Dani Olmo: "Nada más caer pensé en el Mundial, fue la peor noche que recuerdo"

Dani Olmo cita a Relevo para la entrevista en la azotea de un céntrico hotel de Leipzig, ciudad donde es uno de los referentes del equipo. "¿A que es bonita la ciudad? Quería que se pudiera ver, estoy muy cómodo viviendo aquí", explica. El sábado cumplió su partido 100 con el Leipzig, tras fichar procedente del Dinamo en enero de 2020.

El internacional español, fijo en los planes de Luis Enrique para el Mundial de Catar, vivió el pasado 3 de septiembre uno de los peores momentos de su carrera: una fea caída en un partido ante el Eintracht le provocó una lesión de rodilla. Ha reaparecido después de siete semanas, aunque en un momento llegó a temer que la dolencia le apartase del torneo mundialista. La recuperación ha ido bien y ahora afronta con ilusión el partido de este martes contra el Madrid en Champions, donde el Leipzig necesita la victoria.

¿Cómo está después de la lesión?

Estoy recuperado. El sábado ya jugué 10 minutos, estoy contento de volver al campo después de casi siete semanas.

Volvamos a aquella jugada en la que se lesiona. ¿Qué es lo primero que piensa al caer?

¡En el Mundial! Se lo dije al árbitro directamente y la verdad que me respetó bastante. Me dio mi tiempo… Le dije al momento que había sentido algo extraño en la rodilla. Gracias a Dios no fue nada más grave y en seis o siete semanas estoy de vuelta.

¿Cuántos segundos tardó en aparecer la palabra 'Mundial' en su cabeza en esa caída?

¡Al momento ya estaba pensando en ello!

El día siguiente a las 7 de la mañana estaba camino de la clínica. ¿Pudo dormir algo esa noche?

No, la verdad que no. Encima tenía la pierna 'tiesa' del vendaje que me pusieron. Fue una de las peores noches que recuerdo.

¿Temió que fuera una lesión de gravedad?

Un poco sí… Quise ser optimista antes de hacer el examen, pero se me pasaron muchas cosas por la cabeza. Los doctores intentaban tranquilizarme y al final no me dio mucho tiempo a pensar, lo hicimos a primera hora de la mañana y nos dijeron en los resultados que no era tan grave.

¿Pidió usted ir a las 7 de la mañana?

¡Sí! Quería saberlo cuanto antes. En estas lesiones hay que esperar un poquito más a que baje el hinchazón, pero me dijeron que no había problema. Así que cuanto antes, mejor…

Dejemos a un lado esa lesión… ¿Cómo es Leipzig?

Es una ciudad muy tranquila, la gente es muy cercana, te respeta cuando vas por la calle y eso se agradece. Estoy disfrutando mucho.

¿Y cómo es el Leipzig como club?

Es un club muy joven, pero muy ambicioso a lo largo de su corta edad. Han demostrado el proyecto que tienen, con jugadores jóvenes que vienen del Salzburgo y luego firmando a otros como a Josko (Gvardiol) o a mí por ejemplo del Dinamo. Eso te muestra el proyecto que quieren crear, es una idea clara. La intensidad, la presión, la posesión, jugadores rápidos, atacar los espacios… Es una idea muy clara la que tienen.

Además no es un equipo vendedor, este verano rechazaron 90 millones por Gvardiol. ¿Cómo es la estrategia con los jóvenes?

Es un club que quiere crecer, entonces para crecer tienes que retener a los jugadores que más despuntan. Cuando Timo Werner se fue al Chelsea, hizo varias temporadas a muy buen nivel en el Leipzig antes de dar ese paso. Es un club que tiene grandes expectativas y para eso quieren retener a los máximos jugadores posibles. Es difícil, pero es su idea.

En septiembre llegó un nuevo técnico. ¿Cómo ha sido el cambio de entrenador?

Con Tedesco alcanzamos lo máximo el curso pasado, conseguimos nuestro primer título, la Copa alemana. Siempre estaremos agradecidos. Esta temporada no la empezamos tan bien, el club decidió cambiar de entrenador y ahora con Marco Rose estamos en una muy buena dinámica, sobre todo en casa. Estamos volviendo a ganar y esperamos llegar a lo máximo con él.

Se juegan el todo o nada en la Champions contra el Madrid. ¿Cómo lo afrontan?

A nivel de ciudad, de club… Es uno de los partidos más exigentes de la historia. Es la primera vez contra el Madrid en casa, en Champions, sólo vale ganar… Es un partido muy bonito.

¿Notan ya la exigencia de equipo grande en días como este?

Sí, a nivel mediático quizá no hay tanta presión como en otros clubes, pero la presión te la pones tú mismo y la ambición de los jugadores y del club es la máxima. Con eso hay que vivir, queremos ganar cada partido.

¿Asusta el Madrid?

Es complicado, está demostrando por qué es uno de los mejores del mundo y más en este escenario de la Champions. Va a ser muy especial jugar contra ellos…

¿Qué jugador le gusta más del Madrid?

Tengo un poco de devoción por Luka Modric…

¿Qué es lo que más le gusta de él?

¡Acabaría antes diciendo lo que no me gusta! Me gusta todo. La calidad que tiene, cómo interpreta el juego, el control de balón, del partido, la toma de decisiones, la interpretación… Es un jugador que no se equivoca nunca y que lo hace todo bien.

Pensemos un poco más allá y hablemos del Mundial, porque usted es uno de los fijos de Luis Enrique. ¿Cómo es el seleccionador?

Es cercano, tiene una idea clara de lo a lo que quiere jugar y nosotros intentamos llevarlo a la excelencia. Es muy exigente tanto consigo mismo como con su staff o con nosotros. Eso es lo que hace mejor al grupo. Vamos a muerte con él porque sabemos que con su idea y con su manera de jugar nos está haciendo conseguir cosas únicas. Estamos seguros de que vamos a poder conseguir mucho más.

¿Llega al 100% al día de la lista?

Sí, ese es mi objetivo. Estar al 100% para ese día, para que el seleccionador pueda contar conmigo. Para eso trabajo.

Cuando entiende lo que quiere Luis Enrique, ¿se hace fácil jugar en España?

El mensaje de Luis Enrique es muy claro. Tiene distintas tareas, en función de si eres defensa, centrocampista o delantero y al final cuando las cumples luego es todo muy automatizado. Los que tenemos la suerte de llevar más tiempo tenemos claro a lo que quiere que juguemos, eso lo hace más fácil todo.

Pocos incluyen a España entre las favoritas al Mundial y son una selección muy joven, con descaro. ¿Eso puede ser una ventaja?

Hay que pensar en positivo siempre. En la Eurocopa llegamos a semifinales y merecimos mucho más, ahora estamos en la fase final de la Nations League por segunda edición consecutiva… Estamos haciendo un buen trabajo, tenemos que seguir con esta dinámica. El Mundial es lo máximo, van los mejores pero nosotros tenemos que confiar en lo que hemos hecho hasta ahora y creer en nuestra idea.

El martes se va a enfrentar a Marco Asensio, compañero suyo en la Selección que tiene pocos minutos en el Madrid. ¿Entiende esta situación y que pueda quedar libre en unos meses?

En el fútbol de hoy en día todo puede pasar. Sólo puedo decir que Marco es un jugador increíble, con una zurda única y un golpeo que muy pocos futbolistas tienen. Disfruto jugando con él y siempre que coincidimos estamos muy bien.

¿Le convencería para fichar por el Leipzig?

¡Claro, con los ojos cerrados!