Las lágrimas de emoción tras cuatro prórrogas, 60 minutos de juego y una victoria que puede valer una salvación

Imagen para la historia la que nos dejó ayer la Liga Femenina Endesa en el Palau Municipal D'Esports de La Seu D'Urgell en Lleida. Una instantánea que ya forma parte del imaginario del baloncesto femenino español, que disfrutó de un auténtico partidazo entre el equipo local, Cadi La Seu, y el Spar Gran Canaria y que terminó cayendo del lado local 99-95… tras cuatro prórrogas.

Fueron en total 60 minutos de juego y, sobre todo de tensión contenida. Prueba de ello fueron las lágrimas de la eslovaca Veronika Remenarova tras el encuentro. La pívot terminó el partido coja tras más de 54 minutos de titánico esfuerzo que tuvo recompensa final con un triunfo que acerca al conjunto catalán a la salvación.

La jugadora eslovaca no fue la que más jugó. Ese honor queda para la estadounidense Delicia Washington, jugadora del cuadro isleño, terminó disputando 57 minutos y 34 segundos, siendo una de las 5 jugadoras que superaron los 50 minutos en un duelo de locura en el que Remenarova fue la más valorada con un total de 58 créditos gracias a sus 29 puntos y 12 rebotes.

El duelo estuvo marcado por la igualdad y la intensidad que se vivió en cada acción. Pero todo estalló por los aires en la tercera prórroga. Y lo hizo por 'culpa' de Julia Soler y un triple que mandaba el choque a otros cinco minutos extra. Cinco largos minutos para las insulares, que pagaron su corta rotación y las expulsiones de Astou Ndour y Naomie Aldatas con una derrota que deja muy tocadas a las insulares.

Spar Gran Canaria se mantiene de esta forma en la penúltima posición de la Liga Femenina Endesa, situado a un triunfo del Celta Zorka. Sin embargo, las isleñas tienen el basketaverage perdido con las gallegas, por lo que la diferencia con los puestos de descenso es de dos victorias. Por su parte, el conjunto catalán se queda con dos triunfos de ventaja sobre las canarias.