Una discutida roja complica el ascenso directo del Elche y enfada como nunca a Eder Sarabia: "Los que no queremos que se exagere somos los tontos"

El Huesca firmó ese sábado una victoria por 2-1 en el tiempo añadido (m.94) ante el Elche que le mantiene en la lucha por disputar la promoción de ascenso y frenó al equipo ilicitano, que ahora es segundo y pagó cara la expulsión de Germán Valera en el minuto 58.

El partido fue muy igualado desde el principio. El Elche se hizo con el dominio territorial en los primeros minutos ante un Huesca que generó peligro sobre todo con disparos desde lejos.

El Elche no encontró la forma de superar la poblada defensa local hasta que, en el minuto 29, logró el 0-1 con un gran disparo desde la frontal del área de Núñez ante el que nada pudo hacer Juan Pérez. El Huesca intentó reaccionar en los últimos minutos del primer tiempo con la velocidad de Valentín y Soko, pero siempre estuvieron bien vigilados.

Tras el descanso, el conjunto oscense mostró más intensidad y obligó al Elche a dar un paso atrás para defender su ventaja, una misión que se le complicó en el minuto 58 con la expulsión de Germán Valera por doble amonestación.

El Huesca intensificó su dominio, acorraló a su rival y consiguió equilibrar el marcador en el minuto 79 con un gol de Diego González tras un saque de esquina. El Elche se defendió como pudo del asedio de su rival en la recta final del partido. Dituro salvó un gol en el minuto 87 tras un disparo a bocajarro de Unzueta y dos más tarde Soko mandó el balón alto cuando lo tenía todo a favor para marcar.

En el minuto 94, el Huesca se hizo con los tres puntos con un gran disparo de Joaquín que entró por una escuadra de la portería del Elche.

El técnico del Elche, que vio amarilla y se fue muy enfadado, reclamó en rueda de prensa por la expulsión. A pie de césped, el presidente Bragarnik también le mostró al colegiado su indignación, si bien el entrenador fue rotundo: "No es amarilla ninguna de las dos faltas. Y al final, los que no queremos que se exagere somos los tontos, somos los tontos. Entonces pues bueno, Germán le pone un poco el brazo, hace como que le ha matado y le saca la segunda amarilla".

"Nos estamos jugando la vida, pues si esas dos jugadas son para expulsión, pues nada. Hoy lo tengo más claro todavía que nunca, que vamos a ganar los dos partidos y que vamos a ascender. Y eso es lo único que he transmitido a mis jugadores, que traguemos la mala hostia que tenemos, la injusticia que hemos sufrido hoy aquí, y que miremos para adelante, y que vayamos con ese hambre y con esa mala hostia a entrenar toda la semana y a poner para ganar contra el Málaga", cierra.