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Tatiana Suárez, la promesa que se quedó sin Juegos Olímpicos por un cáncer y ahora sueña con el oro de UFC

A los 20 años, Tatiana Suárez fue diagnosticada de cáncer. Tras recuperarse acabó transicionando a las MMA y este sábado pelea por el cinturón del peso paja de UFC.

Tatiana Suárez./UFC
Tatiana Suárez. UFC
Álvaro Carrera

Álvaro Carrera

Tatiana Suárez disputa este sábado el Campeonato de la UFC del peso paja. La estadounidense, de 34 años, desafía a Weili Zhang, una de las mejores luchadoras de su categoría. La pelea puede pasar desapercibida por el nombre de la aspirante, pero la historia que tiene detrás Suárez sobrecoge. Para ella estar en ese pleito ya es una victoria. La vida no le ha puesto fácil llegar a lo más alto, pero ella se ha empeñado en hacerlo.

La californiana, de padres mexicanos, empezó a practicar lucha libre con cuatro años influida por su hermano mayor. Pronto se dio cuenta de que ese era su futuro. Los resultados la acompañaron. Obtuvo resultados en categorías inferiores, y con 17 años (cumple en diciembre) logró un bronce en un Mundial. Dos años después repitió éxito. Londres 2012, cita a la que llegaría con 22 años, era su gran momento.

En el camino a los Juegos, Suárez se lesionó del cuello. Cuando los médicos le hicieron pruebas para comprobar el alcance de su lesión descubrieron que tenía un nódulo maligno en la tiroides. Le extirparon los ganglios linfáticos y tuvo que pasar por un tratamiento de radioterapia. Tras año y medio de tratamiento, Suárez fue dada de alta.

La oportunidad olímpica se había esfumado, pero eso era un segundo plano. Su vida era el deporte y volvió a practicarlo, pero quiso cambiar. Por ello comenzó, en 2013, a practicar jiu-jitsu, disciplina de la que después dio el paso a las MMA. Con un gran suelo y un wrestling élite, Tatiana no tardó en competir y tras un par de pleitos amateur debutó, disputando un cinturón, en julio de 2014. Necesitó tres combates para que UFC se fijase en ella.

La mayor empresa de MMA del mundo la puso en la edición número 23 de su reality, el Ultimate Fighter. Lo ganó y en UFC se frotaban las manos. Se llevó el triunfo en los cuatro pleitos posteriores que le pusieron. Apuntaba muy alto, pero su carrera se frenó de nuevo. El coronavirus y una lesión en el cuello frenaron su progresión. Hasta 2021 no pudo volver y cuando lo fue a hacer… se lesionó la rodilla. No fue hasta febrero de 2023 cuando pudo retornar al octágono. Venció a Montana de la Rosa y a la excampeona Jessica Andrade. Ese último pleito fue en agosto de 2023. Lleva un año y medio, con dos cancelaciones de por medio, en el dique seco.

Antes del primer parón, había ganado a excampeonas Carla Esparza y Alexa Grasso. Tiene mucho potencial y lo ha demostrado cuando ha podido pelear. Por ese motivo, y por la escasez de nuevos nombres, la UFC le ha dado la oportunidad titular pese a la inactividad. Suárez es la número uno del ranking y tiene que mostrar todo su potencial frente a la campeona del peso paja. Sin duda está ante su mayor examen, pero con lo que ha superado antes de este momento, nada es imposible para ella.

Zhang, que en el coestelar el UFC 312, disputará su tercera defensa dentro de su segundo reinado en la división debe ser considerada ampliamente favorita. Hasta el momento ha demostrado ser la mejor, con diferencia, de su división. Es muy completa y tiene la calidad para finalizar en el stiking y también a ras de lona. Esa zona, junto con los agarres, será la zona en la que la mujer milagro buscará mandar. Es su fuerte. El oro olímpico no pudo disputarlo en 2012, pero 12 años después peleará por otro oro, el de la UFC. Su historia, pase lo que pase, ya es para el recuerdo.