Fernando Alonso, optimista pese a su primer abandono del año: "Buenas noticias para México"

Dolorido en lo mental, pero también esperanzado. Así se sintió Fernando Alonso tras la carrera en Austin este domingo, que acabó prematuramente para él por un problema mecánico en su Aston Martin. Es su segundo cero de la temporada y su primer abandono, algo que compromete un poco más su clasificación en el Mundial y que, entre otras cosas, permite que McLaren coja cierta distancia en el campeonato de constructores respecto a los de Silverstone.

Dolorido en lo mental porque el asturiano fue uno de los nombres propios de la carrera. Partía 19º y lo hacía desde el pit lane tras retocar su monoplaza con el parque cerrado. Su escudería, ante las pocas esperanzas de conseguir puntos en suelo estadounidense, quería probar diferentes reglajes con él y con Stroll para seguir avanzando en el coche, tanto este curso como de cara al que viene. Y el acierto con ambos fue evidente, porque los dos protagonizaron sendas grandes remontadas que los tenían noveno y décimo en el tramo final. Por eso al bicampeón del mundo le dolió especialmente el abandono.

"La mala noticia del día ha sido tener que retirarse por la suspensión o el suelo, porque algo se ha roto y por seguridad hemos tenido que parar. Duele un poco más porque cuando sales desde el pit lane y estás para ser octavo es duro", comentó tras la carrera. En el momento en el que su coche dijo basta era noveno tras superar a Tsunoda, al que ya había dejado atrás, y apuntaba a pelear la octava posición contra un Gasly que tenía mucho menos ritmo que él.

Mike Krack, jefe de equipo, reconoció tras la prueba en Austin el percance que apartó a Alonso de la pelea por la octava plaza y que le impidió sumar algunos puntos tras un fin de semana que se le había cruzado por completo. "No ha sido un problema con la suspensión, ha sido en el fondo plano, en la parte derecha del mismo y quizás porque se haya subido a algún piano o haya tenido algún contacto", explicó el luxemburgués.

La pena del asturiano se mezclaba con la esperanza por lo que había experimentado el domingo. Tanto el viernes como el sábado, el Aston Martin era un coche sin ritmo, uno de los últimos de la parrilla, y el hecho de partir desde boxes no ayudaba a terminar el fin de semana con un buen sabor de boca. Pero los ajustes hechos por los mecánicos tuvieron su efecto y los dos pilotos consiguieron ganar diez posiciones en carrera, algo que hizo ver brotes verdes al cuarto clasificado del Mundial.

"Ha sido una súper carrera. Saliendo desde el pit lane habríamos acabado octavo y noveno, otra historia respecto a los dos días anteriores. Hoy teníamos mucho más ritmo y podíamos adelantar con cierta facilidad a la zona media. Sin duda, una buena noticia", explicaba Alonso tratando de ver el vaso medio lleno, porque la siguiente prueba, en México, es dentro de siete días.

"Ahora tenemos que analizar todo lo que ha pasado porque hemos tenido un coche nuevo todo el fin de semana. Hoy, Lance ha llevado el coche nuevo con otro setup y yo con el antiguo. La carrera ha sido una FP0 para llegar a la FP1 de México preparados, pero ha sido una FP0 donde hemos sido más competitivos que el resto del fin de semana. Buenas noticias en ese sentido", analizó el piloto ovetense.