NBA

El último gran deseo de LeBron James: "Necesito jugar con mi hijo, necesito estar en la cancha con Bronny"

El jugador de los Lakers se sentó con el portal de deportes para analizar su pasado, presente y futuro, además del récord de Kareem Abdul-Jabbar.

LeBron James felicita a su hijo mayor Bronny tras un partido./Getty Images
LeBron James felicita a su hijo mayor Bronny tras un partido. Getty Images
Alejandro Gaitán

Alejandro Gaitán

Es su temporada 20 y sigue jugando como si fuera el recién llegado, con la ilusión de un novato y una capacidad física nunca vista. LeBron James , con 38 años recién cumplidos, se ha sentado en una entrevista en exclusiva con el periodista de ESPN Dave McMenamin donde ha hablado de su carrera, el más que probable récord anotador y un último sueño para los años que le quedan.

LeBron visita Sacramento este fin de semana, donde metió los primeros puntos en su carrera NBA. "Sabía que estaba listo para el momento, sabía que pertenecía en la NBA", explicaba en la entrevista. "Estaba nervioso porque no quería fallarle a nadie, pero orgulloso de haber conseguido llegar, cumplir uno de los objetivos que tenía". Su primera canasta, un tiro a media distancia desde la línea de fondo, a poco más de cinco metros levantándose tras bote. Una canasta difícil para un jugador que no siempre ha sido un buen tirador. "Sé como poner la pelota en el aro, eso sí".

Aunque James siempre ha sido un jugador cuya mentalidad siempre ha tendido hacia el colectivo primero. "Cuando digo que no soy un anotador, me refiero a que no es lo que más me define, pero se podría argumentar que sí lo soy". LeBron está a menos de 500 puntos de superar el récord de Kareem Abdul-Jabbar de 38.397 puntos como líder anotador histórico. "Cuando piensas en lo mucho que ha tenido el récord Kareem y lo grande que ha sido, conseguir superarlo...". Además, el propio James explicaba que lo conseguirá sin tener un movimiento que le identifique, como pueden ser el skyhook de Abdul-Jabbar, el fadeaway de Michael Jordan o Dirk Nowitzki o incluso el dream shake de Hakeem Olajuwon.

"Quiero ganar, perder no me sienta bien. Quiero seguir jugando a un nivel de candidato al anillo"

LeBron James

"Sigo preparando mi cuerpo y mi mente a los 38 para estar a mi mejor nivel. Poder salir a jugar y ser todavía el foco de los informes rivales me confirma que estoy jugando a un nivel alto". En los últimos 12 partidos, LeBron promedia 33.7 puntos tirando casi al 58% y los Lakers ganan. "Quiero ganar. Perder no me sienta bien", dejaba claro. Y una frase que ya escuchamos en rueda de prensa hace poco. "Quiero seguir jugando a un nivel de candidato al anillo y seguir siendo respetado cada vez que salga a pista".

Esperar a Bronny

A LeBron le quedan dos años de contrato en Los Angeles Lakers y, pese a que el equipo no está en la mejor situación competitiva, el futuro de LeBron y la franquicia parecen ir de la mano. Aunque una vez supere a KAJ, le quedará un único objetivo en su carrera NBA. "Quiero jugar con mi hijo, quiero compartir pista con Bronny" decía sobre su hijo mayor, en su último año de instituto ahora mismo. Por normativa de la liga, LeBron James Jr no podrá jugar en la NBA hasta la temporada 2024/25. 

"Ya sea en el mismo equipo o jugando uno contra otro, en el mismo partido, no defendiéndonos porque él juega de base y yo soy más interior" explicaba. Pero sigue soñando con una situación en la que su hijo, quien está proyectado para salir en la primera ronda del draft en 2024, puedan ser compañeros de equipo. "Me encantaría una situación como la de Ken Griffey Sr y Junior, sería lo ideal", padre e hijo que compartieron vestuario para los Seattle Mariners de la MLB en 1990. También ha dejado claro que no es algo que hable con su hijo, pero que Bronny sí tiene el sueño de jugar en la NBA.

Es una cuestión de tiempo. A este ritmo, LeBron superará a Kareem antes del parón del All Star, a mitad de febrero. Una vez conseguido el récord anotador, solo quedará esperar a Bronny y saber si James, quién lleva 20 temporadas haciendo historia en la NBA, puede conseguir algo, otra vez, que nadie ha hecho antes.