada fue muy bien hasta el final. Creo que salió incluso mejor de lo que pensaba porque estaba precisamente disfrutando. Hubo un Campeonato del Mundo en febrero [ganando un oro en 200 espalda y una plata en 100 espalda], volví a Mallorca después de tanto tiempo en Estados Unidos también me alegra, siempre es bueno competir en casa y yo creo que las mejores carreras que he tenido han sido disfrutando y creo que es algo que me toca buscar otra vez

Sí, llevo cinco años en California, en el Canoe desde el 2016 y lo que busco es la chispa de disfrutar de la Copa de España, chispa de disfrutar de conocer gente nueva y chispa de un cambio de ambiente. Siempre voy a tener un lugar especial para mi entrenador Taja, para el Canoe y mis compañeros de antiguo club. No hablo de disfrutar porque vaya a rendir peor, lo llamo 'disfrutar' porque creo que es la clave de rendir mejor. Hablar un poco menos de qué resultados quiero tener

No he llegado a perder la chispa, por eso creo que he hecho el cambio en el momento justo. Pero creo que esa es la palabra.

Creo que mi situación post-Juegos de Tokio fue muy distinta a la de ahora. Creo que en Tokio, a nivel personal me quedaba bastante camino por recorrer, seguía teniendo competiciones con mi equipo de California en Estados Unidos y me seguían quedando cosas por luchar a nivel internacional. Mi principal motivación era volver a Estados Unidos y competir por allí. Porque, a nivel nacional, faltaban muchos, muchos apoyos. Creo que este año muchos sponsors han sumado a mi camino, que hemos alcanzado cosas mejores de las que esperábamos y ahora, la situación es muy distinta. Hay mucha más gente que antes. Todo esto también se suma que cada vez parece que en natación la edad de máximo rendimiento parece que se retrasa un poco, creo que no sé si hace 20 años, gente de 29 años creo que estuviese en los podios y ahora cada vez vemos a más gente de entre 25 y 30 pelear por por medallas. Teniendo en cuenta que esta temporada última ha sido la mejor, no veo el por qué no vamos a estar un buen nivel esta temporada.

Por muchos motivos, sobre todo porque me suelo guiar a nivel personal. Habiendo preparado allí ya dos Juegos Olímpicos, Campeonatos del Mundo, Campeonatos de Europa creo que he vivido todo lo que podía haber vivido en mi equipo de California. Poco más había que pudiese aprender. Necesito algo que no sea monotonía. Creo que me venía muy bien viajar de España a Estados Unidos y este año busco otra forma de cambiar la monotonía, cambiar de ciudad... es parte de ese proceso y creo que es lo que me mantiene nadando rápido. Yo no creo en nadar más de 5 o 10 años en el mismo sitio exactamente igual. Creo que hace falta cambios de entrenamiento, cambios de grupos, cambios de entrenador a veces. Incluso, sin ir más lejos, mi compañero en California Ryan Murphy lleva años allí, pero no lleva años entrenando igual. Lleva años en el mismo equipo, pero cambiando de grupos de entrenamiento dentro del equipo, cambiando de pruebas...

Sí, claro que lo entiendo. Creo que hay mucha gente que me entiende y entiende qué es lo que busco en este deporte. Y también creo que hay mucha gente que no termina de entenderme. Es cierto que hay declaraciones mías en el pasado que te van a entender que a lo mejor mañana dejo de nadar y pasado estoy de vuelta. Precisamente después de Tokio me hicieron mucho esta pregunta de si iba a seguir o no. Al final, todo se basa también en apoyos. Yo creo que si tenemos lo que necesitamos para seguir compitiendo, seguimos compitiendo. No estoy en natación por trabajo, estoy en natación porque me gusta y lógicamente cuando llega el punto en el que es difícil compaginarlo y te planteas lo mismo que se plantea a alguien que no se le valoró en su trabajo o en su vida laboral.

No, no creo que tengo miedo. Creo que en todo caso es como te digo, es buscar la chispa de nuevo. Es ver qué podemos hacer ahora con todo lo que hemos aprendido. Porque lo aprendido no se pierde. En todo caso, se puede echar de menos ciertas cosas de aquel grupo, pero creo que lo aprendido no se pierde. Sin ir más lejos, por ejemplo, a lo mejor la oportunidad de volver a España es una oportunidad de volver a competir en piscina corta y buscar un rendimiento similar que hemos tenido en piscina larga y en piscina de yardas, pero en piscina corta, la cual no he tenido la oportunidad de explotar en Estados Unidos. O a lo mejor volver a España también me permite nadar otras pruebas que no estoy acostumbrado a nadar. En Estados Unidos, es la Universidad quien elige en qué compito. Volver a España me permite esta flexibilidad, el cambio de pruebas, de foco, así que creo que es más bien una oportunidad de ver qué nivel podemos demostrar ahora sin necesitar, sin depender de alguien así.

Mi objetivo es seguir compitiendo mientras esté a un buen nivel y mientras esté disfrutando. En el momento que se complique, ya veremos. Creo que sigo teniendo pruebas en las que no he dado mi máximo nivel y no he alcanzado mi máximo potencial. Siguen quedando muchas pruebas en las que todavía tenemos un margen de mejora.

La verdad es que de todo. Creo que la razón por la que soy estilista no es solo porque se me dé bien, creo que es en parte porque necesito lo contrario de la monotonía. Necesito cambios y son los cuatro estilos. Me gustaría ver cuál es estar cerca de mi máximo potencial, por ejemplo, en 200 braza porque creo que nunca lo he entrenado al 100%. Por qué no buscar más velocidad en alguna prueba como el 50 o 100 espalda en piscina corta, o el 100 mariposa en piscina larga. Creo que son pruebas en las que tampoco estoy demasiado lejos de las marcas mínimas para los Juegos y, si las preparamos como toca, creo que podemos también alcanzar un nivel bastante serio.

Yo creo que ni Leon Marchand, ni Michael Phelps decidieron centrarse en una prueba. ¿Por qué hacerlo yo? No te digo que yo esté a su nivel, pero... ¿Por qué centrarnos a un tiro cuando podemos probar? Y si no llegamos al nivel en esas pruebas, pues ya está. Tampoco pasa nada.

Sé que tengo más que mi actual mejor marca, pero no estoy seguro en si intentarlo. ¿Por qué? Porque no sé si "tener más" significa poder competir a nivel internacional.