FC BARCELONA

La nueva vida de Lamine no tiene parones "y lo bueno es que tiene margen de mejora"

Estos próximos días se cumplirá un año del debut del blaugrana con la Selección. Su carrera no ha dejado de crecer: en esta Liga ya ha generado cinco goles.

Lamine entregó un par de asistencias contra el Valladolid./AFP
Lamine entregó un par de asistencias contra el Valladolid. AFP
Jordi Cardero

Jordi Cardero

Lamine Yamal convirtió el primer balón que tocó contra el Valladolid en un bellísimo caño a Amallah. Apenas habían transcurrido algunos segundos, pero su acción fue suficiente como para advertir qué iba a buscar el Barcelona en el encuentro. El canterano cerró el partido con un par de asistencias y la enésima demostración de que, encuentro a encuentro, sigue descubriendo nuevos techos.

La irrupción del delantero catalán obligó a Raphinha a explorar nuevos territorios. El brasileño, en el lado opuesto, ha descubierto un nuevo rol que ya explota. Ahí está su hat trick, el primero de su carrera. Y si bien en los primeros compases de Lamine en el primer equipo Raphinha fruncía algo el ceño al ver que se elevaba el nivel de competencia, ahora la química entre ellos es total. Llegaron a Montjuïc juntos, con gafas de sol, y celebraron juntos el primer gol.

Lamine tiene que acostumbrarse a una nueva vida, a una vida sin parones. La convocatoria con la absoluta le llegó muy pronto, con 16 años y unos pocos días. Fue justo hace 12 meses y desde entonces no se ha perdido ninguna llamada de De la Fuente. Ya no habrá vacaciones durante el año, algunos días de desconexión, a pesar de que aprovechó los días de descanso que le dio Hansi Flick para escaparse con sus amigos y algunos de sus compañeros a la Costa Brava.

Sin descanso

El de Rocafonda ha ganado 10 kilos de masa muscular desde que debutó y está empezando a conocer su cuerpo. Los minutos no están siendo un problema, aun siendo de los últimos en regresar de las vacaciones. Descansó los últimos cuatro minutos en Mestalla y completó el resto de encuentros, contra Athletic, Rayo y Valladolid. Y celebró goles con Balde, Dani Olmo y Raphinha. Esa buena química es una de las claves del potente inicio del Barça de Flick. "Hay un buen ambiente y una buena mentalidad. Todos dan energía para que el equipo sea más fuerte. Actuamos como una familia y eso es muy bonito", señaló el alemán tras el partido.

El Barça de Flick ha ganado verticalidad y ritmo. Y en ese contexto Lamine está todavía más potenciado. Ha agradecido el fichaje de Olmo, con quien se siente bien cerca. Además, con el balón tiene una madurez impropia para un chico de 17 años. Su segunda asistencia, a Raphinha, así lo ejemplifica. Recibió el balón en la frontal del área de Ter Stegen y condujo a distintas velocidades, viendo a sus compañeros superarle, hasta que eligió al brasileño como receptor. Raphinha se quedó solo ante Karl Hein.

Durante estos días, en X, la antigua Twitter, se ha debatido sobre si el Barça tiene mejor plantilla que el año pasado. El periodista Bruno Alemany dejó un apunte que, por muy obvio que pueda parecer, es significativo: "Conviene subrayar que no es lo mismo el Lamine de septiembre 2023 que el de septiembre 2024". Desde su entorno reafirman la tesis y van un paso más allá. "Y lo bueno es que tiene margen de mejora", aseguran.

Según Opta, el delantero catalán es el menor de edad de LaLiga con mejor contribución goleadora del siglo XXI, con 14. Le quedan casi once meses para seguir engrosando el récord. Este curso ya lleva un tanto y cuatro asistencias en tan solo cuatro encuentros ligueros. Y no hay descanso: ya le esperan Serbia y Suiza la próxima semana.