El Mundial provoca sorpresas de última hora en el Real Madrid

Las convocatorias recientes del Real Madrid se han visto agitadas por contratiempos de última hora: son tres encuentros consecutivos en los que los madridistas deben rectificar la lista ofrecida inicialmente por Ancelotti debido a ausencias inesperadas (Sevilla, Leipzig y Girona).

Primero fue Benzema, el pasado 22 de octubre, quien causó baja en la misma mañana del encuentro contra el Sevilla de Liga. El francés sufrió un pinchazo en el cuádriceps de su pierna izquierda en el entrenamiento previo al encuentro, el viernes 21 de octubre, que le obligó a retirarse de la sesión. Las primeras exploraciones de los médicos pronosticaron una ausencia de diez días, pero a pesar de ello el Madrid decidió incluirlo en la convocatoria del día siguiente… para descartarlo pocas horas más tarde.

La idea del francés era reaparecer el pasado domingo, frente al Girona, pero en el entrenamiento del viernes se reprodujeron esas molestias y decidió parar de nuevo. El actual Balón de Oro, que cumplirá 35 años el próximo mes de diciembre, es consciente de que el de Catar será el último Mundial de su carrera deportiva y no quiere arriesgarse a una lesión que pueda apartarle de ese campeonato. A un día del próximo partido, el miércoles ante el Celtic en el Bernabéu (18:45 horas), Karim sigue al margen del grupo.

El siguiente en caer fue Modric, que a sus 35 años también afronta el que será el último Mundial de su carrera. El croata estaba convocado para viajar a Leipzig con el resto de sus compañeros, pero el mismo día del viaje el club anunció que se caía de la convocatoria. En su caso, sufría un pequeño edema en el sóleo que invitaba a no arriesgar en un encuentro donde lo único que se jugaba el Madrid era la primera plaza. La opción de forzar existía, aunque no tenía mucho sentido en un encuentro de poca relevancia y con el Mundial a la vuelta de la esquina. Luka descansó y reapareció el domingo ante el Girona en Liga.

Por último, ante el equipo catalán llegó un nuevo sobresalto en forma de lesión menor. Tchoaumeni fue baja de última hora en una lista en la que en un primer momento sí que había entrado. La explicación oficial del club es que sufre una pequeña sobrecarga, un problema que también le ha apartado del entrenamiento del lunes y le hace ser duda para reaparecer en la Champions, en un partido donde el Madrid necesita sacar el mismo resultado que el Leipzig para abrochar la primera plaza.

¿La explicación a todo eso? El Mundial. Es una situación totalmente excepcional, porque los jugadores sólo tendrán seis días desde que se concentren con sus países (14 de noviembre) hasta que empiece el campeonato (día 20). Normalmente estas preparaciones son de casi un mes, por lo que los futbolistas tienen margen para recuperarse en caso de sufrir una dolencia con sus equipos. Esta vez, no.

Además, este es un tramo de la temporada poco decisivo en los campeonatos europeos, más allá de los clubes que se están jugando el pase a octavos en Champions. En los campeonatos domésticos aún existe mucho margen para corregir errores, algo que invita a correr riesgo cero con las lesiones. Normalmente, cuando el Mundial tiene lugar en verano, los últimos partidos que disputan estos jugadores antes del torneo son decisivos, con las finales europeas y de las copas de los distintos países, así como las jornadas decisivas de liga. En esta ocasión el panorama es totalmente diferente y está invitando a los futbolistas a adoptar precauciones excepcionales para no sufrir una lesión que les baje del avión hacia Catar.